Mitología


Animismo


FUERZAS IGNORADAS POR LA FISICA

Según Edward Tylor, que es el primero en señalar su importancia, el animismo es el estadio original de la evolución religiosa. Según la concepción animista, el mundo estaría poblado de seres que habitarían los objetos, las plantas, los animales y los hombres.

El sucesor de Tylor en la cátedra de Oxford, Robert Ranulph Marett (1866-1943) ha criticado los análisis de su maestro a propósito del animismo. Los primitivos, asegura, no creen ni más ni menos que nosotros en los espíritus: tienen solamente tendencia a tratar los objetos como si tuvieran vida.

Muchos pueblos primitivos, desaparecidos o aún existentes, pueblan el mundo con un infinito número de seres espirituales, benéficos o maléficos, a los cuales atribuyen la causa de todos los fenómenos naturales, y por los que creen animados, no sólo el reino animal y vegetal, sino también el mineral, en apariencia inerte.

Así que el animismo es entonces la creencia de que no sólo las criaturas vivientes, sino que los objetos inanimados tienen vida y personalidad; estas personas sobrenaturales son consideradas como espíritus, fantasmas o dioses.

Los animistas creen también que los humanos poseen almas que pueden abandonar nuestros cuerpos, ya sea temporalmente, mientras soñamos, o permanentemente, cuando morimos, para transmigrar a otros hombres o simplemente vagar por ahí.

Animismo
El animista tiene el sentimiento permanente de que una fuerza, llamada mana, hace irrupción en su vida no solamente en ocasión de esos momentos solemnes que son el nacimiento, la iniciación y la muerte, sino también en sus relaciones cotidianas con sus padres, sus semejantes, los animales y la naturaleza en su totalidad. Cualquier campo está abierto al mana, que puede revestir formas extremadamente variadas según las circunstancias, los objetos y los seres para los que se actualiza. La palabra mana (equivalente al wakan de los sioux) se ha tomado de las lenguas malayomelanesias y es originalmente una interjección que expresa el sentimiento que experimenta el hombre frente aquello que le es exterior y que le seduce, que le asombra, que le aterra, que admira. La noción de mana tiene un significado fundamentalmente religioso y mágico. El mana se conviene en una categoría de pensamiento y de percepción del universo.

Los amuletos son objetos con gran cantidad de mana utilizados para darle diferentes fuerzas al usuario, como protección, suerte, poder, entre otras.

El descubrimiento, a principios del siglo XX de la noción de mana en Oceanía suscitó un gran interés y numerosas discusiones entre los etnólogos. Particularmente facilitó el ímpetu del animismo. Puede colocarse en esta escuela de pensamiento a Emile Durkheim y Marce Maus, que consideran el mana como la forma primitiva e indiferenciada del alma moderna.

También muchas devociones utilizan el Tótem - no son más que símbolos de grupos sociales que necesitan identificarse mediante los mismos. Los miembros de una etnia comparten una tradición cultural común: una lengua, un territorio y una religión, pero la conciencia colectiva que asegura la cohesión constituye el vínculo esencial.

Animismo
El vocablo tótem deriva del ojibeway (chippeway) y, al parecer, fue introducido por J. Long, intérprete indio del siglo XVIII, quien lo escribía "otam". No obstante, la ortografía de este vocablo es algo incierta; de ahí que se ha escrito de varias maneras. El indianista ojibeway Peter Jones le asigna una expresión que equivale fonéticamente a "toodaim"; Warren a "dodaim" y Assikinak a "ododam". Finalmente Keating, James y Schoolcraft lo llamaron "tótem". El tótem protege al hombre, y éste le prueba su veneración de diversas maneras. Existen varios tipos de tótems: 1) Tótem de tribu (clan-tótem) que es común a toda la tribu y pasa de generación en generación. 2) Tótem sexual, que es común a todos los hombres o a todas las mujeres de una tribu. Pertenece exclusivamente a un sexo. 3) Tótem individual, que es propiedad de un solo individuo y a cuyos herederos no puede transmitirse.

HECHIZOS Y ALGUNOS RITUALES

Dentro del animismo podemos encontrar centenares de hechizos y rituales, para diferentes tipos de cosas.

A continuación presentaremos algunos de ellos que han desempeñado un papel importante en los pueblos primitivos y se conservan aun, en parte en el mito y el culto de pueblos mas avanzados.

Para perjudicar al enemigo:

Es uno de los procedimientos mágicos mas utilizados. Consiste en fabricar su efigie con materiales de cualquier naturaleza y sin que la semejanza sea requisito indispensable, pudiéndose también decretar que un objeto cualquiera constituirá una efigie. Todo lo que a la misma le pase, recaerá sobre la persona cuya representación constituye. Basta herir una parte de la primera, para que enferme el órgano correspondiente de la segunda. Esta misma técnica mágica puede emplearse también con fines benéficos y piadosos.

Existe otra técnica, consiste en coger algunos cabellos suyos, limaduras de sus uñas o pedazos de sus vestidos y someterlos a manejos hostiles o vejatorios. La posesión de estos objetos equivale al dominio de la persona, la cual experimenta todos los efectos del mal que se inflige a los mismos. Según los primitivos conocer el nombre de la persona o del espíritu procura ya un cierto poder sobre ellos.

Para curar una herida de arma:

Para curar una herida basta con engrasar el arma que la produjo. Algunos labradores ingleses siguen aun, hoy en día, tal receta y cuando se han herido con una hoz, procuran conservar esta en un perfecto estado de limpieza, con lo cual creen evitar la supuracion de la herida.

Animismo
Para proteger a un dios:

El rito a continuación, se practicaba en Egipto para proteger a Ra (Dios del sol) de su mortal enemigo Apepi.

“Todas las noches, cuando Ra volvía a su residencia en el inflamado occidente, tenia que sostener una encarnizada lucha contra un ejercito de demonios, conducidos por Apepi. Ra luchaba contra todos ellos toda la noche y a veces las potencias de las tinieblas conseguían ensombrecer el cielo con negras nubes y debilitar la luz del sol, incluso durante el día. Con el fin de ayudar al dios se celebraba cotidianamente, en su templo la siguiente ceremonia:

Se fabricaba con cera una imagen de Apepi, al que se daba la forma de un horrible cocodrilo o de una serpiente de innumerables anillos y se escribía encima con tinta verde el nombre del maléfico espíritu. Colocada esta figura en una vaina de papiro, era envuelta en negros cabellos y después escupía encima el sacerdote, la cortaba con un cuchillo de sílex, la arrojaba al suelo y la pisaba con su pie izquierdo. Por ultimo, terminaba la ceremonia quemando la figura en una hoguera alimentada con determinadas plantas. Destruido Apepi todos los demonios a su mando sufrían la misma suerte. Este servicio divino, que iba acompañado de ciertos discursos rituales, se celebraba ordinariamente por la mañana, al mediodía y por la noche; pero podía ser repetido en cualquier momento del día cuando rugía la tormenta, llovía atorrentes o se mostraba el cielo oscurecido por negras nubes. Los perversos enemigos de Ra experimentaban los efectos del castigo infligido a sus imágenes del mismo modo que si tal castigo hubiera sido aplicado directamente. Huían y el dios del sol triunfaba de nuevo” Tomado de Tótem y Tabú (S.Freud).

Para producir lluvia:

Esta es una practica mágica destinada a provocar la lluvia y a lograr una buena cosecha.

Se provoca la lluvia por medios mágicos, imitándola y reproduciendo artificialmente las nubes y la tempestad. Los ainos japoneses, por ejemplo creen provocar la lluvia vertiendo agua a través de un cedazo y paseando procesionalmente por el pueblo, una gran artesa provista de vela y remos, como si fuese un barco. La fertilidad de la tierra queda mágicamente asegurada ofreciéndole el espectáculo de relaciones sexuales.

En algunas regiones de las islas de Java, cuando se aproxima el momento de la floración de arroz, los labradores y las labradoras van por las noches a los campos con el fin de estimular, mediante su ejemplo, la fecundidad del suelo y garantizar una buena cosecha.

HECHICERIA Y BRUJERIA

Animismo
La magia es el arte o ciencia oculta con que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, o con la intervención de espíritus, genios o demonios, efectos o fenómenos extraordinarios, contrarios a las leyes naturales.

La magia puede ser usada en beneficio de la comunidad o de un individuo, o para propósitos antisociales. La hechicería es el uso de la magia con el intento de dañar a otra persona. La hechicería es practicada por algunas sectas, como también por personas sin religión específica.

La brujería, como la hechicería, es un intento por dañar a otra persona a través de medios sobrenaturales. A diferencia de la hechicería, la cual requiere sustancias materiales, la brujería es la cualidad de un individuo, y los brujos operan sólo a través de medios psíquicos.

Tanto en la brujería como en la magia se encuentran estos elementos:

  • La realización de rituales o de gestos simbólicos.

  • Pronunciamiento de un hechizo.

  • Una condición prescrita del que efectúa el rito.

  • Diferentes culturas y personas independientemente de su religión, también creen y practican ritos del animismo, como amuletos, hechizos, adivinación, espiritus, etc.

    REFERENCIAS

    CAROL EMBER - MELVIN EMBER, Antropología Cultural.

    FREUD, S., Tótem y tabú, Alianza, Madrid, 1982.

    SERENA, NANDA, Antropología Cultural. Adaptaciones Socioculturales.

    http://home.abaconet.com.ar/users/senzar

    http://www.cica.es/aliens/dflus/sc14sanc.html

    http://www.geocities.com/Athens/Ithaca/6643/mundo.html




    Descargar
    Enviado por:Diego Vidal
    Idioma: castellano
    País: México

    Te va a interesar