Sociología


Sociología política


  • SOCIOLOGÍA POLÍTICA

  • La teoría económica de la democracia y de la sociología política.

    Democracia es una forma de gobierno que se basa en la representación. La representación hace referencia a que se corresponde con la opinión del pueblo.

    Teoría Clásica de la democracia es la formulada por la ilustración en el siglo XVIII sobre el gobierno, que busca el bien colectivo común.

    El método democrático para esta teoría es el conjunto de instituciones que describimos como instituciones que quieren el bien común, se reúnen en asamblea para deliberar y lograr ese bien. Son los individuos los que toman las decisiones de gobierno sobre su bienestar, bien directamente, bien, sobre todo, mediante la elección de representantes que se encargan de regularlo. Schumpeter dice que para qué queremos una teoría de la democracia si no corresponde con la realidad. Necesitamos una teoría que sea realista.

    Desde el punto de vista de la teoría clásica, existía una razón epistemológica, formulada por Condorcet, que fue el primero en darse cuenta de que las mayorías no están equivocadas; existe una probabilidad muy pequeña de que la mayoría esté equivocada. Se llama teoría de los jurados: cada individuo tiene una pequeña propensión a estar en lo cierto. La probabilidad de que un colectivo se aproxime a la verdad o a lo correcto, aumenta exponencialmente o bien con el número de personas que tome la decisión o bien con la fracción. Esto lo usó para decir cuántos miembros deben componer un jurado. Pensó cuál sería la mejor manera de tomar estas decisiones con jurados y piensa que es mejor que estén aislados, que no tengan sesgos añadidos, mediante opiniones de amigos, periódicos…

    La democracia se hace necesaria porque todos los individuos se consideran iguales y porque todas las decisiones deben ser representadas.

    Las decisiones colectivas pueden tener mayor importancia que una opinión individual.

    Para que la teoría clásica de la democracia tenga fuerza, hacen falta tres cosas:

    • Que exista algo que podamos identificar con el bien común;

    • Que el método democrático exprese la voluntad general de un pueblo que no puede ser sino lo que identifica el bien común;

    • Que el método democrático fuera el único que identificase el bien común.

    Sin embargo, estos pasos son muy cuestionables. Schumpeter no cuestiona qué es el bien común. De existir la voluntad general, entonces esta voluntad identifica el bien común. Ataca la teoría democrática por el lado de algo que podemos llamar voluntad general. Lo centrar para él sería cuestionar que la voluntad general tenga sentido empírico y lógico.

    Se concentra en la dificultad del método democrático para demostrar la existencia del bien común. Dos condiciones para que tenga sentido el concepto de voluntad del pueblo son:

    • La existencia de una voluntad individual, privada, sobre las cuestiones políticas. Cada individuo debe ser capaz de decidir lo que quiere.

    • Tendrá que ser cierto, además, que la suma de esas voluntades democráticas individuales conduzca a encontrar el bien común.

    Schumpeter cree que la dictadura ilustrada a veces resuelve conflictos mejor que la democrática. Se cuestiona si cada individuo tiene una opinión formada, identidad política claramente definida.

    La conducta racional de los consumidores y empresarios está inducida por los mecanismos de competencias y el mercado. Los consumidores se dejan influir de determinados modos. La teoría clásica de la democracia haría pensar que los individuos en política son igual de racionales que en el mercado. Schumpeter dice que producen intereses articulados en el ámbito político, igual que en el mercado.

    Cuando saltamos a las grandes cuestiones públicas, nuestras opiniones no valen mucho, no tienen interés. Lo que afirma Schumpeter es que hay juicios responsables y, por tanto, ese sentido de responsabilidad se pierde.

    Un decisor racional ejerce una lógica que acumula una información, pero que no se hace en política porque te dejes llevar por consideraciones de la radio, tv… Si le diéramos a la política la importancia que realmente tiene, elegiríamos de forma más racional. Debemos tener información sobre hasta qué punto, el partido al que votamos cumplió sus expectativas en la última legislatura que gobernó. Cuanta menos información tiene el individuo, más posibilidades tiene de ser influido por el mercado político.

    Se habla de voluntad manufacturada cuando el individuo es influido por los agentes del mercado, políticos… Schumpeter define la “democracia” como él método para lograr fines que no están vinculados a fines particulares. Lo importante es el procedimiento, no el resultado. “Método” es el conjunto de instituciones políticas usadas para llegar a decisiones; en el método, unos individuos (líderes) compiten entre sí por el voto de los individuos y toman decisiones en la medida en que trata de ser aséptica.

    Los gobiernos se reemplazan pacíficamente, comparten derechos y libertades que son necesarias para que la democracia, en general, funcione.

    “Políticos” son aquellos que compiten por el voto. La parte pasiva es la de los ciudadanos. El concepto de líder político es necesario explicarlo desde una teoría normativa de la democracia clásica.

    El término “Partido Político” tiene un carácter más claro que el que tenía durante la época de la teoría clásica de la democracia. Se considera que Schumpeter tiene una visión bastante realista en su teoría de la democracia, conocida como minimalista porque explica lo básico de la democracia.

    Hirschman escribió Salida, voz y lealtad, La retórica de la intransigencia.

    • Amenaza (principio s. XVIII- finales s. XIX)

    • Perversidad (s. XIX - I Guerra Mundial)

    • Inutilidad (futility): creación del Estado de Bienestar.

    A pesar de nuestro escepticismo sobre el gobierno, el democrático es el mejor en la medida en que es el único régimen de igualdad que garantice libertades básicas. Existe la posibilidad de sancionar aunque la voluntad sea manufacturada.

    En este punto nos hacemos una pregunta economicista: ¿qué consecuencias tiene esto? ¿Hace que un gobierno sea mejor o peor? Schumpeter habla del mecanismo de sanción y dice que la función del gobierno no es acumular poder (aunque puede que le interese), sino que su verdadera función es administrar y producir legislación; lo que ocurre es que su función se cumple como subproducto de la competencia política (ésta lo que busca es seguir en el poder).

    Los individuos, actuando sólo por su propio interés, producen un beneficio para todos en términos económicos (“Manos Invisible”, de Adam Smith), trasladando este mecanismo de mano invisible al orden político. ¿Se producen buenos resultados en política? Esta es la pregunta que se hacen Schumpeter y Downs, aunque éste la hace de manera más precisa. ¿Es de esperar que los resultados sean eficientes? ¿Bajo qué condiciones podemos tener un buen gobierno dado que vamos a dar una concepción mínima de la democracia? ¿Son las ciudades culturalmente homogéneas más tendentes a tener un mejor gobierno?

    En “Teoría Económica de la Democracia”, plantea tres problemas: desigualdad, apatía e ideología. Trata de dar respuesta de porqué sucede eso como punto de partida. Downs trata de explicar bajo qué condiciones se contribuye al bien público en la lectura de la teoría económica de la acción política en la lectura de la teoría económica de la acción política en una democracia. Lo importante no es que los supuestos sean realistas, pero desde este enfoque económico (porque lo hacen economista se le denomina así), se siguen predicciones, verdaderas e importantes que permitirán, a su vez, observar cosas que son más importantes. Es un modelo analítico muy elemental, donde Downs introduce un punto de vista interesante respecto a Schumpeter.

    Hace una distinción entre información perfecta e imperfecta. La información perfecta no existe. Quiere decir que todos los participantes en el juego, en este caso, en la democracia, tenemos información sobre todos los intereses para el juego (ámbito político). Todos tendríamos la máxima información política. Si hubiese ese tipo de información en un régimen democrático sencillamente descrito lo que sucedería es que los ciudadanos tendrían un gran control sobre los gobernantes y estos no podían desviarse de sus preferencias porque todos reaccionarían contra ello. Sería un contrato perfecto entre ciudadanos y gobernantes. Aquí se cumple el mecanismo de la mano invisible, ya que se expulsaría del poder a los gobernantes que no cumplen y aceptaría a los que sí cumplen. Así habría una alternativa constante en el gobierno porque la oposición lo tendría fácil, al conocer toda la información y harían todo lo posible por mejorar lo que no hace el gobierno.

    ¿Por qué no existe información perfecta? Porque es un bien costoso, hay que adquirir información antes de actuar. Cuando uno tiene que tomar decisiones surgen dos cuestiones: cuánta información adquirir y qué vamos a elegir. Limitamos nuestra información antes de tomar decisiones. Como es muy difícil y costoso tener información perfecta, la sociedad no está controlando al gobierno.

  • Desigualdad en la democracia.

  • La información cuesta y unos individuos tienen más información que otros. Los que tienen más recursos son los que influyen en los individuos que tienen menos recursos y, por tanto, menos información.

    La desigualdad de recursos dará lugar a desigualdad política, porque la información es imperfecta. Lo que hay es igualdad formal, legal. Las desigualdades de recursos sociales manifiestan en política a través de desigualdades de influencia.

  • Otra consecuencia sería la existencia de ideologías y el papel que juegan en la democracia.

  • Las ideologías son una respuesta política del mercado por la escasa información que tiene la gente. ¿Por qué debería haber ideologías que cumplieran los supuestos de Downs? Porque no se suele exponer todo el programa político, sino que se dan resúmenes de los puntos que se definen cada ideología y que se consideran más relevantes. Es muy complicado decidir qué partidos son los que satisfacen nuestras necesidades.

    Downs simplifica el problema de la decisión en que los políticos quieren tener una marca o un estilo particular para situarse en el espectro político y que la gente se identifica con él.

    Esto en ciencia política es estándar, pero tiene algo de raro porque según esto las personas que tendrían más interés por una ideología serían los menos informados. Esto no siempre es así, porque hay personas que tienen una ideología fuerte y también pueden dar muchas respuestas ideológicas y matizar las mismas. También hay votantes que están muy informados pero son muy poco ideológicos.

    Consecuencias de la operacionalización sencilla de Downs:

    Hotelling hizo un artículo sobre competición en el espacio, es decir, competir por una posición en el mercado, aplicable al mercado político. Podríamos suponer que las ideologías son un espacio (izquierda - derecha) y que cada partido se sitúa en un punto de este espacio. Hay una distribución del electorado para esto. Los individuos votan al partido más próximo a su ideología. El político que se mueva, ganará a la gente que se sitúe más próxima a su punto en el espectro ideológico.

    La paradoja de la votación es el problema de la falta de decisión mayoritaria cuando hay más de dos opciones. Puede aparecer un ciclo de mayorías que hace referencia a que no existe una preferencia mayoritaria. Individualmente, las personas ordenan sus preferencias de forma racional, pero no sabemos cómo se traspasan esas preferencias al grupo.

    Sobre muchas opciones, la posibilidad de que haya una mayoría sería un supuesto teórico porque en la práctica se dará pocas veces. En estos casos, el papel del político se hace muy importante, porque debe saber marcar la agenda, para que en la votación salga la opción que él quiere. El procedimiento para las votaciones tiene consecuencias para el resultado final, no hace falta engañar; basta saber cuáles son las preferencias de la gente y cómo realizar la votación.

    ¿Cómo se evita la paradoja de la votación?

    Cuando tienen un único pico en una escala posible, de forma que todos los individuos ordenan sus preferencias de manera tal en que son unimodales. Cuando el espacio tiene una única dimensión para ordenar, es cuando se produce una mayoría. Cuando hay un ciclo de mayorías, es probable que se dé la manipulación.

    La ideología hace que un individuo que tiene una posición en la escala, a medida en que otras ideologías se sitúan en posiciones contrarias a la suya, tenderá a querer menos esas posiciones contrarias. Existe un consenso básico en que la ordenación general se da en torno al eje izquierda-derecha.

    Las ideologías no son tanto una forma de resolver tu problema de economía de la información, sino la forma que tienen los gobernantes para coordinarse y solucionar situaciones caóticas o cíclicas.

    En las luchas ideológicas, los partidos buscan que los individuos valoren sus preferencias para que todos voten ideológicamente. A veces los partidos suman una segunda dimensión a los problemas para obtener situaciones más ventajosas (EJ: eje izquierda-derecha y eje nacionalista-centralista). Ahora los partidos se sitúan en este nuevo eje, lo que da lugar a un nuevo juego de mayorías.

    Muchas veces, que haya dos espacios es resultado de los políticos, aunque, tarde o temprano, los partidos terminan situándose en el eje izquierda-derecha.

    El razonamiento elemental sería: ¿dónde deberíamos encontrarnos a los partidos, si los individuos votan ideológicamente? La tendencia es lo que se denomina “votante mediano”, que significa que se sitúan en la mediana de la distribución.

    Los partidos tienden a converger en lo que se llama el votante mediano, y también a parecerse entre sí y a situarse en el centro. La teoría dirá que los partidos de masas en la democracia, se parecen y terminan ofreciendo lo mismo, porque la gente vota de forma ideológica. No gana lo que es más querido sino lo que menos rechazo causa. La opción que gana es la que nunca es última.

    Si los partidos se parecen mucho, puede haber gente que se sienta alienada políticamente y que se abstenga. En España, se abstiene más la gente de izquierdas. La existencia de terceros partidos como IU, quita capacidad de maniobra al PSOE.

    Si la sociedad está fragmentada, entonces es más probable que aparezca mayor número de partidos (pluripartidismo), que en parte está determinado por las preferencias. Haciendo un análisis comparado, en todos los países siempre hay dos grandes partidos.

  • Otro aspecto esencial, es la cuestión de la apatía de los votantes

  • Schumpeter dice que no hay una voluntad política que sea fuerte para formar la voluntad colectiva. Downs habla de apatía o ignorancia racional y demuestra que no tiene sentido, que la información o la política son irracionales.

    ¿Cuánto va a mejorar la actuación de los gobiernos si los individuos tienen mucha información? Poco, prácticamente cero. El coste que esto tiene puede ser positivo, con lo cual, el coste es mayor que el beneficio instrumental de obtener información política. No es irracional. El ciudadano, en tanto que es racional, tiene muy poca información política.

    Hay un argumento complementario que, en lugar de mirar a los individu0os, supone que fuésemos una ciudadanía política bien informada. Esta información que nos ofrece la ciudadanía política sería un bien público. La producción de bien público parte de la ley que obliga a la gente a pagar impuestos. La sociedad política funcionaría mejor con más conocimiento político pero lo hacemos con este otro razonamiento: da igual que participe o no, que me informe o no, porque los bienes me llegarán igual por la acción de otros. La desinformación sería un efecto real a la conjunción e la política individual y de la de masas. La gente vota por sentido de responsabilidad, porque se supone que vota al partido que defenderá sus intereses.

    El problema es la decisión individual, ya que todos hacemos un cálculo racional instrumental de porqué hacemos determinadas cosas. Esto depende de la sensibilidad de cálculo que tenga cada individuo.

    La dimensión representativa de la democracia

    Las sociedades democráticas modernas son gobiernos representativos, los llamamos democracia pero pierde su significado de gobierno para el pueblo. El gobierno representado se crea antes que el democrático.

    A principios del s. XX, los gobiernos representativos se van haciendo democráticos porque se entiende la relación entre el político y el cuerpo electoral libre. El principio esencial para decidir cargos en Atenas es una asamblea. En Grecia era por sorteo o por turnos.

    Concepto de representación: vínculo entre el ciudadano y el político, que nosotros lo entendemos a través del voto. ¿Qué esperamos de un representante? ¿Cuándo puedo decir que no me siento representado? La relación de representación se establece porque el representante está ejercitando su mandato a través del voto que le concedió el representado.

    El mandato imperativo no existe. Quiere decir que el representante no tiene obligación legal con sus electores. Tiene que haber confianza en el representante porque esperamos de él que sirva a nuestros intereses de la mejor manera. ¿En qué medida lo quieren controlar?

    • A través de la rendición de cuentas: aunque pueda tomar decisiones libremente, la gente quiere que rinda cuentas y poder renovar la confianza en él cada cierto tiempo. Aquí entra en juego el voto.

    • Antes de rendir cuentas, debe ser sensible a mi interés, mi opinión en cada momento, que no se desvíe durante su mandato de lo que es el programa político que yo he elegido.

    El voto es fundamental para tener un representante. Con nuestro voto podemos hacer dos tipos de juicios:

    • Podemos mirar las propuestas de los distintos políticos y tratar de elegir la que nos parece mejor, porque esperamos que su comportamiento político favorezca. Este tipo de voto se denomina voto prospectivo, porque voto pensando en el futuro, conforme a las promesas. Que va a estar cercano al punto de vista ideal.

    • Exigir cuentas, que te guste lo que propone un partido pero que en el pasado gobernó otro que lo hizo muy bien; o que el partido que te gusta haya gobernado mal y no cumplió con sus promesas. Esto se llama voto retrospectivo, porque consideras el pasado para votar.

    Hacer las dos cosas a la vez es casi imposible. El voto es un mecanismo imperfecto para ello. Dar el voto al que crees que merece tu confianza por su ideología o también para castigar al que lo ha hecho mal.

    Esto genera un debate y hay encuestas sobre ello. El hecho de que haya elecciones, ¿cuenta o no cuenta? El problema es que hay instituciones y votantes pobres, poco informados.

  • LA RELACIÓN DE REPRESENTACIÓN Y EL CONTROL DE LOS GOBIERNOS

  • Lectura: Belén Barreiro: Justificaciones, responsabilidades y cumplimiento de promesas electorales.

    ¿Cuánto se puede esperar que los gobiernos hagan caso a la opinión pública? ¿Qué es un gobierno representativo? Un gobierno nunca es realmente vinculante, porque a veces actúan contra la opinión pública y contra la voluntad del pueblo. No puede ser un gobierno autónomo porque tiene que actuar por el pueblo y no se debe mover con el fin de captar votos.

    Cuando en los '80 el PSOE ganó las elecciones, no cumplió sus promesas de salir de la OTAN y de llevar a cabo una política keynesiana. Se disculpó alegando que no conocía las cuentas del Estado hasta que llegó al poder. Esa explicación le permite actuar legítimamente contra la opinión pública.

    Tesis del artículo de Barreiro: cuando ya no se pueden dar razones, cuando no hay debate, es cuando actúa la opinión pública. Hay información relevante que sólo saben los políticos. Pero en ciertos casos, como nuestra información se acerca a la que ellos tienen, las opiniones son parecidas.

    En otros casos, la única posibilidad es quitar valor a la opinión pública. Hay órganos no democráticos como el Tribunal Constitucional y los Tribunales supremos. Se intenta convertir el tema del aborto en un asunto constitucional y así no se hace frente a la opinión pública.

    Límites a la opinión pública

    Tribunal constitucional: se desplazan ciertas cuestiones a estas instancias.

    Bancos centrales. Son independientes y autónomos. Así, el Gobierno no tiene que rendir cuentas sobre ciertas acciones.

    No todas las instituciones antimayoritarias son iguales. Los Bancos centrales “atan” al Estado, no le permiten coaccionarles con nada. La contrapartida es que éste pierde la capacidad económica de controlar ciertas decisiones.

    Las condiciones donde podría funcionar lo normativo son raras en la práctica; como las morales, son temas abiertos. Los tribunales tienden a responder bien al deseo de la mayoría a pesar de no ser mayoritaria y de no ser elegido directamente. Hay una correlación entre sus decisiones y la opinión pública.

  • LA CORRUPCIÓN POLÍTICA

  • La corrupción es natural en la política. Hay dos versiones. La primera dice que todos los políticos son corruptos y, sobre todo, que se da en países poco democráticos, países subdesarrollados. En sociedades democráticas tienen unos medios de comunicación más o menos autónomos que critican la política.

    La segunda versión opina que la corrupción puede ser más o menos buena (Hunttington). Es mejor que funcione una burocracia ineficiente que corrupta. Está claro lo que es la política ideológica, que es un programa vinculado a unas ideas con las que tratan de ser coherentes y coordinar al electorado para que se identifique la gente con esa ideología. Otra cosa sería ofrecer cosas particularistas y que se atrae a la gente con promesas particulares. Ejemplo: América Latina, donde no sería puramente ideológico, sería corrupta porque sólo beneficia a las zonas en que se sabe que le han votado.

    Cuanto más ideológico sea el mercado político, menos probable que haya políticos corruptos. Hay países en los que siempre se han comprado muchos votos, peor se ha observado en los últimos 15/20 años, la explosión de la corrupción, puesto que se soborna a los políticos para introducirte en este mundo y para frenar la influencia de otros grupos.

    Al acabar la guerra fría, se ha dado mayor importancia a la corrupción porque hay políticos de ciertos países que son muy corruptos. Esto ha creado una mayor conciencia en la prensa, que destapa casos de este tipo.

  • LAS BASES SOCIALES DE LA DEMOCRACIA (I):

  • DEMOCRACIA Y DESARROLLO ECONÓMICO

    Los sociólogos se preguntan el porqué los procesos de cambio social provocan cambios políticos. Hay dos respuestas: la funcionalista y la estructuralista.

    • Respuesta funcionalista: posición teórica que sostiene que las instituciones políticas se adaptan a las necesidades funcionales del sistema social (ej.: mayor o menor división de trabajo, mayor o menor desarrollo económico…) Corriente teórica dominante hasta los años 70.

    • Respuesta estructuralista. Dentro del estructuralismo, la postura más importante es el marxismo y sus variantes. “La historia es una lucha de clases”, “historia concebida como desarrollo de las fuerzas productivas”. El momento democrático es el resultado de un desarrollo de las fuerzas productivas. En los '70 (Hunttington, Tercera ola) surge la cuestión de que los análisis de larga duración no son buenos. Es más estratégico atender a los actores reales del momento. Con Hunttington, podemos decir que comenzó otra forma de estudiar estos momentos mediante la observación de transiciones (estudios de procesos de cambio, política rápidas…)

    * Escuela de la modernización. Ha sido la forma de pensar dominante hasta los '70, en torno al problema del cambio político y cultural (funcionalista). Históricamente, la principal llamada de atención es si hay alguna relación entre cultura política, estructura social y desarrollo económico. El trabajo inicial es de Lipset, texto de los '50, que reimprime en su obra El hombre político, muy importante hasta los '80, sobre si el grado económico de un país influye en que sea más o menos democrático. Lipset se propone dar razones sobre esto:

    'Sociología política'
    Índice de poliarquía de Dhal (fotocopias 4)

    PIB

    + Autoritarismo + Democracia

    Variables que influyen:

    * La Pobreza conlleva desigualdad, y ésta conflictos polarizados, ideologías extremas. Oligarquía.

    * La riqueza da lugar a la educación, y ésta a demandas sociales. Con educación se tiene mayor tolerancia, un clima o una ideología más proclive a cambiar el gobierno. Además, se aumenta el asociacionismo, disminuye el individualismo. Se crece en sociedad civil, que lleva a la Democracia.

    * La modernización acentúa el desarrollo ideológico.

    El mayor factor sobre el que Lipset insiste es el fortalecimiento de la sociedad civil. División del trabajo complejo, mayor educación, pluralismo. Con ello ser requiere la cooperación activa entre capitalistas y proletarios, que no siempre tiene que ser lucha. Los sindicatos surgen espontáneamente. Además, cuando la economía crece, el poder está más disperso, se separa la economía de la política.

    En conclusión, cuando hay una sociedad fuerte que demanda participación política, surge la democracia, sociedad fuerte y plural. Algunos fenómenos asociados con la modernización (comunicación de masas) tienen efectos negativos sobre el funcionamiento de la política. Para la escuela del desarrollo político decir que el desarrollo económico provoca democracia es lo mismo que decir que los países pobres tienen dictaduras. En cambio, hay países con un nivel de renta bajo y que no tienen dictadura.

    (La teoría de la modernización es una teoría endógena.)

    * Otra explicación (explicación exógena) afirma que las democracias pueden surgir en cualquier situación económica, aunque es cierto que se mantienen mejor en países ricos que en los pobres. (ver fotocopias en inglés)

    El énfasis empírico de este trabajo se centra en el hecho que es el desarrollo económico el que puede aumentar el proceso de llegar a una democracia. Ayuda a las probabilidades de que esto se mantenga, es mejor para las democracias que para las dictaduras las cuales decrecen monótonamente con el desarrollo económico. Sostienen que no puede ser interpretada endógenamente, pues hay variables exógenas.

  • LAS BASES SOCIALES DE LA DEMOCRACIA (II):

  • VARIABLES CULTURALES

    Las variables culturales son el soporte de los valores democráticos. Muchas veces se inventan para la ocasión. Tienen carácter retrospectivo. Manera fácil de descargar la necesidad de explicar cosas.

    Los argumentos culturales son siempre sospechosos y xenófobos. Las teorías culturales sobre la democracia son igualmente sospechosas.

    ¿Qué es lo que importa en la cultura de una sociedad a la hora de explicar el régimen político? ¿Cuál es el mecanismo, cómo influye en el régimen político? Estas dos preguntas no se responden muy a menudo en los estudios realizados. Lo más común es remitirse a Montesquieu, que tiene explicaciones culturalistas para el tipo de leyes.

    La referencia más importante en este aspecto es Verba, S y Almond, G., La cultura cívica, donde se trata de remediar la correlación imperfecta entre desarrollo económico y democracia, por considerarla una teoría más completa que la de la modernización. Hay casos en los que el desarrollo económico favorable convive con un régimen no democrático. Se argumenta a través de la cultura: ciencia de la conducta en sociología política.

    Proponen que, además de instituciones e individuos, hay actitudes y creencias, valoraciones, que influyen.

    Cultura política es la orientación psicológica de los individuos hacia los objetos sociales (otros individuos y las instituciones). Trata sobre el soporte psicológico de la política como algo subjetivo de cada individuo. Para ello usan un esquema parsoniano donde definen tres tipos generales de cultura política:

    • Localista: orientada hacia la esfera más inmediata de la acción. No tiene orientación específica.

    • De súbdito: atribuida a los católicos, deferencia a las autoridades. Es consciente de que hay alguien superior.

    • Participante: el que cree que debe intervenir en política.

    Sobre estos tres tipos de ideales se hacen combinaciones. La más importante es la local-participante, y la llaman cultura cívica. Da una fuerte sensación de eficacia política. La cultura política de un país es la cultura política modal, la que se encuentra con más frecuencia entre los tipos anteriores.

    En los '60 se pensaba que el exceso de participación y de movilización ciudadana era malo para el mantenimiento de la democracia y estaba bien visto como ciudadano eficaz el que sólo actúa en los asuntos más cercanos.

    Inglehart define al individuo cívico con estos tres indicadores: confianza interpersonal, satisfacción con la vida y actitudes hacia el cambio revolucionario (en el sentido contrario, cuanto más a favor de la revolución, menos cívico)

    La variable relevante no se ha definido aún. Las teorías culturalistas fuertes creen que los valores son necesarios para la democracia, origen independiente del desarrollo económico. Se trata de que hay civilizaciones favorables a la democracia y otras que no lo son.

    Las teorías culturalista débiles consideran que un determinado tipo de orientación psicológica de los individuos son necesarios para que la democracia se pueda crear. Esta visión cree que la cultura no determina nada, sino que lo importante son las creencias de los individuos.

    El mejor predictor de una democracia es si es suficientemente rico. La economía es importante porque a partir de ciertos niveles de renta hay aceptación. La alternancia de poder es beneficiosa para todos. Con niveles bajos de renta ser perdedores supone un coste muy alto.

    (Lecturas: fotocopias institucional performance, en inglés)

    Putman aprovecha un experimento institucional de Italia que tiene lugar en los '70. Se da la posibilidad de autonomía regional, prácticamente autogobierno, con numerosas competencias. Italia no tuvo tribunal constitucional hasta los '70. Hubo normas que no se pusieron en práctica después de la guerra, como la autonomía. Italia y España tienen gran variedad y contraste interno.

    Putman se propone ver instituciones democráticas en diversos contextos, teniendo en cuenta: 1)el diseño institucional, (el cómo estén diseñadas las instituciones afecta al desarrollo de la democracia en todo un país), 2) las variables socioeconómicas, como explicación del éxito o fracaso de la democracia (teoría de la modernización, teoría marxista) y 3) variables socioculturales, es decir, la cultura política. Putman alude mucho a Tocqueville.

    Putman pretende utilizar este experimento institucional para explicar la variable de diseño institucional viendo cómo varían los resultados según las variables socioeconómicas y socioculturales. Trata de evaluar la importancia relativa de estas dos últimas variables. Acaba resaltando su importancia.

    Esta investigación es importante por su rigurosa metodología. Está hecha en diversas fases, entrevistas de líderes políticos, hechas en distintas ciudades, regiones… Cuenta con 20 colaboradores. Está realizada de 1970 a 1980. La medición de la variable dependiente (el producto de las instituciones) ocupa la mayor parte del libro.

    ¿Cómo se mide el rendimiento institucional?

    Putman establece tres mediciones:

    • Capacidad objetiva de producción; es decir, hasta qué punto cumplen lo que prometen.

    • Capacidad de formular políticas (organizar el gobierno en sí), cuestiones de organización del proceso político.

    • Calidad del proceso político. Calidad de las decisiones tomadas, de la ejecución de las mismas. Esto conlleva la conceptualización y operacionalización. Para ello, fiabilidad en las variables: repetida una operación de medición se producen resultados semejantes que se pueden corroborar.

    La manera de medir el rendimiento institucional no puede ser volátil, que no quiere decir tampoco inmutable.

    La validez de una variable tiene diversas dimensiones que nos interesan para este estudio:

    • Contenido: comprensibilidad, que todas las dimensiones relevantes del rendimiento institucional estén contenidas en la investigación, ya que si no, no estaría completa.

    • Interna: coherencia interna, consistencia si se usan diversas medidas de rendimiento institucional; el ordenamiento de las cosas debe ser coherente cada vez.

    • Validez, que se corresponda con las apreciaciones subjetivas del personal de las instituciones y de la opinión pública. Validez predictiva. Correlación entre el estudio realizado y el resto de opiniones.

    (fotocopias)

    Putman busca una alternativa a las variables socioeconómicas. El diseño de este estudio está muy bien teórica y empíricamente. Putman intenta conceptualizar cultura y virtud cívica, antes que operacionalizarla. La sociología y la ciencia política se han limitado a argumentos especulativos y no se ha propuesto medir el civismo y sus efectos. Putman usa las encuentras secundariamente para corroborar sus investigaciones. No parte de ellas. Para Putman, la contraposición de cultura y comunidad cívica es la familiaridad amoral.

    Putman extrae de Tocqueville 3 dimensiones de cultura cívica:

    • Implicación cívica de los ciudadanos, su interés por la vida pública.

    • Igualdad política, pues el exceso y defecto de poder son malos. Síndrome de los valores y actitudes: solidaridad, confianza…

    • Densidad de la vida asociativa de la comunidad. ¿Cuántas asociaciones hay? Si son capaces de asociarse o no para mejorar su situación.

    Para medir estas tres dimensiones (tabla 4.1 de la p.92: listado de las asociaciones locales), trata de medir el asociacionismo privado no lucrativo de iguales. El segundo indicador de virtud cívica es la lectura de periódicos, pues demuestra interés por asuntos colectivos publicados. El tercer componente del índice es la participación en referéndum, aunque la participación política se puede medir con otros factores (depende del partido del poder). Otro indicador es el uso de votos de preferencia, existentes en Italia hasta 1992 (se podían marcar 3 nombres de la lista e indicar el orden de preferencia). Con esto se puede perder el secreto del voto y la compra de esos votos es más fácil. La eliminación de este sistema supuso un cambio importante en Italia. Putman mide en qué regiones hay más individuos que usan el voto de preferencia y en cuáles no. Cuantas más personas lo usen, más probabilidades de relaciones de clientelismo. Putman, con cuatro variables (tabla 4.4) define la cultura cívica.

  • DEMOCRACIA Y CONFLICTO DE CLASES

  • ¿Qué opciones políticas hay en las sociedades democráticas occidentales? Podemos observar socialdemocracia, democracia cristiana, comunismo, anarquismo (poco estudiado desde la perspectiva comparada), ecologismo, nacionalismo, feminismo, liberalismo, conservadurismo, republicanismo...

    La idea de Rokkam es un esquema-análisis basado en la teoría funcionalista y cifra la evaluación social y política de Europa moderna en torno a 4 líneas de división social o cleeavages.

    • Centro/periferia, que se ha dado en el proceso de formación de los estados modernos. Tensiones entre la cultura central dominante y las diversas periferias que buscarían la autonomía o autogobierno. Llegan a formarse partidos en defensa de estas ideas.

    • Iglesia/Estado: también originada en el proceso de formación de los estados modernos, sobre todo en aquellas zonas donde la Iglesia era muy poderosa y pasan a ser Iglesias nacionales (aparato del estado). La Iglesia es el principal contrario al liberalismo, que trata de quitarle los privilegios.

    • Intereses urbanos/rurales: demandas de los campesinos y de los trabajadores urbanos. Ej: en los países escandinavos, por el precio de los alimentos.

    • División por clases: empleadores/empleados. Trabajadores y propietarios de capital. Es la más extendida y más tardía. Revolución industrial.

    A partir de aquí, describe la estructura ideológica de la Europa moderna en función de estos cleevages, que dan lugar a la formación de sistemas de partidos diversos. La clase social es el cleevage más importante porque es el único que se ha movilizado en toda Europa y ha dado lugar a partidos en defensa de los intereses de grupos opuestos.

    Para Rokkman y Lipset, una línea de cleeavage no debe ser exclusivamente política y, por tanto, una condición para ser un partido, sindicato o asociación, es que sean cleeavage no sea sólo político, sino también social. Además, partidos políticos e individuos deben poseer conciencia de clase. La historia europea posee un nivel muy bajo d participación política, con algunas excepciones a principios del s. XIX y el proceso de movilización debe ir al compás de las oportunidades de participación.

    El bipartidismo básico es liberales-conservadores, por esa escasa participación y movilización publica. Son además, partidos débiles. A medida que se van abriendo espacios de movilización con el sufragio y la apertura de las oportunidades políticas, aumenta el electorado y se van añadiendo distintos grupos de la sociedad.

    A partir de los '20 todos los partidos son legales y todos los varones pueden votar. El bipartidismo se ve alterado notablemente, sobre todo en algunos países en que el abanico de opciones políticas se amplía considerablemente, aunque n todos siguen siendo las opciones mayoritaras. Para Rokkman, toman una forma que va a ser estable y permanente más allá de los cambios dialógicos de los individuos.

    Los sistemas de partidos de los años de la posguerra se congelan y permanecen hasta hoy. Una vez que el precio de la movilización se ha agotado, el mercado político se satura y el sistema de partidos se desvincula de los conflictos sociales de siempre.

    En “Capitalismo y socialdemocracia”, A. Przeworski afirma que gran parte del movimiento centro marxista europeo mostró ambigüedad respecto al concepto de “clase” y “cambio social”. Los trabajadores se movilizaron políticamente, pero, ¿por qué se organizan?, ¿por qué se movilizan políticamente? ¡También existen casos de no organización! Son preguntas que no se han hecho y, por tanto, se da por supuesto el concepto de clase, pero estos esquemas son poco útiles para el estudio del cambio social. Es una posición en la estructura la que condiciona la conducta del individuo. La teoría marxista busca, pues, en la estructura, un condicionamiento, un fundamento teórico, de la acción colectiva, no una predicción de la acción individual.

    Przeworski clasifica los movimientos marxistas (centroeuropeos) por tres decisiones tomadas en momentos importantes, que son las decisiones que van determinando la organización y la ideología.

  • Participar o no en elecciones:

    • La social democracia se sirve de las elecciones para lograr fuerza política en la esfera legal, dentro de sufragios limitados y una capacidad de movimiento muy recortados.

    • Otros optaron por la abstención y el sindicalismo apolítico; han llegado al mantenimiento del anarquismo. En un principio, todo el movimiento obrero era abstencionista.

    Los que no desdeñan la participación política no es porque la utilicen como instrumento hasta que llegue la revolución, sino que la democracia es considerada como un desencadenante pacífico de la lucha de clases.

    No sólo se produjo cierta reacción de la burguesía, estimulando la creación de mecanismos de control. Pero, el error más grande de previsión fue que no ganaron las elecciones. El voto de los partidos de izquierda tenía un techo, no podía crecer ilimitadamente. Este techo se refuerza con la aparición de divisiones de la izquierda. Los socialdemócratas basaban su confianza en la victoria electoral en la proletarización de la sociedad. Pero, ¿dónde metemos a los trabajadores del sector servicios? ¿Pero dónde metemos a los trabajadores del sector servicios?

  • ¿Qué aliados de clase buscar? Es decir, a quién incluir en el grupo de “clase obrera”; quiénes son los aliados de los trabajadores; si podemos incluir o no a la clase media… Esta es una batalla política, por lo que hay que convencer a los individuos; pero también es una batalla teórica, pues hay que redefinir el concepto de estructura de clase.

  • Przeworski ve los cleavages como distintos aspectos y proyectos políticos en la lucha por la redefinición y participación. Los socialdemócratas buscan aliados en muchos lados; los comunistas, en el período entre-guerras, se reducen a los trabajadores.

    Tras la I Guerra Mundial, aumenta la movilización de los trabajadores en la calle, que llega a ser máxima. Son huelgas económicas, socialistas… Sin embargo, fracasan: se consigue poco. También se dan las primeras experiencias de gobierno pero no como clase obrera dominante, sino con apoyos precarios. Entonces, ¿qué hacer?

  • Cuando se gobierna, ¿qué hacer? Es decir, se encuentran con que, al gobernar, no tienen un programa., no tienen alternativas a la crisis economista, etc. Son modelos continuistas de las políticas liberales. Por tanto, ¡tienen que dejar de ser socialistas! ¿? El Gasto Público se emplea para medidas anticíclicas, pero no por considerarlo fomento de la socialización de la sociedad, sino por interés general, para salir de la crisis; pero esto lo hacen todos los gobiernos, no sólo los socialistas. Esto lleva a pensar que el Estado de Bienestar no es realmente transformador, aunque aquí hay que mirar caso por caso, pues depende de los apoyos de los diversos estados.

  • Luebbert (Liberalismo, fascismo o socialdemocracia)

    El panorama general antes de los '40. La tesis central del autor es distinguir que en el s. XIX hay dos tipos de regímenes:

  • Liberales: (Francia, GB, Suiza, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, EE.UU. y, en menor medida, Holanda y Bélgica) La burguesía no tiene graves problemas entre sí. Están divididos por conflictos económicos (proteccionismo-librecambismo), que pueden derivar en territoriales, pero por comparación con los regímenes i-liberales, no hay grandes conflictos. Los derechos políticos están generalizados desde muy pronto, lo que favorece a la movilización de los trabajadores. La represión es moderada. Aceptación de ciertas exigencias sociales. Todo esto en términos comparados. Los trabajadores tienen, pues, cierta representación política y la ejercen. A través de esta representación, obtenían cierta legislación favorable y esto produce un movimiento obrero organizado en sindicatos, pero lo bastante desorganizado (sin dotación burocrática, débiles en la cumbre) y esto porque no lo necesitaban, pues muchos derechos políticos ya estaban garantizados y había expectativas en que las condiciones mejoraran. Esto es posible porque la burguesía está unida, es hegemónica y se puede permitir un alto nivel de tolerancia respecto a otros grupos.

  • I-liberales: burguesía dividida por conflictos lingüísticos, territoriales y religiosos. Nunca llega a ser hegemónica por una situación de poder insegura que no les permite concesiones a toros grupos. (Escandinavia) Derechos políticos mucho más tardíos (los trabajadores no pueden votar o tienen muy restringido el derecho al voto) Partidos liberales y conservadores en lucha constante (conflicto más allá de lo económico), concesiones políticas y sociales menores. De hecho son los conservadores los únicos que inician alguna reforma temporal y sólo para quitar terreno a los liberales, más que por un puro reformismo progresivo. Esto produce un movimiento obrero sindical mucho más compacto, cohesionado y militante. Esto facilita la conciencia de clase. Tienen que combinar la lucha por los derechos políticos, sociales y económicos. Organizaciones centrales que cubren a todas las ramas de oficios. También se produce un movimiento obrero insularizado que trata de crear una sociedad alternativa (subcultura obrera). Partidos totales que abarcan todos los aspectos de la vida.

  • Casos intermedios son Holanda y Bélgica, donde los partidos religiosos son mucho más fuertes, se vuelven hegemónicos y se convierten en una especie de sustituto del partido liberal, a partir del cual consiguen cierta estabilidad. Así pues, en los países liberales, los sindicatos aceptan las propuestas socialistas, pero se reservan el derecho a controlar el partido. El partido existe en la medida en que el movimiento obrero quiera apoyar mientras que en países i-liberales, partido y sindicatos tienen una conexión perfecta. Ambos están en un servicio recíproco mientras que en los primeros sindicatos preexiste al partido.

    Esto da lugar a dos movimientos de trabajadores relativamente diferenciados. Tras la I GM, hay pocos años buenos, pues a finales de los '20 tiene lugar la recesión económica mundial que produce una movilización y disgusto social en toda Europa (momento crítico) que, según el autor suceden tres cosas:

  • Que el régimen liberal resiste a la inquietud social, las huelgas y movilizaciones obreras. En Holanda y Bélgica, donde los partidos socialistas son más débiles organizativamente, las condiciones del mercado de trabajo son suficientes para disciplinar a los trabajadores.

  • En GB, desaparece el partido liberal y le sucede el partido laborista. Los trabajadores son menos amenazadores porque políticamente están menos organizados, son menos agresivos, no tienen una ideología central. También porque la clase tradicional dirigente está más unida, lo que sigue sucediendo hasta ahora: están coordinados para enfrentarse a los trabajadores.

  • La hegemonía liberal subsiste aunque sea en torno a otros partidos (coalición de consolidación de clases medias). Hay partidos obreros pero que no son una amenaza porque los otros son más fuertes.

  • En Francia, coaliciones multipartidistas.

  • En Bélgica, gobiernos religiosos, los socialistas no son una amenaza por su debilidad y porque son pequeños. En Alemania, estos partidos de trabajadores sí eran una amenaza por lo radicales que eran y porque estaban bien organizados, al igual que los conservadores. Esto produce inestabilidad en la República de Weimar. Hay dos salidas: régimen fascista o régimen socialdemócrata.

  • Son más totalitarios Alemania, Italia y España. En el este de Europa, a partir de los '20 surgen dictaduras tradicionales, pero que no son muy represoras y permiten ciertos canales de representación. Los totalitarismos (Alemania, Italia, España) se diferencian de las dictaduras tradicionales en que se sostienen coaliciones de clases mucho más amplias. Son dictaduras de masas porque a los partidos a los que se enfrentan son también partidos de masas. No pueden permitirse ser una dictadura tradicional. Quieren controlarlo todo.

    En cambio, en las dictaduras surgidas en el este de Europa, se toleran ciertos grupos políticos, sindicatos y organizaciones. La dictadura sólo quiere reprimir a los abiertamente revolucionarios y una cierta tolerancia con otros espacios políticos.

    Se suprimen todas las organizaciones, sindicatos… simplemente es una dictadura totalitaria. Todo tiene que estar organizado y dictaminado por el partido del poder. Para ello necesita el apoyo de la gran mayoría. Sin fisuras.

    Figura política nueva que sólo puede surgir con los partidos de masas, después de una experiencia democrática. En la interpretación de Luebbert, el resultado de un régimen fascista o socialdemócrata depende de las opciones políticas de los campesinos. Ante la división profunda de la clase media burguesa y la clase trabajadora, depende de con quién se alíen los campesinos, se producen unos procesos políticos u otros. El problema de la tesis de Luebbert es que resulta un poco estructuralista. En otras investigaciones se da la explicación en términos individuales.

    Los orígenes sociales del partido nazi. La lógica del mal. . Este estudio intenta buscar explicaciones lógicas de quién llegó a ser nazi y porqué.

    El partido nazi era como toros partidos, la gente , por racionalidad se hace de un partido u otro. En las tablas: hipótesis establecidas sobre el apoyo al nazismo. Tabla 1.1., el mayor apoyo es del campesinado. En la tabla 1.2, se ve el nazismo como reacción ante el desempleo. El estudio concluye que no tiene que ser asó: hay tanto apoyo del campesinado como de la población urbana y tanto del empleado como del parado. En las tablas 1.3 y 1.4, se ve que hay una sobrerrepresentación de personas que viven en lugares de minoría católica y una infrarrepresentación de los alemanes de zonas de mayoría católica. E hábitat no cuenta mucho, la religión cuenta un poco los católicos muestran menos apoyo que los protestantes.

    Tablas 3.2 y 3.3. Es un partido con una representación considerable en todas las clases. Las viejas clases medias, y las nuevas. Los desocupados están infrarrepresentados. Es el partido más interclasista de la época, incluso más que os católicos. El partido nazi es considerado “alianza de clases”. Este estudio es una afirmación del análisis de Luebbert pero aporta mecanismos. Seguramente mucha gente se afilió porque respondía a muchos intereses de la época. Básicamente, los campesinos protestantes se sintieron atraídos por la política fiscal, la disposición de la herencia divisible…

    El programa de autosuficiencia y de cerrar exportaciones favorecía que muchas empresas interesadas por esta política se afiliasen al partido nazi.

    La socialdemocracia está condicionada porque los trabajadores fueron formando partidos y colaboraron con los liberares (en países con hegemonía conservadora no represiva)… Esto da lugar a un fenómeno político casi único: la organización autónoma de los campesinos que, en gran medida, se hacen liberales, igual que en Escandinavia. No están supeditados a los conservadores. A partir de los años '20, todos los partidos son representantes políticos de grandes pilares en la economía (conexión fuerte entre partidos políticos y asociaciones sociales). Los partidos, de alguna manera, se dividen el electorado, quedando poco electorado volátil.

    Una vez que se tienen los derechos políticos y se presentan a elecciones, suceden dos cosas: que no se obtiene mayoría suficiente y que, una vez en el poder, hay que decidir qué se va a hacer. Los trabajadores no llegan a ser nunca esa mayoría necesaria. Son sólo un 20%, pero poderoso.

    El partido noruego es un partido socialista más radical. Tienen el titubeo más grande entre revolución y reforma. No son capaces de crear un gobierno efectivo. Duraron 15 días porque no tenían un respaldo económico para llevar a cabo sus ideas.

    Reanimación. En el caso escandinavo se suceden dos etapas: aceptar la necesidad de aliados de clase y abandono de programas socialistas explícitos.

    El compromiso de clase en general es el que hacen los trabajadores y los empleadores de una democracia (redistribución, estado de bienestar…) Es lo que hace que les parezca racional a los trabajadores apoyar a los empresarios, y viceversa.

    Con los campesinos y grandes propietarios sucede lo mismo. Se reparten el poder entre ellos. Un “hogar para el pueblo”, políticas dirigidas a los trabajadores en general, tanto del campo como de la ciudad. Pacto electoral que, entre 1932-34, los socialdemócratas, deciden subsidiar los productos agrícolas y los agricultores aceptan una política con déficit (embrión del keynesianismo) Este gasto público permite a los socialdemócratas hacer mejoras sociales y poner las bases del estado de bienestar.

    Los socialdemócratas ofrecieron muchas promesas a los campesinos para acabar con la conflictividad política y económica. Aceptan el derecho a la propiedad privada a cambio de mantener el capital dentro del país. Los partidos conservadores se comprometen a aceptar las reglas del juego democrático.

    Tras la II GM, los socialdemócratas hacen una coalición por el pueblo con los campesinos. Se hace un giro a la derecha.

    Los partidos de nueva izquierda resurgen como grupos escindidos de los socialdemócratas. Son partidos vinculados a la clase trabajadora, a los sindicatos, y a la ecología (en los '70).

    La socialdemocracia surge en Dinamarca una merma en el desarrollo político y es mas fuerte en otros países. Los suecos suponen un éxito mayor. Aceptan la política de neutralidad.

    La socialdemocracia pierde apoyos por la derecha y la izquierda, debido a:

    • escisiones por la derecha, por las cuestiones de guerra y de afiliación a la OTAN y UE.

    • Nuevos liberales que se revelan contra el estado de bienestar, por la derecha, y a la acumulación de burocratización.

    El problema de la socialdemocracia viene en los '70 con la crisis fiscal del estado de bienestar: en los '60 la coalición con los agricultores no es viable ni útil. Han crecido las clases medias y es donde se está repartiendo el pastel electoral, donde se busca la movilización para conseguir la hegemonía.

    La socialdemocracia ha tenido éxito al tratar de convertirse en un partido de los asalariados. En los '70 intenta acentuar el aspecto de clase media del estado de bienestar, haciendo del estado de bienestar el mayor empleadores de los trabajadores de clase media; trata de utilizar el estado para reinventar la alianza de clase, vincularlos con los servicios sociales. En la medida en que esto le sale bien (en Suiza), superaron la crisis de los '70, perdieron el poder en los '80 y lo recuperaron después porque el apoyo de la clase media al estado de bienestar ha sido muy fuerte.

    Regímenes de bienestar en el capitalismo. Visión tripartita.

    Régimen socialdemócrata, corporativo (en regímenes fascistas) y liberal. ¿Cómo se establecen? ¿Cómo se llega a ellos?

    La división fundamental se da en las diversas formas del compromiso social.

    Przeworski, en su lectura, concluye que se acaba con una forma de organizarse el capitalismo de bienestar.

    Spin Andersen habla de tipos ideales. Son tres tendencias claramente diferenciadas. La forma en que se organiza el capitalismo de bienes tiene impacto en cómo se organiza la estructura de clases.

    Los socialdemócratas se dan en países escandinavos. Los neoliberales, en las democracias angloparlantes. Los corporativistas tienen 2 variantes: la familiarista y la estatalista.

    La idea esencial es que hay tres fuentes de bienestar: el estado, la familia y el mercado y, hasta cierto punto, los regímenes de capitalismo de bienestar se diferencian dependiendo de dónde pongan mayor énfasis. La socialdemocracia, en el estado; los liberales, en el mercado; los corporativistas, en la familia. El sistema liberal es el más residual: el estado sólo interviene donde el mercado falla claramente. Se fomenta el instrumento del mercado para la prevención de riesgos sociales. Tiene el efecto a diferencia del corporativismo de fomentar la participación de todo el mundo en el mercado, desfamiliarizando a las personas (influye más en las mujeres).

    El corporativismo se apoya en la familia tradicional y su red de apoyo (pequeñas empresas) y familias como prestadoras de servicios. El desempleo juvenil en España es característico de este tipo, donde la familia sigue siendo sólida para que sea efectiva esa redistribución. Cae mucho peso sobre la familia. También es característico de los estados de bienestar, que no son iguales para todos.

    El socialdemócrata se caracteriza por el igualitarismo. Se busca el pleno empleo; se da igual importancia a hombres/mujeres, jóvenes, mayores… El sector educativo y de sanidad son muy amplios. Se busca el apoyo de la clase media. Trata de expulsar al mercado de la previsión de servicios sociales, para que sea una redistribución social. Tienen pensiones iguales muy altas, por lo que no se incentivan las pensiones privadas.

    ¿Por qué no hay socialismo en EE.UU.?

    Sombart, en 1905. Tabla 5.1. Gran Bretaña y EE.UU. tienen condiciones similares. En EE.UU. no hay partido socialista porque tiene una cultura muy individualista, nada colectivista. Lipset y Marx en su libro Aquí no sucedió.

    Los factores culturales, el sistema institucional y el sistema de partidos tienen mucha influencia. Nación grande y federal. Es importante también que se trate de un régimen presidencialista. También es importante el hecho de que sea un sistema de partidos bipartidista, pues l coste de oportunidades de formar un partido es muy grande.

    El tipo de sindicatos en la historia del movimiento obrero sindical de EE.UU. es originariamente muy fuertemente sindicalista; es decir, con una estrategia fundamentada a nivel de empresa, de fábrica y normalmente apolítica (más revolucionaria, que no radical).

    La federación americana del trabajo nunca consiguió la posibilidad de crear un partido político como en otros países (1890 - siguientes)

    En los primeros años del s. XX, en GB, se decide votar a los candidatos laboristas. En EE.UU. esto no sucede, pues el partido socialista no cuenta con el apoyo explícito del sindicato. El partido se forma independientemente, tratando de que los trabajadores les voten. Los sindicatos entendieron la acción política como subsidiaria.

    G. Marx hace una división de sindicatos: exclusivos (prototipo de EE.UU.) e inclusivos. En la composición de los exclusivos, son de oficio, trabajadores no manuales (cualificados); su estrategia es restringir la cantidad de trabajo en la fábrica, controlar quién trabaja en la empresa.

    Los sindicatos inclusivos intentan ser un sindicato de todos los trabajadores. Su estrategia sindical se basa en lograr la presión externa a la empresa a través de la legislación y la afiliación masiva. Las estrategias de captación son distintas de los sindicatos exclusivos, más parecidos a las de los gremios, pues tratan de regular el aprendizaje y así poner freno a los no cualificados. Los inclusivos, en cambio, buscan tener el mayor número de afiliados.

    Esto como consecuencia lleva a una distribución desigual de los recursos. Para los exclusivos, pocos miembros y poder distribuido; en los inclusivos hay muchos miembros y el poder está concentrado en las zonas industriales.

    La orientación política también será diferente. En los exclusivos será escasa, tendiendo a ser secundaria, pues quieren controlar el acceso al mercado de trabajo. En los inclusivos, la orientación es muy política.

    El sindicalismo estadounidense era muy militante. En cambio, el sindicato “los caballeros del trabajo” resultó un fracaso, pues era más inclusivo. Triunfa la federación de sindicatos (apolítica).

    La cuestión de la inmigración hace singular a EE.UU., pues es muy heterogénea y la clase obrera resulta ser, culturalmente, la más heterogénea del planeta. Es la situación invertida a la de aquellos países en los que triunfa el socialismo, donde la clase obrera, la burguesía, es culturalmente homogénea y las divisiones son pequeñas.

    El proceso de formación de la clase trabajadora muy mediado por una democracia urbana muy importante, con una corrupción muy fuerte en el proceso de captación de votos.

    El sectarismo de los socialistas es otro factor importante, porque proviene del divorcio temprano entre sindicato y partido, lo que les lleva a oponerse al movimiento sindical que tiene un efecto mediador en Europa. Esto se refuerza con el problema étnico.

    El sectarismo se puso de manifiesto en los años '30, con el New Deal: los socialistas se enfrentaron con una gran coalición liberal de izquierdas y no quisieron enfrentarse a una plataforma política tan popular; os comunistas les apoyaron.

  • CONFLICTO DISTRIBUTIVO, ESTRUCTURA SOCIAL Y COMP. ELECTORAL.

  • PERSPECTIVA COMPARADA Y CASO ESPAÑOL

    En sociología política, tres generaciones de autores estudian este tema en el contexto internacional.

  • Estudian el voto de clase sin mucha discusión en los mecanismos, simplemente relacionan clase y voto, se dicotomizan de forma simple: trabajadores manuales o no manuales, voto izquierda o derecha.

  • Un ejemplo es Alford (finales '50 - principios '60), que estudia el voto en EE.UU., Canadá y Gran Bretaña. Su estudio fue muy usado para calcular el porcentaje de trabajadores que votaban en un partido menos el porcentaje de no obreros que votan a un partido. El índice se aproxima a 1 i los obreros votan a un partido, y a 0 cuando son las clases medias.

    Estudios de estabilidad. Se da por hecho la estabilidad electoral de los años '20, porque los sistemas de partidos están construidos sobre esta línea de clases.

    Se apoyan en el supuesto de continuidad y en que la división de clase estará representada siempre.

  • En los '70, se pone de moda la tendencia contraria. Se habla de volatilidad, electores volantes que se comportan de forma individual. Ya no existen las viejas identidades colectivas d clase. Ahora se vota por la búsqueda de intereses particulares. Desalineación del electorado. Antes se analizaban las identidades colectivas, porque el actor votaba, por lealtad cultural, a una opción política fija y sólo cambiaba si iba cambiando la estructura social, por lo que los flujos electorales eran escasos.

  • En cambio, ahora la tesis es que los votantes de la posguerra eran ciudadanos materialistas, que votaban por intereses materiales (racionales), definidos por una colectividad; en cambio, a partir de los '70, se observan generaciones de individuos cardas en la abundancia relativa, hijos de los diversos tipos de estado de bienestar, con una formación política diferente. Así, la hipótesis de socialización en el voto se refleja en el sistema de valores.

    Esta hipótesis se conjuga con las hipótesis d la escasez, pues la gente valora más lo que no tiene. Surgen reorientaciones políticas con individuos postmaterialistas, postmodernos, que desarrollan un tipo de orientación diferente a la anterior, sin poner el énfasis en el bienestar o los intereses materiales que definían la parte política. Ahora lo que explica la cultura política son las orientaciones sociográficas (orientadas a los otros, poniendo énfasis en la calidad de vida, la satisfacción en el trabajo, el logro personal…)

    Las versiones más débiles sugieren que esto es el principio de la desorganización de los viejos asuntos. Se desalinea el electorado; como hay nuevos intereses, surgen nuevos partidos, que responden a estas nuevas inquietudes. Inglehart: La revolución silenciosa.

  • La tercera generación ve que efectivamente la política busca tema nuevos. Las alineaciones izquierda-derecha han permanecido más estables de lo que la segunda generación anunciaba. Hay fluctuaciones locales en un país o periodo, pero aún así, se observa regularidad en toda la pauta histórica.

  • Esta generación abre el tema de “clases” con E. Andersen, Przeworski, que tratan de explicar la mutua interacción entre sistema de partidos e ideología política con la estructura social, las condiciones políticas de la estructura de clase. Pero no se supone que la acción sea mecánica; el proceso de formación d clases es económico pero también político. Dependiendo de sus alianzas, surgirán unas políticas u otras.

    Las políticas públicas son estructuradas, no sólo por el mercado ni la economía. Esto condiciona la estructura social. Sping Andersen se concentra en el Estado de bienestar como un agente de estructuración social.

    Esto conlleva las lealtades políticas. Dependiendo de qué tipo de estado de bienestar se cree, influirá en el tipo de estructura social con unas preferencias políticas u otras, que van a perdurar en el tiempo. Es una relación causal circular: La política pública de Estado de bienestar influye en la estructura social; la estructura social, en las ideologías; y las ideologías condicionan las políticas públicas del estado de bienestar.

    Tratan de definir mejor qué es la estructura social, más compleja, diferenciando la clase social ocupacionales, los niveles de renta… La relación estructura social y política se vuelve más compleja. Teóricamente, están un poco insertas en el debate de la socialdemocracia. Ejemplo: ¿cómo pueden hacer una política social que rechace el voto femenino?

    El voto de clase en España

    (Juan Jesús González, Clases, ciudadanos y clases de ciudadanos, 1990)

    El más estructuralista, que considera los apoyos de clase a la política como estables, es Rodríguez Meneros.

    Otros autores, al contrario, defienden que la estructura de clase no tiene ningún imparto en el voto.

    José Ramón Montero defiende a posición a la luz de los resultados del '82, de que os partidos son “atrapalotodos”, sin estructura de base, con una andadura débil en la estructura social e ideológica (con programas modernos) A medida que los electores socialistas han sido menos, facilita explicar un tipo de electorado y permite ver cambios.

  • RELIGIÓN Y POLÍTICA

  • Es importante conocer por qué la religión se manifiesta políticamente más en unos países que en otros. También es importante ver el anticlericalismo político, como movimiento de reacción del liberalismo. En cambio, el clericalismo es reacción contra el socialismo, con lo que supone ser un proyecto de la burguesía para desviar la movilización que había hacia los partidos socialistas; es decir, el clericalismo se presenta como un proyecto político alternativo.

    El catolicismo político es importante como pugna entre conservadores y liberales. 1891, Rerum novarum, documento del cristianismo político, esencialmente como justificación de su acción social.

    La desaparición del liberalismo como fuerza política autónoma, se debe, en gran medida, a su fracaso en la lucha política contra los salarios.

    Los liberales pretenden destruir los privilegios económicos de la Iglesia, los privilegios en la educación, el monopolio en el matrimonio… Quieren proporcionar una educación homogénea para favorecer la economía moderna.

    El que surjan partidos católicos no es bueno ni para conservadores ni liberales. La Iglesia, sin querer, proporciona la base para crear organizaciones que se convertirán en partidos políticos autónomos. Las fases de este proceso son:

  • La Iglesia crea una subcultura católica, un mundo aislado para que los católicos no se “contaminen” del liberalismo. Estas organizaciones seglares crean contradicción en la propia Iglesia, más orientada hacia la política conservadora que estos nuevos activistas, más dados a la acción social. Estos sindicatos tuvieron mucho éxito, en los años '20 en distintos países de Europa occidental. Movilizaron entre el 10 y el 25% de trabajadores sindicados. El éxito movilizador inicial de la Iglesia fue muy importante, tratando de recuperar terreno en la lucha contra los liberales.

  • En la segunda fase, los sindicatos deciden elegir entre los candidatos cuál le va a favorecer. Optan por apoyar a los partidos conservadores. Así, los seglares elegidos dentro de las listas conservadoras, formarán partidos políticos aún sin el permiso de la Iglesia. Se fundan antes allí donde la Iglesia es más débil, como en Alemania. Donde la Iglesia es fuerte, no aparecen partidos católicos. En España, no aparece un movimiento católico hasta la República, con la CEDA, que era la coalición de la derecha.

  • Los liberales y la Iglesia, con su lucha, consiguieron consecuencias no deseadas. Los partidos católicos, van a tener más éxito que las variantes conservadoras más antiguas. Movilizan a muchas mujeres. Son partidos relativamente moderados, antiliberales, que se fueron colocando en la derecha en el periodo de entreguerras. Apoyaron los movimientos nacional-clericales.

  • Se trata de un juego entre liberales y conservadores, donde la Iglesia tercia apoyando a los conservadores, creando asociaciones de defensa y creando partidos católicos opositores al liberalismo (aunque luego esto lleva a la Iglesia a perder el control sobre sus fieles). Una vez que el mundo se democratiza, el poder pasa a los parlamentos, se entra en la lógica de la competencia política. Para conseguir votos hay que dar algo a cambio. Este “algo” puede no favorecer a la Iglesia, por lo que los partidos católicos se van separando de la Iglesia.

    El caso español

    En España no se puede hablar de democracia hasta la II República. La Iglesia española es menos autónoma del Vaticano. En el s. XIX, la Iglesia católica tiene, claramente, un partido con una opción no tanto conservadora sino dinástica: los carlistas, que son antiliberales feroces.

    El anticlericalismo en España ha sido siempre muy violento. Este fenómeno explota en los años '30. A partir de 1875, un periodo pacífico, la Iglesia apoya a Cánovas y a Sagasta (sistema representativo limitado) y se separa un poco de los carlistas (que eran la vía violenta). Hay una paz religiosa relativa. Se producen las desamortizaciones, las reformas educativas, se limitan los privilegios fiscales.

    El s. XX sigue siendo igualmente pacífico en política. Entran en decadencia los liberales tradicionales y surgen los anarquistas, socialistas y republicanos como oposición a la Iglesia. El anticlericalismo juega un papel cimentador de las clases trabajadoras emergentes con la burguesía urbana radical (de os republicanos a los anarquistas). La religión no va a jugar un papel integrador que desemboque en un partido, sino que va a cohesionar un grupo muy heterogéneo opuesto al régimen monárquico tradicional. Va a pasar junto a toda la oposición.

    Las organizaciones sociales de la Iglesia en España van a ser más tardías, están más presentes en el grupo enemigo.

    El anticlericalismo va a unir desde los obreros anarquistas a la burguesía de bien en las ciudades. Esto explica el exceso de anticlericalismo de la II república. Cuando triunfa por fin el movimiento democrático, está muy ideologizado. Se quiere un estado laico. La II República no se forma como un régimen neutral, en el contexto social español supuso algo muy radical. Se proponen reducir a la Iglesia católica a una organización privada.

    Se constitucionaliza e programa de los liberales radicales. Surgen ataques físicos a la Iglesia desde el inicio de la República.

    La guerra civil es denominada “cruzada” por Franco y por la Iglesia. Una vez dentro del franquismo, la participación de la Iglesia en política es muy posterior. Se pueden distinguir t 3 etapas en el franquismo:

    • Época de cruzada y estado nacional (guerra civil y posguerra).

    • Nacional catolicismo (fusión iglesia - estado), de 1945 a finales de los '60. Aquí se distingue la democracia cristiana y la etapa del Opus Dei.

    • Final del Franquismo: la Iglesia rompe con el régimen casi al final de éste.

    Inicialmente, la Iglesia sólo compite con el partido fascista español (falange). Franco hace una mezcla de fascismo y carlismo. Esto dura poco, pues Falange trata de hacerse con el aparato del estado y reducir a la Iglesia. La Iglesia consigue en poco tiempo que se le conceda cierta autonomía y sus privilegios, a cambio de apoyar el régimen. Franco lo usa por ser la movilización de masas más importante de España.

    La Iglesia hizo esto sin la “Iglesia activista” (los políticos), que se retira. La Iglesia acepta el “privilegio de presentación”, por el que Franco elegía a los obispos de entre la terna ofrecida. Se entiende que el Vaticano no intervenga porque el mundo está viviendo una GM.

    En los años '40, la Iglesia es más autónoma. Estamos en periodo de posguerra y no hay otras formas de organización legales. Este periodo de nacional catolicismo triunfante se modera en los '50 con políticos moderados que provienen de la Acción Católica y se consideran demócrata-cristianos. El régimen de Franco firma el Concordato con la Santa Sede.

    A partir de los '60, la Acción Católica empieza a tener una posición contestataria y cae en desgracia. Su posición en el poder es ocupada por el Opus Dei. Son éstos los artífices del desarrollo económico. El movimiento de Acción Católica se opone al régimen y al Opus Dei.

    El estado, prácticamente elimina esta organización, y la Iglesia pierde un apoyo muy importante, con lo que su ayuda queda reducida a los sacerdotes.

    De los círculos de Acción Católica provienen los primeros sindicalistas o activistas civiles políticamente organizados, que serán apoyados por clérigos en el sentido pleno. Gran represión hacia la Iglesia por parte del régimen.

    El Concilio Vaticano II supone una gran reforma de la Iglesia Católica, que hace nuevo su mensaje, su estructura organizativa. Será un refuerzo para la Iglesia en España. Aumenta la secularización. El Concilio Vaticano II empuja a superar el privilegio de presentación, con la posibilidad de Roma de nombrar obispos auxiliares que vienen a compensar este privilegio de Franco. Se van produciendo separaciones de la Iglesia con el Estado. En 1969 se rompe formalmente con el régimen. Queda un Franquismo sin Iglesia.

    En los últimos años del franquismo, se recrudece la represión, y aumenta la violencia política. La Iglesia se limita a condenar (no puede actuar). Gracias a esta distancia con el régimen, la Iglesia tendrá un papel importante en la transición.

    (Fotocopias: partidos y creencias religiosas)

  • RELIGIÓN Y POLÍTICA. INTR. A LA Sª POL. DEL ISLAM

  • Las diferencias institucionales de las religiones son más importantes que las diferencias de credo.

    El islam se divide en chiítas y sumitas. La mayoría de los musulmanes son sumitas. Se consideran a sí mismos como ortodoxos. El contraste entre los dos credos ha sido tan fuerte como el de los católicos y laicos en occidente. Los chiítas son fieles al Imán. Unos aceptan 7 imanes, otros 12… con lo que cada uno tiene su nombre. Piensan que el Imán está muerto pero sigue viviendo en los corazones de los fieles y, en algún momento, volverá a nacer.

    El Islam carece de clero organizado, excepto entre los siítas y maíes. Lo equivalente a un clérigo católico e una persona con capacidad de interpretar la ley y a tradición. El imán simplemente guía la oración. Los estados nacionales árabes han intentado organizarse para que no todos puedan ser imanes. En Argelia y Egipto se trató de hacer funcionarios a los Imanes, para tener el control sobre las mezquitas.

    El ser árabe no equivale a ser musulmán. Árabe es un concepto étnico; musulmán es un concepto religioso. El nacionalismo árabe se expresa en Irak y Egipto, con el partido Baas. A partir de los '50, uno encuentra un nacionalismo árabe que trata de organizar los territorios coloniales. Loa cristianos árabes apoyan el nacionalismo árabe como alternativa al islamismo.

    Podemos hablar de 4 grandes focos de islamismo con ideología política:

    • Egipto: con la cofradía de los Hermanos Musulmanes. Fortalecimiento frente al invasor británico. Aunque participan en política, todavía no son importantes.

    • Arabia Saudí, con el reinado de los saudís, también llamado wahabismo, es un movimiento integrista del s. XVIII. Tuvo éxito porque eran los que financiaban a los grupos islámicos de todo el mundo.

    • Madrasas (escuelas islámicas) en India y Pakistán. Hay un nacimiento cultural del islam, unido a la independencia, recuperando tradiciones, etc. El hinduismo se suponía que contaminaba el islam de ambos países. Con esto, se hará una limpieza. La expresión más radical serán los talibanes.

    • Movimiento islamista de Irán. Es independiente del movimiento sumí, pero acaba siendo una referencia para éste.

    El nacionalismo árabe fracasa en un primer momento desde dentro, porque no producen ni hacen lo que se esperaba de ellos. Desempleo de jóvenes, lo que provoca que encabecen un movimiento en contra.

    Los otros que se unen a los jóvenes son la pequeña burguesía no vinculada al Estado y que se sienten amenazados por las tendencias de estos estados que tendían a un socialismo no marxista. Este proyecto de estado nacional podría haber funcionado si hubiese tenido éxito en el panorama internacional (guerra de los 6 días en Israel). Esto provoca que se cree el movimiento islámico. Por tanto, fomentan el movimiento islámico. El éxito de la revolución iraní en 1979, con independencia del mundo árabe, tiene un impacto directo sobre el esfuerzo y apoyo que dará USA a aquellos países que se pongan en contra de Irán. Ese mismo año, Rusia invade Afganistán. URSS significa el estado socialista modernizador, por lo que los islamistas del mundo árabe se unen bajo la resistencia a USA. Ellos formarán los más radicales a la vuelta a sus países (ej: Bin Laden).

    La primera intifada palestina, en 1987, acaba de agravar la situación. La organización para la liberación de Palestina (OLP) ha sido el último partido nacional árabe con apoyo popular. A partir de aquí, los islamistas participan contra Israel, cosa que aumenta su popularidad entre árabes y musulmanes.

    A finales de los '80, primeros de los '90, encontramos un movimiento político con éxito. Se ve como redentor del fracaso del nacionalismo árabe, porque representa la resistencia contra Israel y la expulsión de los rusos de Afganistán.

    Proceso de transición a la democracia

    Paso de un régimen autoritario, ya liberalizado, a una democracia, cuando el movimiento más importante que hay es el religioso. Casos: Bélgica y Argelia.

    Son regímenes autoritarios más o menos liberalizados, desafiados por movimientos religiosos (en lugar de por un partido de izquierda). Habitualmente se sostiene que Islam y Democracia no son compatibles, estructuralmente hablando, sobre todo. Por ello se ha despreciado en la teoría de la movilización y en la literatura sobre transición democrática.

    Las ideologías no influyen en política al final tanto como pudiera pensarse. Aceptar la democracia es una cuestión de equilibrio estratégico. También es importante la credibilidad de los actores para el compromiso: confiar en que pueden si ganga las elecciones, no formará un régimen autoritario y, si no, al menos tampoco desde la oposición se intente.

    Estos grupos demandan una revitalización religiosa, pero al tiempo, una vivencia religiosa independiente de la vida política. Predomina un nuevo tipo de actor: activistas religiosos laicos, con cierto desafío a la autoridad religiosa. Son movimientos interclasistas. El sentir religioso implica demandas sociales y económicas, con lo que se obtiene la alianza entre pequeños burgueses (que se sienten amenazados) y campesinos y trabajadores manuales urbanos (principalmente en paro)

    El resultado es diverso en ambos países:

    • Bélgica: democracia, con la facilidad de que exista tradición parlamentaria. Pero, ¿es esto lo realmente determinante?

    • Argelia: la democracia fracasa. La liberalización fue breve, no existe tradición, ¿es determinante? En 1990, el FIS gana las elecciones. El FLN propone un sistema electoral a dos vueltas pero se equivocan en sus cálculos. En el '92, el FIS gana aunque no obtiene mayoría absoluta. No existió la 2ª vuelta, porque intervinieron los militares, que hicieron dimitir al presidente, estalló la guerra civil, seguida de autoritarismo.

    Teniendo en cuenta las numerosas convergencias, ¿por qué los resultados fueron tan distintos? Existe división dentro del grupo en el poder y dentro del movimiento religioso. En el caso católico, los moderados lograron controlar a los antidemocráticos (debido, sobre todo, a la fuerza y acción de la jerarquía que hace una purga de los radicales). Entre los islamistas argelinos, los moderados no lograron controlar a los radicales y, por tanto, no existía la seguridad de que tras las elecciones se mantuviera la democracia. Se debe, fundamentalmente a la ausencia de jerarquía y de aparato institucional.

    'Sociología política'




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    Enviado por:Laura González Fernández
    Idioma: castellano
    País: España

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