Biografía


Roser Bru


¿Roser Bru?

Biografía de Roser Bru

  • Pintora y grabadora chilena de origen español. Nació en Barcelona, España el 15 de febrero de 1923.

  • En 1931 inició sus estudios en el Instituto-Escuela de la Generalitat, de la misma ciudad.

  • En 1939, terminada la guerra civil española, viajó a Francia, donde se embarcó hacia Chile. Ese mismo año ingresó en la Escuela de Bellas Artes en Santiago. Aquí realizó estudios libres hasta 1942 y fue discípula de Pablo Burchard.

  • En 1942 termino sus estudios de acuarela, pintura, dibujo y pintura mural. En 1947 formó parte del Grupo de Estudiantes Plásticos (GEP) que reunió artistas de la Generación del 50 como José Balmes, Gracia Barrios, Guillermo Núñez, Juan Egenau y Gustavo Poblete, entre otros. En 1957 ingresó al Taller 99 de grabado. Al año siguiente retornó por primera vez a Barcelona después de 18 años de ausencia.

  • Entre los cargos que ha desempeñado figura el de profesora de dibujo y pintura en la Escuela de Arte de la Universidad Católica de Santiago desde 1964 a 1968 y profesora invitada al taller de pintura en la Escuela de Arte de la Universidad Católica en 1989.

Trayectoria

  • La obra de Roser Bru ha abarcado desde el comienzo la pintura, el dibujo y el grabado.

  • En los inicios, sus trabajos se caracterizaron por una cercanía al informalismo y experimentación con nuevos medios expresivos como las incisiones realizadas directamente en la superficie de la obra. Pintó y dibujó cuerpos, rostros y objetos con fuertes cargas denotativas y su quehacer artístico se tornó cada vez más crítico.

  • Comenzó a poner en crisis la estabilidad de la representación mediante la borradura, la tachadura (gráfica sobrepuesta a la pintura), el cubrimiento (exhumar y luego volver a enterrar), la inclusión de signos como cintas negras, los colores de la bandera chilena y española, fotos y textos escritos.

  • Más tarde, la artista dejó a un lado el bastidor y sujetó la tela con tachuelas a una plancha de masisa, en un acto muy de acuerdo con su actitud revisora frente a la pintura. A través de ésta la artista reflexiona sobre la vida y la muerte, polaridad que siempre ha estado presente en su trabajo. Así también elementos como la memoria, su fragilidad y su incapacidad de recomposición total han sido el hilo conductor de su producción. En este sentido, vuelve una y otra vez al pasado y revisa constantemente la memoria. "Pasado y presente, como dimensiones temporales, quedan enmarcados espacialmente gracias a un recurso constante: la división del soporte" (Ivelic- Galaz. Chile Arte Actual), quedando la tela dividida en otras más pequeñas, dejando a la vista el borde de cada una y enlazándolas a través de algún elemento. Son historias, son espacios o tiempos distintos que se reúnen, imágenes que cita en reiteradas oportunidades, incluso en algunas obras se cita así misma al recordar su niñez, su familia, la Guerra Civil Española, etc.

  • En las obras de los últimos años ha profundizado su preocupación por los conflictos sociales y los hechos dramáticos que el hombre ha vivido, planteando un discurso crítico de gran fuerza y sensibilidad frente a la injusticia, al drama de la guerra, la tortura, etc. Introduce elementos como cintas negras, fotografías intervenidas, frases y números que refuerzan su temática y asocian permanentemente pasado y presente, haciendo una constante reaparición de motivos que se muestran siempre diferentes, de acuerdo a los cambios de tiempo y circunstancias.

Aportes

  • 1958 Primer premio de Grabado y Dibujo, Salón Oficial, Santiago, Chile.

  • 1960 Segundo premio de Pintura, Salón Oficial, Santiago, Chile.

  • 1962 Primer premio de Pintura, Salón Oficial, Santiago, Chile.

  • 1965 Premio "Osvaldo Goeldi", II Bienal Americana de Grabado, Santiago, Chile.

  • 1968 Premio Club de la Estampa, Buenos Aires, Argentina.

  • 1978 Gran Premio del Salón de la Gráfica de la Universdad Católica

Algunos ejemplos de sus obras

  • De la serie las meninas:

1975, acrílico sobre tela. Esta obra fue basada en “Las Meninas de Velázquez”. Es una pintura con fuerte planteamiento gráfico. El dibujo acentúa el control de las formas destacando una gama cromática cálida, donde predominan los ocres amarillos, los amarillos cromos, los rojos y magentas. La composición hace referencia a un pequeño fragmento del espacio físico donde se sitúa la Menina de Velázquez en la tela original.

  • De la serie Frida Khalo:

1984, acrílico sobre tela. Se trata de un dibujo sobre tela cruda, la composición es simétrica y el dibujo es certero en relación al parecido con Frida Khalo. La morfología del cuerpo está fragmentada en cuatro partes: la cabeza, expresiva pero con una connotación inmovil; la segunda, son los senos y parte del vientre, iluminados, aludiendo a un aspecto materno de gravidez; la tercera, son dos manos en carmín, dramáticas y ensangrentadas; como cuarta parte, es la insinuación de las piernas cortadas y sintetizadas por dos líneas.

Una de las formas recurrentes de Roser Bru en sus obras es la presencia de la sandía, la cual aparece entera, cortada por la mitad y/o calada. Este fruto simboliza la fertilidad del sexo femenino. Artista y retratada se unen en un sentimiento materno, Roser Bru cala una sandía como quien da a luz, acercandose a Khalo.

  • Franz Kafka “de la serie destinados”:

1984, acrílico sobre tela. Retrato cuyo referente es una fotografía del escritor Franz Kafka. En esta obra Roser Bru percibe junto con los rasgos fisonómicos del personaje la condición anímica y sicológica de él. El dibujo es una traducción de la fotografía, el color está aplicado mediante aguadas, con debil densidad de materia.

Debajo del rostro aparece un pañuelo extendido con una nota de color rojo, lo cual acentúa el carácter dramático de la obra. La composición es simétrica.

Rostro y pañuelo están en la vertical, dos planos gestuales de negro, constituyen la horizontal que sugieren la estructura de una cruz.

  • Tarde en Melipilla:

Óleo sobre tela, Roser Bru realizó una obra que citó de los hitos del realismo. Por esto es que las figuras sacadas de la historia del arte aparecen a menudo en los trabajo de la pintora. El gran despliegue de pintura en zonas de empaste hablan de la técnica y de la escuela de la artista. En “Tarde en Melipilla” , aparece lo antes mencionado además de un interior en aguadas aplicadas en las luces, tal como lo hacían los pintores realistas.

  • De la serie Las Meninas:

Óleo sobre tela. Resulta evidente en la producción de Roser Bru la influencia del maestro español Diego Velázquez. Una influencia que resultó expresa en la numerosa cantidad de cuadros que dedicó en homenaje al pintor. Roser Bru, se sometió a un realismo en el sentido estricto de la palabra, al no ser éste una tendencia o movimiento, sino una forma a priori de afrontar el proceso pictórico. La pintora podría ser catalogada dentro de la llamada nueva figuración, pero Bru utiliza elementos clásico que escapan a esta tendencia: La combinación entre empastes y aguadas, la perspectiva en tres planos, etc. De origen mediterráneo realizó la mayor parte de su obra en Chile.




Descargar
Enviado por:Cat
Idioma: castellano
País: Chile

Te va a interesar