Arquitectura, Obras y Construcción
Madera
1) GENERALIDADES
La madera es un material que ya conoció el hombre prehistórico, cuando construyó sus primeros refugios al abandonar las cuevas y socavones. Pese a la evolución experimentada en el arte de la construcción y en la aplicación de nuevos materiales, la madera constituye el total de los materiales empleados; de ellas tenemos ejemplos en las zonas madereras del Norte y del Sur del país, algunas algo rústicas , pero otras, como las de San Carlos de Bariloche sobre el lago Nahuel Huapi, demuestran todo el adelanto que se ha logrado. El mayor inconveniente del material, ha sido siempre la combustibilidad y su duración relativamente corta. Con los ensayos efectuados en la industria, se ha conseguido dar a la madera algunos tratamientos que, si bien no la tornan incombustible, pero la firma productora aún mantiene en secreto su procedimiento, que parece un tanto oneroso y lo emplean en la fabricación de puertas incombustibles. La duración de la madera puede ser prolongada con alguna facilidad por procedimientos que veremos más adelante.
2) ESTRUCTURA MACROSCÓPICA
La observación de un trozo de madera nos permitirá ver los diversos elementos característicos que la forman, y además, apreciar que no se trata de un material homogéneo. Si se observa el tronco de un árbol, se ve que tiene forma casi cilíndrica (troncocónica) y que está formado por sucesivas capas superpuestas (anillos). En primer lugar se aprecia que entre la madera y la corteza existe una capa generatriz, llamada cambium, que produce madera hacia el interior y corteza hacia el exterior. En cada período vegetativo se forma una nueva capa (anillo) que cubre la anterior. Dentro de cada capa se observan dos zonas bien diferenciadas, la formada al principio del período vegetativo con células de paredes delgadas y grandes lúmenes que se denomina madera de primavera, y la formada durante el verano, con células de paredes gruesas y lúmenes pequeños, llamada madera de verano. Esta diferencia entre las dos zonas, hace fácilmente distinguible en la sección transversal, una serie de anillos concéntricos llamados anillos de crecimiento, cada uno de los cuales corresponde a un período vegetativo de la vida del árbol y que en nuestro clima, representa el crecimiento anual, por lo que su número indica la edad del árbol.
Analicemos, una por una, las diferentes partes que se puedan observar en una sección normal al eje del árbol.
a) Médula: Parte central del árbol. Constituida por tejido flojo y poroso. Tiene un diámetro muy pequeño. Madera vieja y normalmente agrietada. Se suele desechar en los procesos de elaboración de la madera.
b)Duramen: Madera de la parte interior del tronco. Constituido por tejidos que han llegado a su máximo desarrollo y resistencia (debido al proceso de lignificación.) De coloración, a veces, más oscura que la exterior. Madera adulta y compacta. Es aprovechable. La duraminización (transformación de albura a duramen) de la madera se caracteriza por una serie de modificaciones anatómicas y químicas, oscurecimiento, aumento de densidad y mayor resistencia frente a los ataques de los insectos.
c) Albura: Se encuentra en la parte externa del tronco, bajo la corteza. Constituida por tejidos jóvenes en período de crecimiento (zona viva). Contiene mucha savia y materias orgánicas. De coloración más clara que el duramen, más porosa y más ligera, con mayor riesgo frente a los ataques bióticos.
d) Cambium: Capa existente entre la albura y la corteza, constituye la base del crecimiento en especial del tronco, generando dos tipos de células:
Hacia el interior: Madera (albura)
Hacia el exterior: Liber
e) Liber: Parte interna de la corteza. Es filamentosa y poco resistente. Madera embrionaria viva.
f) Corteza: Capa exterior del tronco. Tejido impermeable que recubre el liber y protege al árbol.
g) Radios leñosos: Bandas o láminas delgadas de un tejido, cuyas células se desarrollan en dirección radial, o sea, perpendicular a los anillos de crecimiento. Ejercen una función de trabazón. Almacenan y difunden las materias nutritivas que aporta la savia descendente (igual que las células de parénquima). Contribuyen a que la deformación de la madera sea menor en dirección radial que en la tangencial. Son más blandos que el resto de la masa leñosa. Por ello constituyen las zonas de rotura a comprensión, cuando se ejerce el esfuerzo paralelamente a las fibras.
h) Anillos anuales: Cada anillo corresponde al crecimiento anual, consta de dos zonas claramente diferenciadas:
- Una formada en primavera: Predominan en ella los vasos gruesos que conducen la savia bruta hasta las hojas (tejido vascular). Color claro, pared delgada y fibras huecas y blandas.
- Otro formado en verano: Tienen los vasos más pequeños y apretados. Sus fibras forman el tejido de sostén. Color oscuro denso y fibras de paredes gruesas.
En zonas tropicales (o en las zonas donde no se producen, prácticamente, variaciones climáticas con los cambios de estación, y la actividad vital del árbol es continua), no se aprecian diferencias entre las distintas zonas de anillos de crecimiento anual. Su suma, son los años de vida del árbol. Debido a la forma tronco-cónica del árbol, los anillos anuales se deben contar en el tronco, en zona más próxima a las raíces.
3) CLASIFICACIÓN.
La madera se clasifica en forma práctica por su compacidad, en pesada, semipesada y liviana. Científicamente se clasifican por su estructura anatómica, en coníferas o resinosas y frondosas.
Las maderas de las plantas coníferas o resinosas contienen trementina en mayor o menor cantidad, cuyo olor las caracteriza; tienen mucha homogeneidad y sus capas anuales suelen presentar bastante uniformidad, lo cual contribuye a su elasticidad. Son ejemplos de esta especie, los pinos, abetos, alerces, etc.
La madera de las frondosas acusa la presencia de tanino, son las maderas de mayor dureza y duración, como el quebracho, lapacho, incienso, etc.
Variedades de maderas nacionales y de importación
En construcción se utilizan una gran cantidad de maderas provenientes de las zonas boscosas del país, pudiéndose clasificarlas en dos zonas: las del norte, que abarca el litoral, y las del sur. Como la madera de importación tiene una gran aplicación en obra, constituye una tercera agrupación.
a) Variedades del norte: la variedad de maderas del norte utilizadas en construcción es muy grande, especialmente si se incluyen las obras auxiliares. De ellas solamente veremos las que tienen una aplicación más definida, clasificándolas en tres grupos: pesadas, semipesadas y livianas.
Pesadas
Algarrobo: se presenta en variados tipos: el amarillo, de color colorado morado; el blanco, de color amarillo rojizo; el negro, de color moreno oscuro, y el implanta, de color morado rojizo.
Cebil o curapay: hay tres variedades: el blanco, cuya albura es de color blanco grisado; el colorado, rosado, y el negro, de color rosado oscuro, casi rojizo.
Cedro: el color del duramen es castaño oscuro, y su albura es de coloración algo rosada. Para poder utilizarlo es esencial que este seco; también puede llegar apolillado.
Guatambú amarillo: de color amarillo claro.
Guayacán: el color del duramen es castaño; cuando es oscuro se le llama negro, y cuando es claro se le llama blanco. La madera es dura y difícil de trabajar, de aspecto parecido al Jacaranda.
Incienso: se presenta en dos tipos: el colorado, cuya albura es rosado claro, de fibra apretada pero no difícil de trabajar; de aspecto parecido al cebil; y el tipo amarillo, cuya albura es amarillo-verdosa, y por su aspecto puede confundirse con el lapacho verde.
Lapacho: también en dos variedades: el amarillo, cuya albura es de color castaño amarillento, y el tipo verde, con la albura de color amarillo verdoso.
Palma: se presenta en dos variedades: colorada, cuya albura tiene ese color, y la negra, con la albura de color pardo oscuro.
Quebracho: es de fibras cortas y apretadas. Se presenta en tres tipos: el rojo, con la albura de color castaño rojizo, muy duro de trabajar y resistente a las alternativas de sequedad y humedad y sequedad; el blanco, que tiene el duramen de color rosa amarillento y el tipo rubio, de color amarillo rojizo. Estos dos últimos tienen los poros apretados, pero están expuestos a ser apolillados. Su duración es precaria a las alternativas de humedad y sequedad.
Urunday: tiene el duramen de color castaño y cuando es claro se lo llama blanco. No es madera dura para trabajar pero el aserrado es dificultoso por la disposición de sus fibras.
Virapitá: el color del duramen es blanco rosado. El sol le da un color rosa plomizo. Los de tonalidad más clara duran menos bajo el agua.
Viraró: el duramen es de color rosa amarillento. En seco y en el agua tiene gran duración. Por su aspecto puede ser confundido con el virapitá.
Semipesadas
Caldén: el color de esta madera es castaño amarillento.
Caray ñacá: el duramen es de color colorado apagado.
Cedro: se presenta en tres variedades: el colorado, con el duramen de ese color; el misionero o paraguayo, cuyo duramen es de color castaño rojizo, y el tucumano o salteño, de duramen color castaño.
Nogal: hay dos variedades: una de color castaño oscuro, llamada silvestre tucumano, y el salteño, de color violado oscuro.
Petiribí: tiene el duramen de color amarillento.
Pino Paraná: el color del duramen es amarillento. La variedad denominada “pino brasil” es de calidad inferior, pero recomendable.
Livianas
Cambará: de duramen color amarillento.
Palma blanca: el duramen es de color blanquecino.
Timbó negro: tiene el duramen de color rojo oscuro.
b) Variedades de maderas del sur: de las zonas boscosas del sur también se extraen para la construcción.
Pesadas.
Algarrobo blanco: tiene el duramen de color castaño violado. De él se obtienen tablas cortas debido a la disposición de las fibras.
Roble de Neuquén: el color del duramen es pardo morado.
Semipesadas.
Alerce: el color del duramen es rojo pardo.
Caldén: de duramen amarillento.
Ciprés: duramen color amarillo.
Pino de Neuquén: el color del duramen s blanco amarillento.
Raulí: tiene el duramen color castaño rosado.
c) Maderas de importación: a pesar de la gran variedad de maderas existentes en el país, se emplean algunas de importación para aprovechar determinadas características que les son propias y que la gente está acostumbrada a pedir, aunque llegará el día que el número de las importadas será limitado a las más nobles y de características carentes en el país. Falta aún experimentar los usos posibles en construcción de nuestra producción forestal.
Abeto Douglas: importado de América del Norte. El duramen es de color rojizo.
Alerce chileno: procede de Chile. El color del duramen es rojo amarillento; de fibras apretadas, dura, no atacable por los gusanos.
Fresno blanco: de Norteamérica. El color del duramen es amarilo verdoso.
Laurel: procedente de Chile. Su duramen es de color amarillo verdoso.
Nogal: importado de Italia. Tiene el duramen color rosa oscuro, tirando al colorado amarillento. Se caracteriza por poderse pulir; de fibras cortas y compactas.
Pelin: procedente de Chile. Su duramen es de color rojo claro.
Pino: es madera esencialmente resinosa; acusa francamente los anillos anuales, de uso intenso en construcción y carpintería. Dentro de la gran variedad, los de mayor utilización son: el Pino Tea, importado desde América del Norte; el Pino Blanco Spruce, procedente de Europa; el Pino Blanco California, importado desde Norteamérica.
Raulí: importado desde Chile.
Roble: se importa de dos orígenes: de Norteamérica y de Eslavonia. El primero tiene el duramen de color castaño, y el segundo, rosa apagado, en general algo pardo. Su madera es muy dura y resistente, de fibras apretadas pero fácil de labrar. Es tal vez, la mejor madera empleada en la construcción, pues resiste perfectamente las alternativas de humedad y sequedad a la par que conserva su aspecto atrayente.
Desde otro punto de vista técnico, las maderas se dividen en: blandas, semiduras, duras y resinosas.
Los diferentes tipos de maderas, son:
Blandas: Sauce, Álamo, Pino blanco, Tilo, Plátano, etc.
Semiduras: Cedro, Pino tea, Algarrobo, Nogal, Quebracho blanco, Roble, etc.
Duras: Quina, Lapacho verde, Encina, Haya, Ñandubay, Quebracho colorado, Incienso.
Resinosas: Pino, Abeto, Ciprés, Araucaria.
4) APEO, SECADO Y CORTE.
Nuestro país, en el que están comprendidos todos los climas, tiene la mayor variedad de bosques naturales, en los cuales hallamos maderas blandas, como el aliso, cedro colorado, cedro salteño, coihué, pino Paraná, sauce, álamo; maderas semiduras, como el nogal de Tucumán, palo blanco, raulí, roble de Neuquén, tipa, y entre las maderas duras, sobresalen, para ser empleadas en la construcción, el algarrobo, Caldén, guayaibí, incienso, lapacho, quebracho blanco, urunday. El quebracho colorado, que también es madera dura, es muy difícil de trabajar, y debido a defectos de crecimiento, no es apta para ser utilizada en la edificación.
Las maderas que deben preferirse, generalmente, son las de procedencia fluvial, por la mayor uniformidad de sus fibras.
Apeo.
En general, la madera que se utiliza en nuestro país provienen de los bosques y montes naturales que se encuentran en formaciones selváticas muy variadas.
La explotación de los bosques ha sido hecho originariamente sin preocupación de la reposición de las especies abatidas, criterio erróneo que pudo conducir a la nación a una situación temprana de carencia de maderas. Felizmente el error se subsanó a tiempo y se procedió a aplicar la reforestación.
La época más propicia para abatir árboles es la de invierno, porque la vida vegetativa de ellos está amortiguada y la circulación de savia es mínima. También hay que tener la precaución de evitar los fríos intensos pues al actuar sobre la madera cortada hacen que ésta se torne más frágil.
La carencia, o poca cantidad de savia en la madera, elimina en la masa leñosa el medio favorable al desarrollo de los insectos, parásitos, etc., que la atacan.
El volteo del árbol se efectúa según normas ya determinadas y una vez en el suelo se procede a cortar en escuadra los extremos del rollizo, o bien se labra el mismo a fin de transformarlo en viga de sección cuadrada.
Estacionamiento.
Luego de aserrada la madera, y por efecto de la humedad, es imposible colocarla en obra, por cuanto su estado y su durabilidad no lo permiten. Por ello hay que proceder de inmediato a eliminar la humedad, operación que se denomina estacionamiento o desecado.
El secado de la madera puede realizarse de dos formas: a) Secado natural o al aire: Se realiza apilando a la madera en primavera, donde se traslada posteriormente a almacenes, donde se apilan aislados del suelo, para evitar que la madera sea atacada por los hongos o bacterias.
Este mecanismo consiste, en que la desecación se produce por simple evaporación,
con lo cual se desequilibra la presión osmótica del agua que se encuentra en el interior de la madera, tendiendo por lo tanto a irse al exterior, hasta que el medio ambiente deja de absorber humedad, en cuyo caso la madera queda estabilizada.
La velocidad de secado de la madera varía de unas especies a otras y el grado de desecación alcanzado está influenciado por las condiciones climatológicas de la zona.
Los inconvenientes que presenta el secado natural o al aire de la madera son los siguientes:
La lentitud del proceso, que impide la utilización rápida de la madera.
La carestía de la madera, por el costo del terreno y de la mano de obra.
El contagio de una pieza con otras infectadas.
Indeterminación del grado de secado alcanzado.
Existe una variedad de secado natural, que se llama secado al humo u oreo de la madera.
También puede realizarse el secado por un proceso electroquímico, que consiste en sumergir a la madera en un baño de colofonia (fluofosfato cálcico) y carbonato sódico y hacer pasar una corriente eléctrica, la cual tiende a acumular el agua en la superficie de la pieza de madera.
b) Secado artificial: Consiste en someter a la madera a corrientes de aire y a un grado higrométrico decreciente, ya que el aire tiene mayor capacidad de saturación y el calor, aumenta la tensión de vapor de agua de los poros con lo que se facilita su expulsión, debiéndose regular el sistema, para que el grado higrométrico del aire sea inferior a su capacidad de saturación, con lo que seguimos que el secado se realice en unos días.
Emplear aire a temperatura constante y hacer decrecer la humedad con
una neblina de agua.
Utilizar aire a temperatura y grado de humedad variable, de tal manera que la madera vaya entrando en contacto progresivamente, con aire seco y caliente a medida que avanza la operación. Para ello se utiliza el secadero de túnel de contracorriente.
Otro procedimiento de secado artificial consiste en someter a la madera a radiaciones infrarrojas, con lo que se logra un secado uniforme. Este procedimiento es muy caro, pero es muy positiva su utilización en maderas que tienen poco espesor.
También se puede utilizar el secado por alta frecuencia, pero también tiene el inconveniente de que es muy caro, y por lo tanto se utiliza solamente para el secado de piezas delicadas.
Cortes de la madera.
Una vez apeado el árbol se procede a cortarlo, para obtener las formas comerciales. Se efectúa un estudio sobre el máximo aprovechamiento de la madera, para obtener las piezas necesarias con el mínimo desperdicio. Se realiza por cortes en diversas formas, a saber:
a) Cortes longitudinales paralelos, con los cuales se obtienen tablones y tablas de diversos anchos. Tiene el inconveniente de que las piezas tienden a torcerse debido a la posición indicada en el croquis de la figura. El procedimiento es el más sencillo, porque evita una serie de maniobras con el tronco. En sus costados quedan dos tapas, a las que se suele denominas costeros.
b) El despiezo radial tiende a evitar los inconvenientes del anterior; el llamado despiezo holandés produce piezas en las que la veta es muy aprovechada como elemento decorativo, pero tiene el inconveniente de la cantidad de maniobras necesarias con el rollizo y el gran desperdicio de difícil aprovechamiento.
El método indicado en la figura siguiente, aunque no es estrictamente el sistema radial, es uno de los que produce menos desperdicios de madera.
c) El corte llamado en cruz consiste en sacar una pieza gruesa en el centro, que a veces se divide en dos, y de las tapas resultantes se sacan dos piezas del mismo espesor. De los sectores restantes se obtienen, por cortes radiales, tres o cuatro tablas de cada uno, con anchos variables.
d) El despiezo por cortes encontrados consiste en sacar, por dos cortes paralelos, un tablón central, que luego se divide por la mitad, continuando los cortes en forma alternada paralela, o sea encontrados, como se indica en el croquis siguiente, hasta dejar un pequeño trozo triangular. Los cortes de las maderas, cuando se trata de obtener vigas resistentes, se efectúan teniendo en cuenta que la mayor resistencia se obtiene en aquellas cuya relación entre tabla y canto es de 5/7, o sea b = 0,7 a, que se obtiene dividiendo el diámetro del rollizo en tres partes iguales, y de cada una de las dos divisiones se trazan perpendiculares que al cortar la circunferencia dan dos puntos; unidos éstos a los dos extremos del diámetro se obtiene el rectángulo en la proporción buscada.
5) PROPIEDADES.
Las propiedades físicas son variables; dependen del crecimiento, de la edad y de la parte del árbol de donde procede. También, aunque no en forma tan directa, de la clase del terreno y del contenido de humedad. Los caracteres exteriores difieren de una variedad de planta a otra. Los que facilitan el reconocimiento de las maderas son, en particular, el color, la disposición de las fibras, la dureza y la densidad.
Las maderas blandas presentan vasos abiertos y fibras largas y gruesas (tejido muscular flojo); son livianas y capaces de acumular una cantidad de agua en estado libre. Las maderas duras, en cambio, poseen pequeños vasos y fibras cortas y delgadas; al envejecer el árbol quedan consolidadas, resultando una madera compacta, resistente, de mayor peso.
Dureza: es una propiedad muy importante por cuanto sirve de base para la clasificación usual. Pueden catalogarse como blandas las maderas de crecimiento rápido, y duras las de crecimiento lento. La madera de corazón es más dura que la albura. La dureza sirve de indicio para apreciar la resistencia y la homogeneidad de la madera.
Humedad: la madera es higroscópica; absorbe y desprende humedad según el medio ambiente. Contiene agua de constitución a la que se le agrega la de saturación, que correspóndela medio ambiente que la rodea para conservar el equilibrio; por ello la madera secada al aire contiene del 10 a 15% de su peso en agua, y esta humedad hace que se hinche o contraiga, variando su volumen y por consiguiente su densidad.
Contracción e hinchamiento: cuando la madera pierde humedad se contrae, y cuando, por el contrario absorbe la humedad se dilata. La mínima contracción es en dirección axial o de las fibras, y es más energética en albura (periferia) que en el corazón (centro); como consecuencia de esta diferencia, se resquebraja el núcleo de las vigas rectangulares y se alabean las tablas delgadas. Por este motivo el mejor despiezo es el radial.
El hinchamiento se produce con el aumento de la humedad dentro de la madera, que aumenta de volumen hasta el llamado punto de saturación (20 a 25% de agua), a partir del cual ya no varía su volumen aunque la viga continúe absorbiendo humedad.
Las oscilaciones de humedad y sequedad son muy importantes en la madera, por lo que debe tenerse muy presente este cambio de volumen para dejar los espacios libres para los empujes; también debe evitarse el empleo de ladras verdes o poco estacionadas, por tener esta propiedad más pronunciada.
Densidad o compacidad: la densidad real es uniforme para todas las especies, de 1,50 a 1,55; en cambio, la densidad aparente es muy variable hasta en una misma madera, según el grado de humedad y el sitio del árbol, siendo más denso el duramen que la albura; en otros, como la caña, palma, etc., la más dura es la periferia.
Los árboles cortados en invierno dan maderas más pesadas que los cortados en verano dentro de una misma especie. La densidad aparente varía según la cantidad de agua contenida; la que subsiste en la madera luego de ser secada al aire (10 a 15%), sólo puede ser eliminada artificialmente.
Elasticidad: es la propiedad de la madera que la hace útil para determinados trabajos y resistente a los choques. Esta propiedad es menor cuanto más seca esté la madera. En general la madera pesada es más elástica que la liviana.
Encurvamiento: es bastante importante por cuento importa una economía del material. Es la propiedad que tiene la madera de dejarse curvar y conservar esa forma en determinadas condiciones. Cuando las piezas a construir deben tener alguna curvatura y no ha sido posible encontrarla al estado natural, se le da a una pieza recta; por corte significaría una pérdida grande de material; en cambio, si se la calienta e impregna de agua que la ablanda para luego presionarla convenientemente hasta darle la curva solicitada, dejada enfriar y secar conservaría la forma, con la ventaja sobre la que se hubiese efectuado por cortes, de que las fibras longitudinales están intactas. Este mismo procedimiento se emplea para enderezar las piezas curvadas.
Esta propiedad está en relación directa con la elasticidad y la tenacidad de la madera. No debe olvidarse que la tenacidad en la madera seca es hasta un 30% mayor que en la húmeda y que el frío la disminuye.
Duración: la duración de la madera es muy variable, depende de su naturaleza y del medio en que se la haya colocado, influyendo grandemente las alternativas de humedad y sequedad. Si está enterrada en un suelo arcilloso tiene una duración bastante grande, en cambio, en un suelo calizo su duración es precaria. Sumergida totalmente en agua corriente dulce tiene una duración casi limitada.
Anisotropía. Es un material anisótropo, es decir no se comporta igual en todas las direcciones de las fibras. Es más fácil cepillar longitudinalmente al sentido de las fibras que transversalmente, y ocurre a la inversa con el aserrar.
Resistencia. La madera es uno de los materiales más idóneos para su trabajo a tracción, por su especial estructura direccional, su resistencia será máxima cuando la solicitación sea paralela a la fibra y cuando sea perpendicular su resistencia disminuirá. En esta solicitación juegan un papel importante las fibras cortas o interrumpidas y los nudos, que minoran la resistencia.
El esfuerzo de flexión, origina uno de tracción y otro de compresión separados por una zona neutra, por lo cual la resistencia a flexión será máxima cuando la fuerza actuante sea perpendicular al hilo y mínima cuando ambos sean paralelos.
Conductividad: Mal conductor de calor cuando esta seca. Esta cualidad esta relacionada con su estructura, fibrosa, con poros y alvéolos. La madera húmeda y ligera transmite mejor el calor. Tiene un coeficiente de conductividad muy bajo.
Madera | K = 0.12 - 0.18 |
Hierro forjado | K = 30 |
Hormigón armado | K = 1.30 |
Ladrillo macizo | K = 0.75 |
( K es la cantidad de calorías que atraviesan en una hoja de 1m2 de superficie, y 1m de espesor, cuando la diferencia de temperatura entre paramentos opuestos es de 1ºC)
Comparando con la fabrica de ladrillo, una pared de madera de 10cm de espesor, tiene el mismo poder aislante que un muro de asta y media de ladrillo macizo enfoscado al exterior y lucido al interior.
Propiedades acústicas de la madera
Aislamiento acústico frente a ruidos aéreos externos: El aislamiento de los materiales frente a éstos tipos de ruidos dependo de su peso específico, aumentando el aislamiento conforme aumenta éste. La madera al tener un peso específico tan bajo es un aislante muy malo, siendo uno de los grandes problemas de utilización como divisor en viviendas y edificios de núcleos urbanos.
Aislamiento acústico frente a ruidos aéreos internos: Reverberación. El problema de la reverberación se produce cuando el sonido producido en una habitación ni se transmite fuera de ella, ni es absorbido por materiales existentes en su interior, rebotando de una pared a otra hasta extinguirse, causando una desagradable sensación acústica. Los materiales absorbentes del sonido son aquellos que tienen muchos poros, circunstancia que se produce en la madera, por lo que la abundancia de este material en una habitación evita la reverberación. Esta propiedad, junto con la conductividad térmica es la que han otorgado a la madera su calificativo de material noble por la agradable sensación acústica y térmica que otorga su presencia.
Aislamiento acústico frente a impactos: El aislamiento ante este tipo de ruidos, se produce cuando el material absorbe toda la energía del impacto, mediante su deformación. En este sentido, son buenos los materiales elásticos, como es el caso de las moquetas, el corcho y en menor medida la madera.
Transmisión acústica: Es la velocidad con que se transmite el sonido a través de un material. La madera es uno de los materiales que mejor transmiten el sonido, siendo por ello utilizada en instrumentos musicales.
Esta propiedad permite, conociendo la densidad de la madera, saber la resistencia de ésta sin necesidad de realizar ensayos destructivos. Incluso, permite calcular el estado de una viga, atacada por insectos u hongos, sin necesidad de quitarla de servicio.
6) DEFECTOS.
Los fallos de crecimiento son desviaciones del desarrollo normal de un árbol, sobretodo de su tronco. Por lo general reducen la utilidad de la madera, pero hay en cambio casos en que suponen una ventaja para su utilización, como por ejemplo, las excrecencias nudosas de los troncos en la fabricación de chapeados.
Los tallos defectuosos hacen casi siempre imposible su utilización completa de oficio. El tronco de madera toda ella aprovechable ha de ser macizo, es decir, la reducción en diámetro no ha de ser superior al centímetro por
metro de tronco. Las diferencias superiores de la forma cilíndrica de un tronco se conocen como támara o leña de desperdicio.
Un defecto corriente de crecimiento es la encorvadura por la cual un tronco se desarrolla más o menos apartado de una dirección rectilínea o vertical. En la bifurcación se divide el tronco cerca del suelo. Los árboles se bifurcan cuando la cima principal se deteriora siendo joven o por capricho de la naturaleza o cuando se destruye por rotura, heladas o granizo. La horquilla se forma a varios metros sobre el suelo. Se forma por lo general por predisposición hereditaria y también por influencias externas. Si la horquilla se forma por debajo de los 8 o 10 metros, la madera del tronco pierde mucho valor porque a menudo por debajo de la horquilla suele tener doble corazón o médula.
El crecimiento de nudos puede aparecer en casi todas las maderas. En este fallos corren los anillos anuales en líneas onduladas concéntricas con entradas proporcionales en los radios medulares principales. Por estas irregularidades en el curso de las fibras se generan dibujos superficiales muy atractivos. El abeto nudoso tiene una madera muy solicitada para la fabricación de cajas de resonancia de instrumentos de música.
El crecimiento de nudos puede aparecer en casi todas las maderas. En este fallos corren los anillos anuales en tronco y a consecuencia de ello los anillos anuales se estrechan mucho por un lado y por el otro se separan. Los objetos hechos con esta madera se alabean si los troncos no se cortan correctamente.
La madera presionada o palo de Pernambuco se forma frecuentemente en los abetos y pinos en la parte del tronco opuesta a aquella por donde la presión del viento lo ha doblado. La formación de madera presionada conduce a menudo a un tronco de sección excéntrica, cuya utilidad es poca porque siempre se alabea. Al cortarla con sierra circular se agarrota mucho y puede ser causa de accidentes.
El resquebrajamiento o estriado se aprecia por estrechamientos y sinuosidades en el tronco. En esta anormalidad los anillos anuales no son circulares. Se encentra por lo general en hojaranzos y alcornoques y a veces también en abetos, olmos y tejos.
El crecimiento torcido o revirado puede ser con giro a la izquierda o la derecha. Con giro a la derecha (visto de arriba abajo) corren las fibras de la madera como los hilos de rosca de un tornillo. Como causas de crecimiento torcido se han visto la herencia, las influencias del lugar y el efecto del viento. Los objetos hechos con madera de fibra revirada se alabean y deforman.
Las excrecencias se forman por tuberosidades de yemas laterales impedidas en su desarrollo. La madera con excrecencias es difícil trabajarla pero por el curso especial de sus vetas y los bellos dibujos que forman, es una madera apreciada para la fabricación de chapados y obras de tornería.
Las agallas de resina son espacios huecos rellenos de resina que se suelen formar entre los límites de madera tardía y madera temprana de dos anillos anuales. Tienen lugar sobretodo en pinos, pero nunca en abetos.
Los anillos lunares se ven sobretodo en el roble. Están causados principalmente por la interrupción parcial o total de la mineralización de la madera, de lo que resulta un anillo de albura más claro o una zona falciforme de madera de albura. La interrupción de la mineralización es casi siempre consecuencia del efecto de fuertes heladas o de trastornos durante el crecimiento. Los anillos lunares en la madera de roble deben despreciarse.
Los núcleos falsos se encuentran en los árboles frondosos, preferentemente en hayas, abedules y chopos. Como causas se han visto la penetración de hongos en la madera o el soporte de fríos intensos. En los nudos falsos suele formarse alrededor de ellos una línea de contorno negruzca que separa la madera atacada de la sana. Por ello el valor de esta madera es tanto menor cuanto mayor es la descomposición descrita. La madera de los falsos nudos casi nunca se puede aprovechar.
La nudosidad es propia de todos los árboles, no hay ningún árbol sin ramas. En general se llaman ramas a las partes de un árbol que forman su copa. Las partes de esas ramas que quedan encerradas en la madera aserrada se llaman nudos.
La entrecorteza o entrecasco aparece por variación repentina de la variación de luz en el lugar del árbol. Con ello se puede presentar una variación del ancho de los nudos anuales y como consecuencia de esto una separación entre los mismos. La entrecorteza suele encontrarse en las coníferas. Según el lugar de la entrecorteza la utilidad de la madera se ve más o menos reducida.
Las grietas estrelladas o medulares aparecen cuando en el tronco se invierten las zonas de anillos anuales anchos con las de anillos estrechos. Al secar la madera puede suceder que se separe por completo la de duramen de la de albura.
El recubrimiento o cicatrización de heridas es la forma como un árbol pretende cerrar las lesiones producidas en la capa del cámbium. Pocas veces se produce el recubrimiento completo; casi siempre quedan partes por cerrar en las que se introducen hongos que deprecian la madera. Las partes recubiertas de una pieza aserrada deben pues quitarse.
Las fendas se subdividen en fendas de corazón partido (estrellado), de heladura (atronadura), de desecación o de merma y en acebolladuras (colainas).
Fendas de corazón partido
Las grietas internas de dirección radial en el duramen o la madera razonada que parte de corazón y tiene gran extensión a lo largo del surtido.
Estas fendas surgen en el árbol creciente y aumentan en el tronco talado en el proceso de su desecado. Las fendas de corazón estrellado en la madera en rollo sólo las hay en los topes, en la madera aserrada puede encontrarse tanto en los topes, como en la superficie lateral.
Fendas de desecación.
Son grietas de dirección radial que surgen en la madera cortada bajo la acción de las tensiones internas en el proceso de su desecación. Se diferencian de las fendas de heladura de corazón partido por una menor extensión a lo largo del surtido y una menor profundidad.
Todas las variedades de fendas, sobre todo las pasantes, alteran la integridad de la madera, y en algunos casos reducen su, resistencia mecánica.
Fendas de heladura.
Son grietas exteriores dirigidas radialmente que pasan de la madera de albura al duramen y tienen una extensión considerable a lo largo de surtido. En la madera aserrada se encuentra en forma de grietas radiales larga cerca de la cual se ensanchan y se encorvan las capas anuales; estas fendas tienen las paredes oscuras cubiertas de resina.
Acebollura o Colaina.- atribuidas a vientos, hielos y fuegos.
Cupranura, o pata de gallina.- en árboles viejos parte de una medula , y con distintas variables.
6) MEDIOS DE CONSERVACIÓN DE LA MADERA.
Varían de acuerdo con el ambiente y los agentes de destrucción que actúan sobre las mismas.
Para maderas en ambientes permanentemente secos, basta con el lavado natural o artificial y el secado o estacionamiento. El lavado natural consiste en sumergir los rollizos en agua durante algunos meses, para eliminar la savia que constituye el alimento de los organismos vegetales destructores de las maderas. El lavado artificial, se efectúa sumergiendo los rollizos en agua caliente o vapor a presión, a fin de eliminar las mismas substancias. El secado, generalmente se hace en forma natural, exponiendo las maderas al aire y reduciendo así su humedad a menos del 15%.
Las maderas sumergidas constantemente en agua dulce, o salada con menos del 1% de sal, no necesitan ningún tratamiento.
Las sumergidas constantemente en agua salada con más de 1% de sal, deben protegerse contra el teredo, cangrejos y otros organismo, mediante algunos de los siguientes procedimientos:
1- Recubriéndolas con caños de hormigón armado, chapa galvanizada, etc., llenando los vacíos con tierra arcillosa.
2- Revistiéndolas con:
a) Metal desplegado y mortero a presión;
b) Clavos de cabeza ancha que cubran toda la superficie;
c) Chapas de cinc o de cobre;
d) Pinturas asfálticas o alquitranes;
e) Carbonización superficial.
3- Impregnándolas con sustancias antisépticas.
Este último, es el método más eficaz, pudiendo ser la impregnación superficial o profunda. La primera, se reduce a la simple inmersión de las maderas en líquidos antisépticos, a base de creosota, cloruro de cinc, sulfato de cobre, cloruro de mercurio. La impregnación profunda se hace a presión, y para ello existen varios procedimientos, uno de los cuales es el siguiente:
Se apilan los rollizos, aún verdes, ligeramente inclinados, con las partes inferiores de los troncos hacia arriba, adaptándose a los mismos un dispositivo que permite inyectar a presión el líquido antiséptico; la operación se continúa hasta que éste haya desplazado por completo a la savia, lo que se comprueba al verlo salir por la parte baja del tronco.
Las maderas expuestas a alternativas de sequedad y humedad, además de estas perfectamente estacionadas y libres de savia y almidones, deben protegerse si dichos cambios son pronunciados y se quiere asegurar la duración de las mismas. Este cuidado es más necesario en las maderas blandas que en las duras, y puede efectuarse empleando pinturas antisépticas, o por impregnación. Cuando se trata de resguardar maderas que serán usadas en interiores, utilízanse pinturas al aceite, que tienen por objeto preservarlas de la humedad; su aplicación debe hacerse únicamente sobre maderas bien secas.
Donde las variaciones de humedad son mayores, a la intemperie por ejemplo, requieren pinturas que, además de servir de aislación, sean antisépticas, para prevenir así el ataque de los microorganismo destructores; se preparan a base de alquitrán o creosota.
8) SECCIONES COMERCIALES.
Interesa este aspecto para la adopción de las medidas a utilizar ya que sabemos que la madera es aserrada mucho antes ser utilizada. La madera es vendida por unidad de medida arbitraria que puede ser entre nosotros el pie cuadrado de madera o más común (respecto al sistema métrico decimal como lo fijan las normas) el metro cuadrado; el pie cuadrado es la cantidad de madera necesaria para construir un tablero idal de 12” (305 mm) por 12”, con espesor de 1” (25,4 mm); el metro cuadrado tiene la cantidad de madera suficiente para hacer un tablero de 1m por 1m y un espesor de 2,5 cm. Para establecer el precio de la madera se mide el volumen y después se reduce a tantos pies o metros cuadrados. Como ejemplo se puede decir que 1m3 de madera permite hacer 40 tablas de 2,5 cm de espesor. Pero la madera en viga o en rollizo se expende bajo otras unidades como son la tonelada o el metro cúbico (en nuestro país es más común el último).
En otros casos no se unas ninguno de estos sistemas de unidades, vendiéndose la madera por kilogramos y ellos corresponde a la madera de alto costo, como el palo santo que se caracteriza por su veta y es usado en muebles pequeños, herramientas, etc.; lo mismo ocurre con el BOJ que es una madera sólo usada en los lugares donde se requiere un bajo coeficiente de rozamiento como puede ser en los cojinetes para máquinas.
La designación corriente de la madera de acuerda su tamaño es variable y se acostumbra a referirla a las dimensiones de la sección transversal; se toma como módulo la pulgada inglesa siendo todas las dimensiones múltiplos o submúltiplos de ella. Se da el nombre de Tabla al ancho y de canto al espesor.
Las denominaciones usuales para las diversas formas comerciales de la madera en nuestro país son: rollizo, viga, poste, tirante, tirantillo, tablón, tabla, alfajía, listón.
Rollizo: se llama así al tronco abatido una vez despojado de las ramas y de la corteza, cualquiera sean sus dimensiones. El valor se establece por peso.
Viga: es el rollizo recuadrado o escuadrado en las dimensiones máximas posibles. Conserva los ángulos redondeados cuando ha sido escuadrado a mano. Cuando lo fue a máquina sus aristas son vivas.
Poste: es una variante del rollizo y se obtiene de un tronco delgado o de grandes ramas secundarias.
Tirante: se denomina así a las piezas escuadradas cuyo largo es mayor de 3 m. y cuya escuadría mínima es de 3”x 6”
Tirantillo: es un tirante cuya escuadría es menor , por ejemplo de 3”x 4” y de 4”x 4”. Tanto el tirante como el tirantillo se venden por forma lineal.
Tablón: se llama así a la pieza que tenga un ancho mínimo de un pie (30 cm) y un espesor, también mínimo, de 2” (5 cm). En el comercio se vende por metro lineal.
Tablas: son menores que las anteriores; sus medidas de ½” de espesor y 6” de ancho. Se venden también por metro lineal.
Alfajía: son piezas derechas y cepilladas, de medidas tales como ½”x 3”; 2”x 3”; 1”x 2”, 1 ½”x 1½” y ½”x 2”. Estas son las piezas que suelen emplear los albañiles como regla. Se venden por metro lineal.
Listón: son alfajías de secciones menores; se venden en atados de 48 piezas y con un largo aproximado entre 11 y 18 pies. Secciones de 1”a 1 ½ “de ancho por 1/ 3” a ½” de espesor.
Molduras o perfiles: Obtenidos a partir de listones a los que se les da una determinada sección.
9) RESISTENCIA
Para la valoración de una madera como material, la resistencia es una de las propiedades importantes. Se entiende por resistencia la que ofrece la madera frente a la actuación de fuerzas externas.
Según sea la forma de la solicitud se distingue entre resistencia a la tracción, a la compresión, la flexión, deslizamiento, cortadura o cizallamiento, torsión, pardeo y escisión (rajado).
La resistencia a la tracción de la madera es solo de poca importancia para muebles y construcciones interiores. Se distingue entre resistencia a la tracción transversal y longitudinal. La primera, o sea la transversal a las fibras, es inferior al 10% de la resistencia a la tracción longitudinal.
La resistencia a la compresión puede en general no tenerse en cuenta en ebanistería. De todos modos, en el trabajo de la madera puede considerarse cuando se emplean prensas y prensillas en lugares de presión. La deformación que así se produce en el lugar de presión puede evitarse utilizando unos suplementos planos. No obstante si se producen, a menudo desaparecen hinchándose de nuevo con agua clara caliente.
La resistencia a la compresión es una de las medidas de la madera. En la resistencia a la compresión se distingue compresión transversal y longitudinal. En el sentido longitudinal de la fibra (de testa), la resistencia a la compresión es 5 a 8 veces mayor que transversalmente.
La resistencia a la flexión (resistencia a la rotura) es importante cuando se trata de piezas delgadas , largas y de plano o planas. La pieza se flexa cuando se carga fuera de los soportes o apoyos. Como ejemplos de estas piezas están las estanterías, los asientos de bancos y las tablas de entarimados.
Por lo general es tanto mayor cuanto mayor es la densidad bruta y menor la humedad de la madera; además, se ve disminuida por desviaciones de las vetas y por los nudos.
La resistencia a la cortadura es la que presenta frente a la fuerza que actúa de una pieza de material contra otra en una superficie (superficie de corte) tratando de desplazarla. En esa superficie aparecen tensiones de deslizamiento. En la madera se distingue la resistencia a la cortadura paralela a las fibras (al hilo) de la normal de las mismas (transversal).
La resistencia a la cortadura paralela a las fibras tiene lugar en el acuñado, apuntalamiento, hojas enganchadas, ensambladuras y juntas con cola de milano. Desempeña también una gran función en los trabajos de la madera con arranque de viruta, como por ejemplo, aserrado, amortajado y limado.
La resistencia a la cortadura paralela a las fibras es pequeña.
La resistencia a la cortadura normal a las fibras suele ser la más importante para las distintas juntas de madera, como por ejemplo los tacos.
ocas veces se presenta una solicitación a cortadura pura; lo corriente es que la pieza sea sometida al mismo tiempo a flexión, presión y rozamiento.
Por resistencia a la torsión se entiende la que presenta la madera contra la rotación o giro alrededor del eje longitudinal a la fibra. A menudo las piezas solo quedan lesionadas, es decir se afloja la estructura de la madera sin llegar a la rotura. La resistencia a la torsión de la pieza depende de la clase de la madera, de su densidad y humedad, de la forma de su sección y la superficie de ésta. Se ven sometidas a torsión, por ejemplo, las piezas mientras se torsión o las patas de una silla al girar el cuerpo estando sentados.
La resistencia a la torsión de la madera paralela a las fibras es algo mayor que a la cortadura, pero solo del 15 al 20% de la resistencia longitudinal.
La resistencia al pandeo debe tenerse presente cuando se trate de piezas esbeltas. Las piezas esbeltas, en comparación con su longitud tienen secciones de poca longitud. Entre ellas están postes, puntales y patas de sillas. Si estas piezas se someten a una fuerte compresión longitudinal se pandean por la parte más débil.
La resistencia al pandeo es pues un caso especial de la resistencia a la compresión. El pandeo es máximo en el tercio central de la longitud del eje y depende de la esbeltez de la pieza, de la clase de madera, de su humedad y forma de su sección y de la sujeción de sus extremos.
La resistencia a la escisión (al hendimiento o a rajarse) es la que presenta la madera a la abertura de su estructura al introducir una cuña en el sentido de las fibras. En el hendimiento la grieta precede a la cuña; por lo general la madera se hiende más fácilmente en el sentido radial que en sentido tangencial. Transversalmente alas fibras la madera no es hendible. Las maderas que se rajan con facilidad tienen poca resistencia a la escisión y las que cuesta rajarlas mucha. A las primeras pertenece el abeto, el pino, el roble, el fresno, el haya y el aliso y, a las segundas, el arce, el abedul, el olmo, el álamo, el tilo, el castaño y las maderas de árboles frutales. Las maderas que se hienden bien se emplean para la fabricación de tablillas, duelas, radios de ruedas, peldaños de escaleras y remos.
Resistencia al desgaste.
Las maderas sometidas a un rozamiento o a una erosión, experimentan una pérdida de materia (desgaste)
La resistencia al desgaste es importante en las secciones perpendiculares a la dirección de las fibras, menor en las tangenciales y muy pequeña en las radiales.
Resistencia al choque.
Nos indica el comportamiento de la madera al ser sometida a un impacto. La resistencia es mayor, en el sentido axial de las fibras y menor en el transversal, o radial.
Máxima axial
Mínima radial
10) PRODUCTOS Y SUBPRODUCTOS.
Madera terciada.
La madera se encuentra limitada en cuanto a su uso por determinados aspectos; uno de ellos es la falta de estabilidad dimensional; otra limitación refiere a los anchos disponibles pues parte del tronco se pierde al labrar el rollizo con hachas para eliminar la albura; otra parte cuando el leño tiene grietas de corazón y es necesario quitar la parte del centro; el ancho útil de la madera aserrada en tablas se reduce a unos 30 cm. o poco más, por lo tanto para conseguir tablas de anchos superiores se debe hacer empalmes con cola. Esta limitación llevó a la creación de un material que corrige esa deficiencia, y que recibe el nombre de madera terciada, que se forma tomando láminas delgadas de madera y uniéndolas entre sí mediante colas, pero disponiendo las fibras cruzadas (terciadas); esa disposición tiende a neutralizar movimientos provocados por la humedad; se utilizan por lo menos tres capas (nunca 2) o un número superior pero generalmente impar. Las dos capas exteriores tienen sus fibras paralelas.
Con esa disposición también se trata de corregir la anisotropía elástica, pues se tiende a igualar la resistencia de la madera en cualquier dirección de su plano. Los esfuerzos que ejercen en las dos direcciones principales de las fibras son absorbidas por las fibras respectivas, y los inclinados respecto a las dos direcciones son absorbidos parcialmente por cada dirección. Con este procedimiento se reduce la resistencia máxima pero se aumenta la mínima y a medida que se aumenta el número de capas se va nivelando esa diferencia entre resistencia máxima y mínima. Como ejemplo podemos decir que en la madera de 3 capas de igual espesor y calidad y tenemos resistencia máxima y mínima de 2/5 y 3/5; en la de 7 capas, de 3/7 y 4/7, etc., de las correspondientes tablas macizas del mismo espesor
Además con la madera terciada se logran mayoría anchos ya que las chapas se obtienen por corte en espiral, dando anchos de 2 a 2,50 m. y largos indefinidos (hasta 4 y 5 metros) se suele cortar, aun cuando el largo máximo de chapas puede ser mucho mayor. El encolado de las hojas requiere, corrientemente y eventualmente presión y calor y de allí que por razones prácticas (tamaño de las prensas) se limiten las dimensiones , considerando un largo máximo de 2,44 m. y ancho máximo de 1,22 m. (4 pies). Para usos especiales se fabrican tamaños mayores.
Este sistema de corte en espiral requiere que la madera esté mojada para lo cual se somete al tronco a un proceso de remojado y ablandamiento con agua caliente o vapor. Para abaratar la madera terciada no se hacen todas las capas de la madera fina; por ejemplo una madera terciada de roble sólo serán de roble las capas exteriores siendo las interiores madera blanda y barata; con ello se economiza y se obtiene el mismo valor decorativo y estructural.
Las chapas se vinculan mediante encolados que varían según su uso. Las primeras maderas terciadas que se hicieron se encolaron con colas animales (de pieles, cueros, huesos) o vegetales (almidones o féculas), pero son alteradas por la acción de la humedad siendo atacadas por microorganismos; de allí que las chapas así encoladas se levanten y despeguen en ambientes húmedos y por lo tanto el empleo de maderas en esas condiciones es limitado al uso en ambientes secos. En reemplazo de estas colas se han hecho otras más resistentes a estos agentes; son de origen orgánico unas o inorgánicos, otras, así tenemos las cola de caseína. La caseína es un subproducto de la leche que se puede disolver en agua en presencia de agentes alcalinos como la sosa; esa disolución de caseína se usa como cola para el terciado y desarrollo la unión con el desecamiento e íntimo contacto para lo que requiere presión. La caseína es moderadamente resistente a la acción de la humedad pero se reblandece un poco, cuando la humedad es prolongada da lugar a la formación de colonias de microorganismos pero ello se puede resolver con el agregado de productos conservadores a la cola o la impregnación de la madera con sustancias tóxicas. La cola de caseína es usada en ambientes interiores y en los exteriores protegidos. Para encolados de mayor resistencia mecánica y a la acción de los microorganismos y humedad se utilizan encolados de resinas sintéticas que son de tipo plástico.
Los espesores corrientes de la madera de la madera terciada oscilan entre 3 y 12 mm (1/8”, ½”) y el número de chapas que se utilizan es variable y creciente a medida que aumenta el espesor, así cuando hay 3 chapas tenemos un espesor de hasta 6 mm; con 5, 7 y más chapas los espesores son mayores.
No existe una norma uniforme para clasificar la calidad de la madera terciada usándose en forma confusa las corrientes en el país de origen del terciado.
Con todo hay una tendencia al empleo de las usuales en Europa Continental; pero la falta de un organismo o autoridad encargada de controlar la clasificación hace que ésta se haga a menudo con mucha impropiedad.
La calidad se identifica con una o más letras distintas de acuerdo con la siguiente clave; Calidad A: cara completamente libre de defectos tales como decoloraciones, nudos tapados o saltados, uniones, etc., admitiéndose únicamente algún nudo muy pequeño.
Calidad B: cara con pequeños nudos o defectos o juntas perfectas que no le impiden tener muy buena presentación.
Calidad BB.: cara con nudos en cantidad, juntas visibles, etc. Cuando los nudos son taponados en su mayoría y sólo presentan pequeños saltados se la califica de BB. primera y cuando tiene muchos nudos saltados y juntas en cantidad BB. segunda.
Calidad C: admite toda clase de defectos y corresponde a la madera para envases.
No todas las maderas terciadas vienen en todas las calidades indicadas.
Madera Compensada.
Tiene similitud con la terciada ya que en la parte exterior es igual, pero la diferencia estriba en la masa interna que está constituida con listones de madera recubierta por dos chapas de cada lado, la primera en contacto con el relleno de listones con las fibras perpendiculares a ellos, y la segunda perpendicular a la primera,, o sea paralela a los listones. Se la conoce también como placa de carpintería. La parte interna se hace con una madera blanda ordinaria, que puede ser álamo. Las dos capas siguientes son de mejor calidad y en especial la última. Los listones se colocan de modo que la disposición de los anillos anuales compense los movimientos y deformaciones provocados por el cambio de tenor de humedad. Para formar esos rellenos de listones se superponen tablas dispuestas de tal manera que cada tabla presente una disposición distinta de sus anillos anuales con respecto de las siguientes; esas tabla superpuestas se encolan y dan vigas que se prensan, dejando endurecer la cola, luego se aserran y se sacan tabla en sentido perpendicular al anterior; se revisan luego con las dos chapas de maderas.
También se puede usar en lugar de listones de madera, chapas delgadas.
Además del tamaño normal de las chapas de 1,22 m por 2,44, también se fabrican en los tamaños comunes para puertas de 0,70; 0,75 y 0,80 m de ancho por 2; 2.05 y 2,10 m de largo. Son muy comunes estos tamaños pues con ello se evita el desperdicio de madera.
Tablas aislantes y duras de madera.
La fabricación de tablas aislantes fue lógicamente una consecuencia de las industrias del papel y de cartón, por cuanto se constato que la pasta mecánica gruesa obtenida sin la adición de sustancias aglutinantes y convenientemente secas , permitía obtener planchas gruesas afieltradas con suficiente rigidez para su utilización como paneles útiles en la construcción y también como aislantes térmicos . Ello dio origen a las tres clases perfectamente definidas de tableros para la construcción : tableros aislantes , tableros duros y tableros de madera aglomerada.
Cada uno de ellos fue consecuencia del anterior y así vemos que los llamados tableros duros siguieron al desenvolvimiento de una plancha húmeda similar a la de los tableros aislantes , comprimida y desecada en una prensa térmica, la que dio como resultado una chapa compacta dura y rígida.
Posteriormente , la obtención de resinas sintéticas adhesivas las que secan rápidamente por acción del calor permitido aglutinar fragmentos pequeños de madera , dio origen a los tableros de madera aglomerada.
Los tableros aislantes y duros pueden considerarse ambos como tableros de fibras , diferencia básica con respecto a lo de madera aglomerada.
La densidad de los tableros prensados oscila desde 0,02 a 1,45 g/cm3.
Los de baja densidad son los de características aislantes , en tanto que los pesados se utilizan estructuralmente.
El hardboard o tabla dura esta constituido por fibras de madera que se han prensado.
Esta forma de usar la madera permite aprovechar todos los recortes , que se colocan en autoclaves con vapor a alta presión ; se da salida de esa madera triturada con vapor y se expande en forma brusca explotando y obteniéndose fibras que colocadas en moldes, prensados y calentados dan un material con una cara lisa ( cara vista ) y la otra con una cuadricula producida por la contratapa del molde con el objeto de mejorar la adherencia de las colas en caso de usarla , como revestimiento. La cara lisa puede ser sin brillo y admite, tanto como la otra , pintura . También se fabrica con una cara brillante , llamándose entonces Hardboarrd, o tapa dura templada , sin ser un material insensible a la acción de la humedad , es mas resistente que la madera en estado natural.
Tableros o placas aislantes.
Bajo esta designación existen en plaza diversos materiales que por su propia constitución si bien representa elementos que pueden considerarse estructurales, cumplen funciones de aislantes .
Están constituidos en general por fibras de caña de azúcar en unos casos , o por fibras de madera en otros que han sido previamente afieltradas y comprimidas con singular tenacidad a objetos de dejar millares de células de aire extremadamente pequeñas y ocultas , que constituyen un eficaz medio de aislamiento.
Las fibras de maderas mencionadas se han sometido en la mayoría de los casos a la depuración de toda materia orgánica fácilmente putrescible y provienen reduciendo a la pulpa los recortes de madera procedentes de los aserraderos . se usa madera de abeto , pino , etc, casi exenta de savia y gomas; tratándose químicamente el producto resultante para que quede insensible a la humedad , sea inodoro e higiénico y poco combustible. No es atacado por roedores.
Luego la fibra se lamina formando grandes hojas rígidas y se seca en hornos apropiados hasta contener un grado de humedad que la experiencia ha demostrado ser el más apropiado.
Se prestan para ser usado para base de revoques , se trabajan como la madera pueden clavarse y cortarse.
Las dimensiones comúnmente oscilan en el largo desde 2,15 m hasta 4,30 m con medidas intermedias, los espesores oscilan entre 11 y 12 mm y el ancho de 0,92 y 1,22 mm.
Originariamente eran de procedencia extranjera, pero actualmente se fabrican diversos tipos en el país.
Tableros de madera aglomerada.
Quizá sea más correcta la designación de Tableros de partículas aglomeradas con resina, por ser ésta más descriptiva, difieren éstos de los demás en su constitución por cuanto se utilizan partículas de madera u otra materia lignocelulósica, ligadas entre sí por medio de una resina sintética aglutinante.
Pueden definirse de la siguiente manera: son los que se fabrican con partículas de madera u otro material lignocelulósico, aglomerados con resinas sintéticas, formando láminas en las que el fraguado se efectúa bajo presión y calor. La plancha acabada presenta un aspecto uniforme.
Se usan partículas muy variadas, desde astillas sumamente finas, semejantes a fibras o manojos de fibras; virutas producidas por máquinas cepilladoras; hasta partículas semejantes a hojuelas, cortadas por máquinas especiales que forman como una estera de espesor uniforme, que son de mejor calidad con el menor daño posible para las fibras.
Hay dos maneras de fabricación: una, la formación de la estera se efectúa en formadoras continuas o discontinuas. Luego es prensada con prensas calientes de platos múltiples en el sentido perpendicular al plano de la lámina. La segunda manera de fabricar, consiste en prensar la plancha forzándola para hacerla pasar por un molde caliente constituido por dos platos con topes laterales, y la presión se aplica en sentido paralelo al plano de la lámina y en la dirección en que se saca el tablero por extrusión.
Aquellos se llaman: tableros de madera aglomerada, prensados en platos planos; y los últimos, tableros de madera aglomerada fabricados por extrusión por presión.
Los tableros pueden ser sólidos y homogéneos, o contener en el interior espacios vacíos. Las resinas utilizadas pueden ser urea-formaldehído, fenol-formaldehído y melamina-formaldehído, siendo las más usadas las primeras por ser más económicas.
11) APLICACIONES DE LAS MADERAS.
La madera se emplea en construcción en carpintería de taller, de armar, encofrados para hormigón armado, postes, durmientes de ferrocarril, etc. Con ella se fabrica el papel, algodón, pólvora, seda artificial, extractos, etc. En la actualidad hay nuevas elaboraciones, como las maderas terciadas, maderas en forma plástica, maderas aislantes al calor, al frío y del ruido, resistentes al fuego, en forma laminada, comprimida y hasta en planchas muy delgadas y flexibles, aptas para emplear como revestimiento similar al papel, y, por último, las planchas de maderas aglomeradas, de múltiples aplicaciones.
Aplicaciones de las maderas blandas del país.
Aliso: Armazones de monturas, tacos para calzado, cepillos para ropa, madera terciada, etc.
Cedro colorado: Muebles, carpintería, puertas, ventanas, estanterías, molduras, revestimientos interiores de carrocería, etc.
Cedro salteño: Muebles, carpintería, marcos para puertas y ventanas, zócalos, revestimientos de carrocerías, persianas, mostradores, estanterías, etc.
Colihué: Carpintería fina y ordinaria, muebles, sillas, durmientes, etc.
Pino Paraná: Muebles ordinarios, marcos para cuadros, cajones, zócalos, estanterías, útiles de cocina, tirantería de galpones, tinglados, carretillas, bebederos, bateas, etc.
Aplicaciones de las maderas semiduras del país.
Nogal de Tucumán: Muebles, parquets, maderas terciadas, enchapados, molduras, revestimientos de interiores.
Palo blanco: Fabricación de muebles, marcos para cuadros, botones, perillas de luz eléctrica, cabos de paraguas, argollas, postes, cortinas de enrollar, etc.
Raulí: Construcciones rurales a la intemperie, marcos de puertas, postes, muebles en general.
Roble de Neuquén: Madera imputrescible, muy usada para construcciones hidráulicas, pilares de puentes, durmientes y postes, puertas, ventanas, molduras, carrocerías y muebles en general.
Tipa: Tacos para calzados, interiores de carrocería, asientos para coches de ferrocarril, carretillas, sillas, etc.
Aplicaciones de las maderas duras del país.
Algarrobo: Marcos de puertas y ventanas, bancos de carpinteros y escolares, parquets, moldes, poleas, tarugos para pavimentos, hormas de zapatos.
Caldén: Tarugos para pavimentos, marcos de puertas y ventanas, postes, construcciones rurales, pisos parquets, etc.
Guayaibí: Muebles, pisos parquets, poleas, marcos, piezas de piano, sillas, construcciones ruales, etc.
Incienso: Marcos de puertas y ventanas, construcciones rurales, postes, durmientes, etc.
Lapacho: Carpintería en general, carrocerías, puertas, ventanas, varillas de alambrado, tranqueras, ruedas, postes, construcciones rurales, palotes de amasar, etc.
Quebracho blanco: Trabajos de tornería, hormas para zapatos, tacos, vagones de carga, parquets, tirantes, varillas de alambrado, postes, etc.
Quebracho colorado: Tablones, durmientes, vigas, postes, bochas, palotes de amasar, pilotes, malecones.
Urunday: Construcciones de puentes, muebles, malecones, tiranterías, postes de alambrados y telegráficos, herramientas para carpintería, durmientes, etc.
Viraró: Muebles, carrocerías en general, heladeras, marcos para cuadros, varas de carro, construcciones rurales, interiores de coches de ferrocarril, etc.
1
Descargar
Enviado por: | La_loka |
Idioma: | castellano |
País: | Argentina |