Literatura


La rebelión de las ratas; Fernando Soto Aparicio


LA REBELIÓN DE LAS RATAS

  • Biografía

  • FERNANDO SOTO APARICIO (1933- ), reúne los datos de escritor, poeta, cuentista, ensayista y libretista de televisión. Nacido en Santa Rosa (Boyacá), Colombia, en 1933. Estudió algunos años de bachillerato y desde los 16 años comenzó a escribir profesionalmente. Además de su quehacer literario, se ha desempeñado como periodista, escribiendo especialmente artículos de opinión en los principales diarios del país. Su labor como libretista de televisión también le ha merecido varios reconocimientos.

    Las obras de Soto Aparicio son extensas y abarcan diversos géneros, como fuente la poesía y la novela. Su temática ha guardado cierta uniformidad alrededor de los conflictos, la injusticia social y la violencia en el país, y se ha enmarcado dentro del realismo que denuncia tales desigualdades con un sentido crítico implícito.

    Su primer novela fue publicada en 1960, luego vendría la rebelión de las ratas (1962), con la que se consagró como escritor y el cual, un año después, tuvo una aceptación total.

    Luego de esta novela, Soto Aparicio escribió otras obras como Mientras Llueve (1966), Los Bienaventurados, El Espejo Sombrío, Viajes Al Pasado (1970), Empezará La Madrugada, Viva El Ejército, La Siembra De Camilo, Mundo Roto (1973), Puerto Silencio (1974), Camino que Anda (1980), Los Funerales de América y Hermano Hombre (Trilogía de la historia americana).

  • Marco histórico

  • El desarrollo de la novela se da durante la década de los sesentas, en donde las condiciones laborales eran muy desfavorables para los campesinos, debido a la instalación de acerías en los territorios de Boyacá.

  • Marco Geográfico

  • La rebelión de las ratas se da en el poblado de Timbalí ubicado en Boyacá.

  • Aspecto literario

  • Es una novela testimonio, en donde se resalta la amargura, el dolor, la tristeza, el drama y la tragedia de los campesinos y los trabajadores del pueblo de Timbalí, a causa de los jefes Extranjeros de las empresas que se habían instalado allí. Esa persona, Rudecindo es un ejemplar de todos los pobladores de una tierra sin medianías fluctuando entre la extrema riqueza y la extrema miseria. Esta novela de Fernando Soto Aparicio es socialmente revolucionaria, llena de fuerza, de dureza argumental, y de profundidad ideológica, para lo cual el autor utiliza una prosa apropiada a las situaciones que va presentando al lector.

  • Personajes principales y secundarios

  • Rudecindo Cristancho: Era el campesino que llegó a Timbalí, quien era una persona resignada, que soportaba todo.

    Pastora: Es la esposa de Rudecindo.

    Mariena: Es la hija de Rudecindo y Pastora.

    Pacho: Es el hijo de Rudecindo y Pastora. Tenía un carácter vivo y emprendedor, a diferencia de su padre.

    Cándida: Es la mujer que encontraron en la región pobre de Timbalí, quien brindó su amistad a Pastora, Rudecindo y sus hijos.

    Neco: Es el hijo de Cándida y del Diablo.

    Capataz: Es la persona que cuidaba el trabajo de los mineros en La Pintada.

    El Diablo: Es un personaje que se caracterizaba por ser una persona mala, muy conocida en el pueblo que se aprovechaba de los demás.

    Paco Espinel: Es un compañero que Rudecindo conoció cuando fue a trabajar por primera vez a la mina La Pintada.

    Grimaldos: Es uno de los mineros de La Pintada.

    Ricardo García: Es el alcalde del poblado de Timbalí

  • Argumento

  • La rebelión de las ratas cuenta la historia de un campesino, Rudecindo Cristancho que llegó al pueblo de Timbalí buscando riqueza y felicidad, pero al llegar al pueblo y al ver que nadie le daba un sitio donde dormir, no tuvo más remedio que irse a vivir a un basurero, en donde conoció a Cándida. Después de su llegada al pueblo de Timbalí, salió a buscar trabajo, luego se encontró con la Carbonera del Oriente, en donde solicitó trabajo. Lo asignaron a la mina La Pintada, en donde conoció a Grimaldos, a Espinel y al Capataz, quien los trataba muy mal en el trabajo. Una noche, el Diablo se acercó al sitio donde estaba viviendo Cándida, el Diablo prendió fuego a la casa y se alejó, Cándida se fue corriendo rápidamente a donde estaba Neco, que se encontraba dentro de la casa incendiada.. Rudecindo al ver la miseria en la que se encontraba, en conjunto de sus compañeros de trabajo, decidieron hacer un sindicato, en donde pensaban que de lograr formar uno, ganarían mejores condiciones de trabajo. Después de no poder formar el sindicato, de hacer paro, y de empeorar las condiciones de trabajo de los mineros, al ir a un bar, y de comentar lo que estaba pasando, comenzó la rebelión, en donde un gran número de trabajadores salieron hacia las calles de los extranjeros y destruyeron todo lo que había a su paso y asesinaban a los ricos, después una bala perdida hirió a Rudecindo que después terminó con el.

  • Conclusiones

      • La rebelión de las ratas, es un libro que refleja las duras condiciones que tenían los trabajadores de bajo nivel, y las injusticias que se cometían en contra de los pobres en ese tiempo.

      • Rudecindo Cristancho, es una persona que sufre por su familia y por las condiciones laborales que tenía, en donde podía definir las características que tenía el pueblo de Timbalí en ese tiempo y los problemas que lo comprometían a duras situaciones.

      • Las condiciones de vida de ese tiempo tienen un parecido a las condiciones de vida que tienen actualmente los colombianos.

      • Fernando Soto Aparicio escribe sus novelas en torno a conflictos, injusticia social y la violencia que en el país se observa muy a menudo.

    Fragmento de la obra “la rebelión de las ratas”

    Por los campos ya secos y abandonados, se tendieron los caminos metálicos. Los hombres, inclinados sobre la tierra, clavaban largas púas de acero para sostener las líneas por las que, meses después, corrían veloces locomotoras lanzando al aire eructos negros, y arrastrando tras de sí largas filas de carros que transportaban carbón hacia la capital. Todas las escalas sociales vinieron a formar el pueblo de Timbalí. Desde los extranjeros que pisaban la tierra aquella -buena y acogedora- como dominándola, como amenazándola, hasta el pordiosero, hasta la prostituta.

    Entre los hombres atraídos por el vértigo llegó una mañana de tibio verano Rudecindo Cristancho. Era alto, delgado, de apariencia débil; la espalda inclinada siempre; los ojos bajos; la boca cerrada herméticamente; con las palabras justa para medio hacerse entender; las manos grandes, nervuda, descarnadas; largas y magras las piernas. Esto en lo físico. Y en lo intelectual, resignado hasta el sacrificio; pero no por heroísmo, sino por la ignorancia. No supo quienes eran sus padres, ni le interesó averiguarlo. Sus recuerdos arrancaban de una época muy remota: trabajaba en una finca como mandadero, y soportaba los latigazos del dueño cada vez que no cumplía cabalmente con sus deberes. Quizá desde entonces, le nació esa resignación fatal, completa, terrible, ya que su alma había sido cruelmente deformada por la vida misma.




    Descargar
    Enviado por:El remitente no desea revelar su nombre
    Idioma: castellano
    País: Colombia

    Te va a interesar