Psicología


La conducta humana


UNIDAD3: LA PSICOLOGIA CENTRADA EN EL ESTUDIO DE LA CONDUCTA HUMANA:“PSICOLOGIA DE LA CONDUCTA”.

* Ruptura con la psicología subjetiva a intrasujetiva. El manifiesto conductista.:

Hacia fines del siglo XIX la realidad se veía como elementalista y asociacionista (elemento básicos asociados entre sí según ciertas leyes). La psicología estudia entonces las funciones (sensaciones, percepción, memoria, pensamiento, voluntad, etc.) en la suposición de haber hallado los elemento últimos. Luego entendimos que el comportamiento es una unidad en sí, y que es único e irrepetible para cada persona. También de esos comportamientos singulares podemos, por medio de un proceso de abstracción y de generalización, encontrar formas constantes repetibles en determinados grupos de personas. Sólo por un artificio intelectual podemos recortar de esas constantes del comportamiento los aspectos que hacen al reconocimiento del mundo y de sí mismo (percepción); o recortar los aspectos que hacen a la resolución de problemas (inteligencia); o al recuerdo de hechos sucesivos (memoria). Esta idea de que primero es el sistema y luego el ejercicio artificial de desglosar los elementos del sistema es posterior y no nace como podría suponerse de las ciencias sociales, sino precisamente del desarrollo de las ciencias naturales. El saber científico no es saber definitivamente verdadero, sino saber provisionalmente verdadero: lo que es verdadero para la comunidad científica en determinado momento de su desarrollo.

En Estados Unidos se va construyendo un modo de entender la psicología como una ciencia natural. Una ciencia basada en la observación objetiva de los hechos. Si bien no hay observación objetiva de ningún hecho, puesto que la participación de la subjetividad del observador se halla siempre presente, en aquel entonces una psicología basada en el observación de unidades de conducta presuntamente medibles, verificables por un observador externo y capaces de ser repetidas experimentalmente, parecía ser el modelo de lo que debía ser una ciencia psicológica. Así nace el conductismo, escuela fundada por el psicólogo estadounidense John Watson . Es un manifiesto conductista porque el conductismo watsoniano se postula como posición esencialmente científica y objetiva. La psicología ha de ser científica, y para ser científica ha de ajustarse a los criterios y métodos de las ciencias biológicas y en última instancia de las físico-químicas. La conducta debe ser su objeto y su método la observación de dichas conductas.

Hoy en día las terapias para contrarrestar hábitos y reaprender comportamientos (sean alimenticios, de ingesta de alcohol, compulsión al uso de drogas, modificación de conductas sexuales) suelen basarse con frecuencia en métodos que derivan del conductismo.

Del punto de vista de su desarrollo teórico reseñamos tres momentos: a)-el conductismo clásico, metodológico primero y radical después, b)-el neoconductismo, c)-el conductismo de tercera generación.

* La conducta como unidad de análisis y el método objetivo: observación, medición, reproductividad y predictibilidad.:

Esbozo de las corrientes objetivas en psicología:

Hay tres autores que necesariamente se incluyen en lo que se llaman corrientes objetivas (objetivistas). Ellos son Pavlov, Bechterev y Watson.

De Pavlov fue un filósofo ruso que investigó el arco reflejo y las formas de condicionamiento. Uno de sus mayores descubrimientos es el de un instrumento: la fístula estomacal o salival. Es un instrumento de registro para observar y medir el comportamiento adaptativo de segregar saliva frente a la ingestión de alimentos. Descubrió las secreciones psíquicas (un estímulo originario se había asociado a un estímulo posterior). ¿Cómo es que se discrimina entre estímulos? A un animal no podemos preguntarle cuándo percibe dos estímulos más o menos parecidos de un modo diferenciado, y a un hombre sí. Como había que descartar la introspección se sirvió de la psicología animal. Se condicionó a un animal para que segregara saliva frente a una nota, un sonido de determinadas vibraciones por segundo, y que no segregara saliva frente a otro sonido de vibraciones deferentes. ¿Qué pasa cuando las notas, los sonidos, se acercaban entre sí? La cantidad de saliva segregada al alejarse de la nota que producía la salivación iba descendiendo. El espacio entre ambos sonidos corresponde a lo que se llama el umbral de discriminación. Pavlov distinguía claramente entre “neurofisiología”, que era su tema de interés en la investigación, y “psicología”.

Quien sí creó una psicología fue Bechterev. Trabajó sobre el pensamiento y el aprendizaje. Sostuvo que así como era posible pensar en una reflexología de los procesos individuales era dable pensar en una psicología colectiva. Su sistema se puede definir como un sistema monista, puesto que postula una sola realidad, en la que los sistemas más complejos se entienden basados en fenómenos simples, que son reflejos condicionados.

Watson afirmó que la mente no sólo no es tema de psicología (la ciencia no puede ocuparse de ella), sino que además no existe.

Si bien Watson no es un reflexólogo, ni Pavlov es un psicólogo, ni Bechterev es un conductista, hay una conexión teórica entre ellos, que permite incluirlos en una corriente objetiva.

* Las formulaciones de la escuela conductista:

Watson en uno de sus libros dice: “ La conciencia es un mero supuesto, con tan pocas probabilidades de ser probado como el de alma, y un supuesto que no puede ser probado es un supuesto no científico. Ninguna ciencia puede construirse sobre la base de ideas si ésta no pueden ser verificadas”. El alma, la conciencia o la mente, son para él conceptos intangibles, que además necesariamente suponen por definición la introspección como método. De ahí la petición de limitar el análisis de las conductas sólo a aquello que se puede observar externamente.

El modelo E-R (estímulo-respuesta). Conexionismo:

Watson entiende por conducta lo que un organismo hace en forma de comportamiento externo, visible. Sus problemas como científico son tres: 1)-dada una respuesta, una conducta, ver cuál fue el estímulo que la provocó; 2)-dado un estímulo, ver qué respuesta acontecerá, y 3)-cuando esa respuesta no ha sido heredada, ver cómo esa respuesta ha sido aprendida. El aprendizaje de las conductas no heredadas es tributo de la reflexología (arco reflejo y respuesta incondicionada). Cuando la respuesta no ha sido aprendida, al estímulo lo denomina estímulo incondicionado, de respuesta incondicionada.

Es decir, que un estímulo incondicionado es aquel que puede provocar una respuesta sin un aprendizaje previo. En tanto que un estímulo condicionado es aquel capaz de suscitar una respuesta cuando ha habido previamente una aprendizaje del sujeto. Por ej.: el comer podría tomarse como una respuesta incondicionada en un bebé; pero si a una persona le gusta un determinado género musical su conducta se manifiesta en sentir placer cuando oye aquello que le gusta: un aprendizaje basado en cadenas de condicionamientos que se supone se remontarían a respuestas incondicionadas. Watson define a la psicología cono una rama objetiva y experimental de la ciencia natural, cuyo objeto es la conducta humana. La psicología así concebida no tendría ningún problema en definirse como ciencia, porque simplemente en una rama de las ciencias naturales. Sus postulados fundamentales derivan de los tres propósitos ya mencionados:

1)- Toda conducta se compone de respuestas objetivamente analizables y que una conducta humana compleja puede analizarse en unidades de respuestas simples (estímulo-respuesta) incondicionados y condicionados.

2)- La conducta siempre se compone de movimientos musculares y secreciones glandulares (la conducta puede ser entendida como procesos físico-químicos).

3)- A todo estímulo sigue una respuesta y toda respuesta es respuesta a un estímulo.

4)- Los procesos de conciencia no pueden ser estudiados científicamente

Watson también dice que cuando pensamos lo que estamos haciendo en realidad es “hablar pero de un modo inaudible, subvocal”. Con esto quiere decir que las ideas tienen energía.

El problema de las emociones:

Watson sostiene que en el momento de nacer existen tres emociones básicas que son respuestas incondicionadas: el amor, el miedo y la ira.

El amor es suscitado en el bebé por las caricias, y se manifiesta en la piel porque se vuelve rosada, el bebé se tranquiliza y se relaja. El miedo es suscitado por la pérdida brusca de la base de sustentación, que produce contracciones corporales, gritos y la ira es suscitada por la sujeción del bebé, imposibilitándole moverse, lo que le produce alteración de procesos viscerales y contracturas. Todas las emociones o los sentimientos posteriores son entendido como condicionamientos a partir de estas situaciones básicas. Para curar una fobia (producida por la asociación que el niño haga con una cosa y una situación donde se suscitó la respuesta incondicionada de miedo) habría que desacondicionar a esa cosa como estímulo de miedo y condicionarlo respecto de conductas de afecto o amor, exponiéndolo cada vez más cera de él y reforzando las respuestas positivas. El supuesto es que el objeto fobígeno (generador de miedo) iría perdiendo su asociación con un estímulo incondicionado de miedo y se asociaría a un estímulo condicionado de placer.

* Teoría del aprendizaje. Ley de refuerzo y ley del ejercicio:

A la pregunta de por qué se aprende, o sea por qué se tiende a repetir un hecho ya experimentado, estas teorías plantean dos posibilidades: 1). se aprende por repetición sistemática de un comportamiento (ley del ejercicio) y 2). se aprende por satisfacción derivada de la gratificación posterior a la ejecución de un comportamiento (ley del refuerzo). La conducta seguida, no de un premio sino de un castigo, también tiende a ser aprendida.

* El Neoconductismo:

* Conductismo molar o intencional: Uno de los continuadores más importantes de Watson fue Tolman, cabeza de un movimiento que se conoce como conductismo molar o intencional.

Tolman partió de la idea crítica de que Watson hizo un análisis molecular de las conductas, centrándose en las relaciones entre E-R. La diferenciación entre conductas moleculares o molares ya estaba planteada: Tolman agrega que los actos de conducta tienen propiedades emergentes de las reacciones que están presentes en esos actos, y que lo que la psicología debía estudiar es precisamente esas cualidades emergentes. Tolman plantea que el objeto de la psicología son los actos, las conductas como un todo. Las cualidades de esos actos son tres: 1)- los actos siempre tienden a y provienen de. 2)- el tender a o provenir de siempre nos muestran cierto patrón específico de interacción del sujeto, tanto como objetos fines o como objetos medios . (los objetos medios son instrumentos intermedios para alcanzar esos objetos fines). 3)- El sujeto tiene la posibilidad de seleccionar ciertos comportamientos antes que otros, lo que significa que el determinismo no es absoluto.

* El papel del significado y de la intención en la valoración de los estímulos y de las respuestas:

Tolman se pregunta cómo se explica que todo acto tienda a y provenga de; cómo se explica el empleo de objetos medios para alcanzar objetos fines; cómo se explica la selección de los objetos medios posibles. Es evidente que tender a nos muestra cierta intención por parte del organismo, por lo cual a este conductismo se lo llamó intencional. Pero no hay intención sin cognición (nivel de conocimiento). Estos dos se convertirán en los dos conceptos explicativos de los actos. Los determinantes de las conductas no son por lo tanto los estímulos, sino las cogniciones y las intenciones a las que llama determinantes inmanentes de la conducta, que son interiores del organismo.

Hay intención cuando una respuesta muestra docilidad (tendencia a producirse) con relación a algún fin, o siempre que una respuesta esté lista para transformarse o el organismo esté dispuesto para elegir, gradual o súbitamente, ciertas conductas antes que otras. Esta docilidad del comportamiento es lo que operacionalmente da cuenta de una intencionalidad. Un acto no sólo se caracteriza por su carácter intencional sino por sus componentes cognitivos por suponer que los organismos “conocen” los objetos-fines hacia los cuales se dirigen. Los determinantes inmanenetes pueden ser causados por estímulos del medio como por estímulos del propio organismo. A los estímulos internos o externos los llama causas iniciadoras.

Externos Determinantes Respuestas

Estímulos inmanentes

Internos

(intención y Actos

Causas iniciadoras cognición)

Tolman sostiene que: 1)- es posible un conductismo no fisiologista, y 2)- el conductismo puede retomar con una nueva metodología los problemas de la psicología anterior.

Sus conceptos fundamentales son tres: 1)- agente estimulante: son las causas independientes, iniciadoras de los fenómenos de conducta total. 2)- indicio para la conducta: los estímulos se convierten en indicios. Ej.: un estímulo puede ser el ruido de una puerta al abrirse, que se convierte en indicio cuando ese ruido indica que alguien la abrió. Los estímulos existen en el medio y los indicios suponen cierta discriminación por parte del sujeto. 3)- acto de conducta: dado los agentes estimulantes determinar cuáles son los indicios de la conducta; dados los indicios de la conducta determinar cuál es el objeto de la conducta y dado el objeto de la conducta ver cuál es el acto de conducta del organismo.

*Conductismo de tercera generación: ALBERT BANDURA.

Teoría del Aprendizaje Social:

Aprendizaje por medio de modelos: Los humanos aprenden la mayor parte de su conducta a través de la observación, por medio del modelado: al observar a los demás nos hacemos idea de cómo se efectúan las conductas nuevas y posteriormente, esta información codificada nos sirve como guía de la acción. Evitamos errores innecesarios, aprendiendo.

Procesos de aprendizaje por observación: Según la teoría del aprendizaje social, las influencias de los modelos producen el aprendizaje sobre todo por su función informativa. Cuando se exponen a un modelo, las personas que lo observan adquieren representaciones simbólicas de las actividades efectuadas por el modelo. Esas representaciones les sirven de guía para efectuar las acciones apropiadas. Según esta conceptualización, el aprendizaje por observación está dirigido por cuatro procesos que lo componen:

*Procesos de atención: Las personas no pueden aprender por observación si no atienden a los rasgos significativos de la conducta que les sirve de modelo o si no la perciben adecuadamente. Los procesos de atención determinan cuáles se seleccionan de entre los muchos modelos posibles y qué aspectos se extraen de sus ejemplos. El valor funcional de las conductas efectuadas por los diversos modelos determina a qué modelos atienden las personas y a cuáles no hacen caso. La atención que prestamos a un modelo está delimitada por su atracción interpersonal. La naturaleza de las conductas que sirven para modelo también determina, en parte, la tasa y nivel del aprendizaje por observación. Los observadores se benefician más o menos de las experiencias observadas según su capacidad para procesar la información.

*Procesos de retención: Si las personas no recordasen la conducta que les sirve de modelo, ésta no podría influirlas. El segundo proceso fundamental que interviene en el aprendizaje por observación consiste en la retención de las actividades que han servido de modelos en un determinado momento. Cuando estos ya no están presentes para guiarles, las pautas de respuesta tienen que representarse en la memoria de forma simbólica. El aprendizaje por observación se basa en dos sistemas de representación: la representación mediante imágenes y la verbal. Algunas conductas se retienen en forma de imágenes. La estimulación sensorial produce sensaciones que dan lugar a percepciones de los fenómenos externos. Cuando los estímulos que sirven de modelo se exponen repetidamente, producen imágenes duraderas y recuperables de las actuaciones efectuadas por los modelos. El segundo sistema de representación implica la codificación verbal de los fenómenos que sirven de modelo. La mayoría de los procesos cognoscitivos que regulan el comportamiento son primordialmente verbales, más que visuales. Los observadores que codifican las actividades del modelo en palabras, designaciones concisas o imágenes vívidas, aprenden y retienen mejor la conducta que los que se limitan a observar o se ocupan mentalmente de otros asuntos mientas contemplan la actividad. Además de la codificación simbólica, la repetición constituye una ayuda importante para la memoria. Cuando las personas se repiten mentalmente o efectúan las pautas de respuesta que les sirven de modelo, tienden a olvidarlas menos que si no piensan en ellas ni practican lo que han visto. En los primero años, las acciones de los modelos evocan, de forma directa e inmediata, las respuestas de imitación de los niños. En la imitación diferida, tienen que representarse interiormente sucesos que no se tienen presentes.

*Procesos de reproducción motora: El tercer componente del modelado consiste en la conversión de las representaciones simbólicas en las acciones apropiadas. La reproducción comportamental se logra cuando se organizan espacialmente y temporalmente las propias repuestas, de acuerdo con las pautas que sirven de modelo. Primero se organizan cognosicitivamente las respuestas, luego se inician, se comprueban y perfeccionan sirviéndose de una retroalimentación de carácter informativo. Hay otros factores que impiden efectuar las cosas que se aprenden por observación. Las discrepancias entre la representación simbólica y la ejecución sirven de pista para corregir la acción. Cuando se aprenden destrezas complejas suele plantearse el problema de que los que las efectúan no pueden observar directamente sus respuestas, por lo que tienen que servirse de vagas señales quinestésicas o informaciones verbales de personas que les ven desde fuera.

*Procesos motivacionales: En la teoría del aprendizaje social distinguimos entre la adquisición de una conducta y su ejecución, porque las personas no hacen todo lo que aprenden. Su propensión a adoptar las conductas que aprenden por imitación dependerá de las consecuencias de éstas: será mayor cuando las consecuencias son valiosas y menor cuando tienen efectos punitivos o poco gratificantes. Podemos producir respuestas imitativas sin tener en cuenta los procesos subyacentes: basta con que un modelo muestre una y otra vez las respuestas deseadas, instruya a los demás para que reproduzcan sus conductas, los ayude físicamente cuando fallan y luego los recompense cuando acierta, para que consiga, finalmente, que la mayoría de las personas efectúen respuestas similares a las suyas. Por lo tanto, si en una determinada situación un observador no llega a simular la conducta del modelo, ello puede deberse a uno de estos factores: que no ha observado las actividades pertinentes, que ha codificado inadecuadamente los eventos que le servían de modelo al representarlos en la memoria, que no ha retenido lo que aprendió, o que es físicamente incapaz de hacerlo o que no se siente suficientemente incitado a ello.

* El enfoque estructuralista genético de Jean Piaget:

Piaget era un biólogo suizo, considerado como el creador de una de las más importantes escuelas psicológicas de nuestro tiempo, la escuela de Psicología genética. La de Piaget es una teoría general del desarrollo de los procesos cognitivos sostenida en un marco epistemológico definido como un estructuralismo genético. Piaget acepta de la Gestalt la definición de estructura pero observa que las leyes que enuncian los gestaltistas para dar cuenta de la organización del campo conceptual y cognoscitivo, son leyes invariables y se consideran independientes del desarrollo evolutivo.

El sujeto es el actor, y a menudo el autor de dichas estructuraciones, que adapta a medida que se desarrollan, por medio de una equilibración activa.

De estas críticas surgen dos ideas básicas: a)- las estructuras psicológicas no son inmutables, ni dadas de una vez y para siempre, sino que se van construyendo a lo largo de la evolución; b)- el sujeto es activo y construye sus propias estructuras.

Las estructuras no surgen de la nada ni se configuran al azar, sino que son el resultado de una génesis.

La génesis es una cierta forma de transformación que parte de un estado A y desemboca en un estado B, siendo el estado B más estable que el A. En psicología no conocemos un comienzo absoluto y la génesis se produce siempre a partir de un estado inicial que comporta a su vez, una estructura. La génesis es un sistema relativamente determinado de transformaciones que comportan una historia y conducen de modo continuo de un estado A a un estado B, siendo el estado B más estable que es estado inicial. Esto implica concebir a las estructuras psicológicas como organizaciones dinámicas, abiertas a transformaciones sucesivas. (objeto de Piaget).

El método de Piaget tiene dos enfoques: el enfoque experimental y el enfoque clínico. Podríamos decir que el primero tiene como objetivo “generalizar”, mientras que el segundo se propone “individualizar”. El método experimental reproduce una y otra vez el fenómeno que desea observar, con el objeto de establecer regularidades que permitan la formulación de leyes generales; el método clínico, en cambio, se centra en el estudio profundo y detallado de los casos individuales en situaciones irrepetibles. Este método suele llamarse “clínico-experimental” ya que posee dos momentos. El primero Piaget enfrenta a niños de distintas edades con problemas o situaciones críticas diseñados por él y observa como los resuelve. En el segundo momento realiza una tarea más personalizada, consistente en profundizar la exploración de los datos obtenidos en el momento anterior, mediante el diálogo con el niño. A su vez las observaciones clínicas se realizan en dos dimensiones: a). longitudinal, siguiendo la evolución de un determinado aspecto de la conducta en un mismo niño en diferentes edades (Piaget lo realizó con sus propios hijos) y b). transversal, tomando un número considerable de niños de la misma edad y presentándole el mismo problema. A partir de este enfoque metodológico, Piaget va a tratar de explicar cómo las estructuras mentales de un niño recién nacido se van trasformando hasta llegar a las formas de pensamiento adolescente.

* El concepto de inteligencia como proceso de adaptación. Conceptos de asimilación, acomodación y equilibrio:

Toda conducta se presenta como una adaptación o como una readaptación. El individuo no actúa sino cuando el equilibrio se halla momentáneamente roto entre el medio y el organismo: la acción tiende a restablecer ese equilibrio, a readaptar el organismo.

Una conducta constituye un caso particular de intercambio entre el mundo exterior y el sujeto; pero contrariamente a los intercambios fisiológicos, que son de orden material y suponen una transformación interna de los cuerpos que se enfrentan, las “conductas” son de orden funcional y operan a distancia cada vez mayor en el espacio y en el tiempo. Si existen distintos niveles de intercambio entre el sujeto y su medio, la inteligencia va a ser conceptualizada como la forma superior de esos intercambios. Piaget parte de la base de considerar la inteligencia como un proceso de adaptación que se verifica permanentemente entre el individuo y su ámbito socio-cultural. Este proceso dialéctico implica dos momentos inseparables y simultáneos: 1)- la transformación del medio por acción del sujeto; permanentemente el individuo intenta modificar el medio para asimilarlo a sus propias necesidades. Es lo que Piaget denomina asimilación.

2)- la continua transformación del sujeto, a partir de las exigencias del medio. Cada nuevo estímulo proveniente del medio o del propio organismo implica una modificación de los esquemas mentales preexistentes, a los fines de acomodarse a la nueva situación. Es lo que Piaget denomina acomodación.

Si se tiene en cuenta esta interacción de los factores internos y externos entonces toda conducta es una asimilación de lo dado a los esquemas anteriores y toda conducta es, al mismo tiempo, una acomodación de estos esquemas a la actual situación. De ello que resulta la teoría del desarrollo apela necesariamente a la noción de equilibrio, puesto que toda conducta tiende a asegurar un equilibrio entre los factores internos y externos o de forma más general, entre la asimilación y la acomodación.

Asimilación y acomodación son dos procesos permanentes que se dan a lo largo de toda la vida, pero las estructuras mentales no son invariantes, puesto que cambian a lo largo del desarrollo. Pero aunque cambien, permanecen como estructuras organizadas.

Las estructuras mentales de cada período tienen una forma característica de equilibrio, pero lo que subraya Piaget es que las formas de equilibrio tienden a ser cada vez más estables que las anteriores. Esto significa una evolución de los intercambios entre el individuo y el medio, que va desde una mayor rigidez hasta una completa movilidad. Si pensamos cuáles son las posibilidades de respuesta al medio de un bebé recién nacido, veremos que son absolutamente rígidas, ya que sólo cuenta con algunos reflejos, entonces va a asimilar cualquier objeto del medio a ese único esquema de acción de que dispone: succionar. En cambio, si pensamos en una persona que ha completado el desarrollo de sus estructuras intelectuales, veremos que dispone de una multiplicidad de operaciones mentales para resolver las situaciones que el medio le plantea, incluso puede responder a situaciones imaginarias o inexistentes. El equilibrio es, por lo tanto, móvil y estable.

El desarrollo psíquico que se inicia con el nacimiento y finaliza con la edad adulta es comparable al crecimiento orgánico.

Toda explicación psicológica termina tarde o temprano por apoyarse en la biología o en la lógica.

Piaget describe algunas características que definen la noción de estadio:

1)- Para que podamos hablar de estadio, es necesario que el orden de sucesión sea constante. Lo que no varía es el orden en que se van produciendo las adquisiciones. Lo constante es el orden en que ocurre.

2)- Los estadios tienen un carácter integrativo.

3)- Cada estadio se caracteriza por ser una estructura de conjunto. Conociendo las leyes que rigen esa estructura podemos dar cuenta de todas las conductas propias de ese estadio.

4)- Un estadio supone un nivel de preparación y un nivel de culminación.

5)- En cada estadio es posible reconocer procesos de formación de génesis y formas de equilibrio final. Estas últimas son las se van a mantener durante el resto de la vida una vez establecidas.

Los estadios que describe Piaget se pueden agrupar en tres grandes períodos:

* El período de la inteligencia sensorio-motriz.

* El período de la inteligencia representativa o preoperatoria.

* El período de la inteligencia operatoria.

A cada uno de estos períodos lo define un eje alrededor del cual se estructuran las adquisiciones propias de ese momento evolutivo. Dichos ejes son la acción, la representación y la operación.

Las acciones constituyen la forma más elemental de funcionamiento psicológico y constituyen el origen de las formas posteriores que adoptan las estructuras intelectuales. Podría decirse que la acción está en la base de todo conocimiento posible, que es a partir de ella que se comienza a conocer el mundo y a sí mismo. Es importante destacar que en tanto la acción es una forma de conocimiento, la primera, Piaget considera posible hablar de inteligencia sonsorio-motriz. Piaget describe un momento, que ubica alrededor de los dos años, en el que la acción, de ser puramente perceptiva y motriz, pasa a reconstituirse en el plano de la imágenes internas. Para ello necesitaba la presencia efectiva de los objetos en su campo perceptual; a partir de la “interiorización” de las acciones, ya no depende de la presencia física de los objetos, ya que puede representarlos simbólicamente. Alrededor de los 8 años el niño puede constituir sistemas de conjuntos, comienza a resolver problemas que hasta ese momento le resultaban imposibles de resolver en el plano representativo. En ese momento aparecen la operaciones propiamente dichas. Define a las operaciones como “acciones interiorizadas y reversibles”; es decir que en una misma estructura de conjunto se integran una acción y su contraria, existiendo siempre la posibilidad de volver al punto de partida simplemente anulando una operación mediante la inversa. Este período de la inteligencia operatoria se subdivide a su vez en dos estadios: *el estadio de las operaciones conscientes, y * el estadio de las operaciones formales. En el primero las operaciones versan sobre objetos manipulables o concretos. Habrá que esperar hasta el comienzo de la adolescencia para que el niño pueda partir de hipótesis o premisas que no necesiten un soporte perceptivo. Este estadio final, el de las operaciones formales, es el que caracteriza el pensamiento abstracto, el pensamiento lógico en sentido estricto. A partir de este momento el sujeto es capaz de razonar de un modo hipotético-deductivo, es decir sobre simples suposiciones sin relación necesaria con la realidad.

* Vygotsky y la educación:

¿Cuáles son los asertos básicos de la teoría de Vygotsky? La actividad mental es exclusivamente humana. Es el resultado del aprendizaje social, de la interiorización de los signos sociales y de la internalización de la cultura y de las relaciones sociales. El desarrollo psicológico es un proceso sociogenético.

Las funciones mentales superiores (la estructura de la percepción, la atención voluntaria y la memoria voluntaria, los afectos superiores, el pensamiento, el lenguaje, la resolución de problemas) así como la conducta, etc. adquieren formas diferentes en culturas y relaciones sociales históricamente distintas.

Vygotsky sostenía que la psicología no debía descartar la explicación científica, determinista y causal de las funciones mentales superiores. Se rehusaba, como la Gestalt, a descomponer las formas complejas en elementos simples que no conservaban las propiedades del todo. Para explicar el espíritu era necesario ir más allá de los límites del organismo. Paradójicamente, para encontrar el alma, primero era necesario perderla.

Vygotsky se refería a su psicología como instrumental, cultural e histórica. Las cosas se llevan a cabo con medios e instrumentos. El carácter instrumental alude a la mediación de los procesos mentales superiores. Los humanos modifican activamente los estímulos con los que se enfrentan, utilizándolos como instrumentos para controlar las condiciones ambientales y regular su propia conducta. La gente con la ayuda de instrumentos y signos, dirige su atención, organiza la memorización consciente y regula su conducta. La esencia de la conducta humana reside en su carácter mediatizado por herramientas y signos. Las herramientas están orientadas hacia afuera, hacia la transformación de la realidad física y social. Los signos están orientados hacia adentro, hacia la autorregulación de la propia conducta. Ej.: el pañuelo con un nudo para recordar algo. Como humanos vivimos en un universo de signos; nuestra conducta no está determinada por los objetos mismos sino por los signos a ello adjudicados. Durante las diferentes situaciones de la vida incorporamos estímulos auxiliares que rompen la inmediatez de la fórmula lineal estímulo-respuesta. Adjudicamos significados a los objetos que nos rodean y actuamos de acuerdo a ellos. Etiquetamos todos: a una persona “buena” hay que amarla, a una “mala” hay que odiarla. Los signos reestructuran la conciencia del hombre e influyen en la conciencia de los otros.

La acepción cultural significa que la sociedad le proporciona al niño metas e instrumentos estructurados para alcanzarlas. El lenguaje es uno de los instrumentos claves creados por la humanidad para la organización de los procesos del pensamiento. El lenguaje porta conceptos que pertenecen a la experiencia y al conocimiento de la humanidad.

A comienzos de la década de 1930, la parte soviética de Asia Central estaba sufriendo aceleradas transformaciones sociales. El modo de producción feudal era reemplazado por una reestructuración socialista de la economía incluyendo un plan de alfabetización intensivo. Parecía ser el lugar y el momento adecuados para probar la noción de que los procesos mentales superiores no eran universales ni estáticos ni inmutables, sino que su estructura cambiaba según modificaciones del modo de vida social y la presencia o ausencia de sistemas mediatizadores, tales como la escritura, los modos de razonamiento, etc..

Vygotsky también llamó a su psicología genética, en el sentido de evolutiva. Al estudiar los procesos mentales, él consideró tanto su evolución social y cultural como el desarrollo ontogénetico individual. Los niños se manejan desde los comienzos con procesos mentales “inferiores” (atención involuntaria, memoria elemental y percepción) dentro de una línea de desarrollo natural. A través de la constante enteracción con los adultos, los procesos elementales se transforman radicalmente en procesos mentales superiores.

* La internalización es uno de los conceptos claves de Vygotsky, importante para la determinación social: “Cualquier función mental superior necesariamente pasa por una etapa externa de su desarrollo porque es inicialmente una función social”. El proceso de internalización no es simplemente la transferencia de una actividad externa a un plano interno preexistente de conciencia, sino el proceso a través del cual se forma dicho plano interno. En una primera etapa, las funciones mentales existen en el nivel de la interacción de niños con adultos; son interpsicológica. Cuando estos procesos se internalizan, ya existen dentro de los niños, son intrapsicológicas. El hombre es cultura internalizada. La cultura (la acumulación del legado histórico de la humanidad fuera de los límites del organismo), se interioriza como actividad mental y así pasa a estar dentro del organismo. Descubrió el desarrollo ontogénico no como un camino recto de acumulaciones cuantitativas sino como una serie de transformaciones dialécticas cualitativas. Las funciones mentales superiores se forman en estadios, cada uno de los cuales es un complejo proceso de desintegración e integración. La estructura total de la conciencia y los procesos mentales superiores varían en los diferentes estadios del desarrollo.

Vygotsky ya había considerado los procesos mentales superiores como órganos o sistemas funcionales.

Otra conclusión inevitable fue entonces que la “localización” de las funciones mentales superiores variaba durante el desarrollo ontogénico. En la ontogénesis, diferentes zonas se van haciendo cargo de la ejecución de una misma función psicológica. La escritura, por ejemplo, depende inicialmente de la memorización de la forma gráfica de cada letra. La organización de este proceso se modifica con la práctica. La escritura se transforma en una melodía cinética no dependiente de la forma visual de cada letra aislada o de impulsos motores individuales para diseñar a cada trazo. El postulado vygotskiano sostiene que durante la ontogénesis los procesos mentales superiores cambian de estructura, en su interrelación y en su organización interfuncional. Las relaciones sociales y la cultura son las fuentes de la mente, el cerebro sólo su órgano, y la actividad social específica de cada sujeto su proceso originador.

* Vygotsky y la educación:

Vygotsky fue maestro antes de convertirse en psicólogo. Un concepto esencial de su teoría es que las funciones mentales superiores se forman durante el proceso de enculturación de los niños. Devenimos humanos a través del proceso de la internalización de la cultura. La educación formal era un instrumento esencial de la enculturación, lo cual no implica desconsiderar a la educación informal. Reconoció a los niños como agentes activos del proceso educativo. También se concibe a los niños como los objetos y receptores de la instrucción. La pedagogía crea procesos de aprendizaje que guían el desarrollo y esta secuencia da como resultado zonas de desarrollo próximo. Consideraba que el juego era la principal actividad para la interiorización y la apropiación del ambiente durante los primeros años.




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Enviado por:Analia Rodontaro
Idioma: castellano
País: España

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