Educación y Pedagogía


Filosofía en el Aula


La Filosofía en el Aula

TERCERA PARTE. FINES Y MÉTODOS DE FILOSOFÍA PARA NIÑOS

Capítulo 7:

Algunas presuposiciones Educativas de Filosofía para Niños

Al comienzo del capítulo, el autor hace una introducción para situarnos en las relaciones anteriores de la filosofía con la escuela: la filosofía no estaba presente en las aulas hasta que no se llegaba a la secundaria, era prácticamente imposible pensar que se pudiera hablar de filosofía en la escuela elemental; esta asignatura era compleja y abstracta, convirtiéndola en aburrida y complicada para los niños. El medio en el que se basaban para introducir la filosofía a los alumnos más jóvenes, era únicamente el hacer más simple y aceptable la asignatura. Pero, lógicamente, no se llegaría muy lejos por este camino, en el que se busca la simplificación , por lo que los que compartían esta idea , decidieron centrarse en proporcionar conocimientos filosóficos a ls alumnos más brillantes de los últimos años de secundaria.

La teoría alternativa de la de la educación mantiene que el proceso educativo debe generar actividades de pensamiento entre los que aprenden. Este enfoque mantiene que el pensamiento filosófico, sea cual sea la edad de los alumnos.

Los que se encuentran a favor de que la filosofía se imparta en el aula de la escuela elemental, normalmente, aseguran que la actividad causa interés y capacidad para realizarla todos los niños,. Este modelo mantiene que hay forma de implicar a los niños en el pensamiento filosófico.

El autor mantiene que es bueno que en el aula en la que se desarrolle filosofía para niños, haya una gran heterogeneidad, en este tipo de aula se acepta pensadores de todo tipo.

Valorando las principales dificultades que encontramos en la filosofía aplicada en el aula con los niños, encontramos que la terminología específica dela tradición, la filosofía para niños utiliza un vocabulario adaptado a los niños, con el que se sientan a gusto.

Preservar la Integridad de la Filosofía como una Disciplina

No es raro que los que proponen un nuevo enfoque, tengan algunas dificultades para identificar las tareas necesarias y las prioridades de cada una de ellas.

Encontramos un enfrentamiento entre los que están a favor de preservar la integridad de la filosofía, sin tener en cuenta la edad de los estudiantes, y los que por el contrario, piensan que los niños deben ser animados a ser más reflexivos y críticos.

El enfoque que pretende conservar la filosofía se encuentra amenazado, ya que hoy en día, se tiende a esperar resultados concretos de las asignaturas impartidas. La filosofía aumenta el nivel académico de en un amplio campo de disciplinas, pero no ofrece resultados concretos como las matemáticas. Estos profesores mantienen que las asignaturas de humanidades no tienen por qué responder con resultados concretos, pero sin ofrecer los resultados es difícil poder instaurar la filosofía en el currículo educativo.

Convertir el Aula en una Comunidad de Investigación

Cuando se anima a los niños a pensar filosóficamente, el aula se convierte en una comunidad de investigación, dicha comunidad supone un compromiso con los procedimientos y técnicas de las ciencias y se asume que dichos procedimientos se convierten en hábitos reflexivos del individuo.

Según Lipman, no debemos crear una igualdad absoluta entre el profesor y los alumnos. El maestro posee autoridad en cuanto a las técnicas y procedimientos que emplea para llevar a cabo la clase, debe asegurarse de que los alumnos respetan dichos procedimientos aunque debe estar abierto a los posibles diferentes puntos de vista que posean los estudiantes.

Hay profesores que no creen conveniente la pluralidad de pensamientos en un mismo aula, manteniendo que puede no conseguirse llegar a un acuerdo, a una igualdad, pero eso, según el autor, no debe considerarse negativo.

Preparar al Profesorado y al Currículum

Semejante intervención en el aula exige una dosis considerable de habilidad y astucia y es razonable preguntarse si se puede confiar semejante responsabilidad al profesorado que actualmente existe en la escuela elemental. Los profesores deben ser enseñados sin demasiadas diferencias de cómo van a enseñarles ellos a los niños, aunque sí deben ser instruidos con una profundidad mayor. Aunque se les muestren temas demasiado complejos y que, con toda probabilidad no aparezcan en el aula sería necesario que sepan manejarlos.

Un aspecto importante a tener en cuenta a la hora de enseñar a los profesores de filosofía, sería la educación moral que deberían recibir para poder transmitir a sus alumnos determinados valores y creencias. Los alumnos deben aprender a expresar sus creencias, discutirlas y analizarlas, sopesarlas teniendo en cuenta los pros y los contras, con una argumentación sólida. También hay que decir que, los niños, no pueden captar los conceptos claves de la ética sin la ayuda de una interpretación filosófica, como tampoco pueden hacerlo los adultos. No hay filosofía sin ética ni ética sin filosofía.

Capítulo 8:

El Currículum de Filosofía para Niños

Descripción del currículum

Para una integración en la escuela de la filosofía, sería necesario, como ya se ha señalado anteriormente, preparar a los profesores y un nuevo currículum. Hasta el momento sólo existe un currículum de Filosofía para Niños, publicado por el Institute for the Advancement of Philosophy for Children (1969). Indica, primeramente, cómo se puede graduar la introducción de la filosofía desde preescolar hasta los dieciocho años. Lipman, nos muestra la división por edades, así como los temas tratados en cada etapa:

  • Preescolar - 7 años: Elfie - Kio y Guss.

Manual para el profesor: “Relacionando nuestros pensamientos” “ Asombrándose ante el mundo”

Tema principal: adquisición del lenguaje, intensificación de la conciencia perceptiva

  • 8 - 9 años: Pixie.

Manual del profesor: “En busca del sentido”

Continúa con el lenguaje y pretende que los niños comiencen a adquirir el razonamiento formal de la etapa siguiente. Mayor atención a las estructuras sintácticas y semánticas.

  • 10 - 11 años. Harry.

Manual para el profesor: “Investigación Filosófica”

Adquisición de la lógica formal e informal. Ofrece un modelo de diálogo niños-niños, adultos- niños. Modelo de educación no autoritaria y anti-doctrinadora. El valor de la indagación y el razonamiento. Sugiere que los niños son capaces de aprender unos de otros.

  • 11 años: Tony

Manual del Profesor: “Investigación Científica.”

Explora los supuestos subyacentes de la investigación científica.

  • 12 - 14 años: Lisa, Suki.

Manual del profesor: “Investigación ética”. “Escribir : cómo y por qué”

Investigación ética, lenguaje y estudios sociales. Es una continuación del Descubrimiento de Harry. Se centra en temas éticos como la justicia, mentira, veracidad, naturaleza de las reglas y normas sociales. Relaciones entre lógica y moral.

Suki se centra más en la escritura y sus diferentes formas.

  • 14 - 16 años: Mark.

Manual del profesor: “Investigación social”.

La ley, la libertad individual, la naturaleza de la burocracia y diferentes concepciones de justicia.

  • 17 - 18 años: Cinco novelas distintas cada una con su manual del profesor. Tratan la ética, epistemología, metafísica, estética y lógica. Habilidades del pensamiento y técnicas para aplicarlas.

Fines y Objetivos de Filosofía para Niños

El objetivo central del programa es conseguir que los niños puedan pensar por sí mismos.

Los orígenes del razonamiento

Por razonamiento entendemos: Serie de conceptos encaminados a demostrar algo o a persuadir o mover a oyentes o lectores.

Cultivar el razonamiento presenta tantos problemas como el mismo razonamiento. El sendero de la racionalidad no es un sendero sencillo. Es poco probable que el razonamiento sea algo privativo de los humanos. Lo que parece más plausible es que los humanos descubrieron sus propias capacidades de descubrir, explorar e inferir.

De esta forma, parte de lo que llamamos razonamiento consiste en consejos familiares que proceden de tiempos remotos y que hacen referencia a los peligros que conlleva el aceptar consejo de personas que son una autoridad en la materia.

La coherencia es sólo una de las características en las que insiste una educación con una orientación filosófica.

Razonar en la infancia

Podemos decir que el razonamiento comienza con la inferencia, pero no es nada sencillo distinguir las primeras conductas basadas en la inferencia de las conductas instintivas. No podemos observar ese pensamiento, probablemente, porque no pueden traducir esas premisas lingüísticamente. Pero no quiere decir que los niños no lo tengan. Lo que hace el lenguaje es simbolizar las conductas y permitir su formulación.

Toda actividad filosófica implica razonamiento, pero no todo razonamiento es filosófico. Los niños comienzan a pensar filosóficamente cuando comienzan a preguntar ¿Por qué?. Lipman, le atribuye a esta pregunta dos funciones: la primera es descubrir una explicación causal y la segunda, definir una finalidad.

Razonamiento e Inferencia

Una de las dificultades más serias que experimentan los niños en la escuela elemental es la que encuentran en extraer inferencias. Los niños pueden tener problemas con las inferencias perceptivas, las inferencias lógicas o las inferencias empíricas.

  • Inferencias de percepciones simples: Los niños pueden tener una vista muy buena y sin embargo tener dificultades para hacer inferencias a partir de lo que ven

  • Inferencias lógicas: Otro tipo de dificultad que puede experimentar un niño guarda relación con la realización de un inferencia a partir de uno o más enunciados.

  • Inferencias a partir de diversos tipos de datos: Algunas veces las personas tienen que hacer frente a grupos de hachos de diversos tipos Es una inferencia extraída a partir de una diversidad de observaciones y exige la capacidad de sintetizar.

Desarrollo de la creatividad

El programa de filosofía para niños cree que el pensamiento lógico sólo se puede estimular utilizando la creatividad, y viceversa, ambas se encuentran unidas. El programa propone numerosas actividades creativas que utilizan la expresión de la experiencia y la exploración de las consecuencias así como su sentido.

Crecimiento Personal e Interpersonal

Se ha demostrado, al poner en marcha algunos proyectos, que este tipo de educación cambia el aula y crea en los niños un ansia más fuerte por aprender, descubrir y profundizar en sus inquietudes. Pero creen que hace falta más investigaciones para corroborar ese incremento en la autoestima, madurez emocional y en la autocomprensión en general.

Desarrollo de la Comprensión Ética

La filosofía de la ética debe insistir en el método de la investigación ética más que en las reglas morales. Si a los niños se les proporciona una base sólida, ellos mismos, podrán descubrir la moral. Es el profesor el que debe animar a los alumnos a que vean la importancia de realizar juicios morales bien fundados. Para ello hay que fundarlos en una sensibilidad , interés y cuidados éticos. La mayor parte de los libros de texto no están preparados para la comunicación interpersonal, pero los libros, antes citados, de Filosofía para Niños, son libros infantiles preparados para leer y discutir.

Desarrollo de la Capacidad para Encontrar Sentido en la experiencia

Una forma de descubrir sentido es descubrir conexiones.

Descubrir Alternativas

Una forma de conseguir que el niño descubra alternativas es desarrollar el hábito de tener siempre en cuenta la posibilidad de que la negación de lo que está diciendo sea cierta. “Toda proposición factual tiene siempre una proposición que la niega, que podría ser cierta.” (M. Lipman). Más simple es coger la idea lógica de algo (el pensamiento de alguna cosa o actividad) y encontrar su negación, por ejemplo: jugar, no - jugar. De este modo, los niños, se darán cuenta de que al ordenar los pensamientos y sus negaciones, muestran un modela de alternativas. Esto significa , en el fondo, tener en cuenta todas las posibilidades.

Descubrir la imparcialidad:

Como adultos que somos, sabemos que hay situaciones en las que la parcialidad no es, en absoluto, algo malo, pero hay otras en las que debemos ser imparciales. Pero es difícil saber cuándo ser parcial y cuándo ser imparcial. Sobre todo porque nos cuesta poco ser parciales, en cambio, cuando debemos ser imparciales, nos es mucho más complicado. Hay una situación en la que la parcialidad es especialmente apropiada, cuando intentas comprender algo. Normalmente comenzamos entendiéndolo exclusivamente desde nuestra perspectiva, pero según hablamos con los demás abrimos nuestro pensamiento a nuevas posibilidades.

Descubrir la coherencia

Debemos alentar a los niños a que utilicen las palabras con cuidado desde que son muy pequeños. Habría que mostrarles cómo puede cambiar el significado de una palabra dependiendo del contexto en el que aparezca. Además de las incoherencias verbales podemos encontrar incoherencias entre las palabras y las acciones o incluso entre las propias acciones. Aprender a reconocer las incoherencias lleva consigo el tener presente que no siempre es necesario ser coherente, implica el conocimiento e cuándo ser incoherentes es confuso, engañoso e incluso fraudulento, y cuándo es divertido o profundo.

Descubrir la capacidad de dar razones a favor de las creencias

Existen tres razones claras para ser capaces de ofrecer razones. En primer lugar, es bueno saber que tus creencias son sólidas y fiables, porque todos los días tienes que actuar basándote en ellas. En segundo lugar, en una discusión es posible que se pongan a prueba tus creencias. Se te pedirá que las razones. Gracias a discusiones anteriores estarás preparado para responder a esas exigencias. Y en tercer lugar, puedes tener buenas razones para una creencia concreta, pero pueden ser todavía insuficientes para creerlo así.

Descubrir la Globalidad

Es necesario animar a los jóvenes a que intenten establecer relaciones entre sus ideas y que estas estén bien fundadas y establecidas, así podrá construir una red de pensamiento con la que siempre podrá contar. El profesor, gracias a su amplia experiencia, puede servir de guía a los niños preguntándoles si pueden ver las conexiones (cuando ellos no las ven) y ayudarles a relacionar sus ideas con las cosas que suceden en sus vidas y en el mundo en el que viven. Sugerirles conexiones y posibles implicaciones y consecuencias de sus ideas.

Descubrir situaciones

Actualmente hay una intención especial de que los niños sean capaces de tomar sus propias decisiones desde muy temprana edad, en una situación en la que es necesario elegir, el niño debería ser capaz de elegir de la forma más inteligente posible, pero si se le fuerza a hacer esa elección en otras situaciones en las que no conviene, entonces, posiblemente, el niño se hará más daño que beneficio por tomar decisiones prematuras. Exagerar la importancia de las decisiones es darle mayor importancia al producto dejando a un lado el proceso. Los niños tienen que lograr, captar la situación en la que deben decidir y conocer las características de dicha situación. Este programa, introduce al niño varias situaciones en las que aparecen dilemas morales, se les deja libertad para discutir, analizar, interpretar y explorar dichos dilemas morales.

Descubrir las relaciones parte-todo

La comprensión de las relaciones parte-todo contribuye al logro de cuatro objetivos:

  • Mejora de la capacidad de razonar

  • Desarrollo de la creatividad

  • Crecimiento personal e interpersonal

  • Desarrollo de la comprensión ética

  • Capítulo 9:

    Metodología de la enseñanza: Consideraciones de valor y estándares de la práctica.

    Haciendo que los niños piensen por sí mismos

    El profesor debe alentar a los niños a que su conciencia filosófica crezca continuamente , a través del cuestionamiento, puede incorporar nuevos puntos de vista para ampliar los horizontes de los estudiantes, nunca debe dejarse llevar por sus propios intereses. No sólo debe saber filosofía, también debe conocer cómo y cuándo introducir ese conocimiento mediante el conocimiento y el asombro que apoye a los niños en su propio esfuerzo. Presupone que los niños aprenden al involucrarse de manera activa en la exploración, el conocimiento no aparece mediante la repetición.

    Condiciones para la Enseñanza del Pensamiento Filosófico

      • Comprometerse con la investigación filosófica.

    El compromiso que se intenta alentar en el niño es un compromiso con el proceso de investigación mismo, ya sea esta investigación lógica, estética, científica o moral.

      • Evitar el adoctrinamiento.

    Un meta de la educación es liberar a los estudiantes de hábitos mentales que no son críticos, para que así puedan desarrollar mejor la habilidad de pensar por sí mismos, y en un futuro, cuando estén listos desarrollar su propio conjunto de concepciones sobre el mundo.

      • Respetar las opiniones de los niños.

      • Despertar la confianza de los niños.

    Enseñanza del comportamiento encaminado a ayudar a los niños a involucrarse en el pensamiento filosófico

    El rol del profesor es el de ayudar a que los niños dominen medios como las reglas de la inferencia lógica y las normas que se deben seguir en una discusión dentro del aula.

      • Mantener la pertinencia.

      • Hacer preguntas.

      • Dar respuestas.

      • Comunicación no verbal entre profesor y alumno.

      • El profesor es un modelo del niño.

    Capítulo 10:

    Dirigir una discusión filosófica

    La filosofía y las estrategias del diálogo

    La filosofía adquiere formas alternativas de actuar, crear y hablar. Para descubrirlas, los filósofos, cuestionan tanto sus propias creencias como las que adquieren otras personas, y aumentan sus marcos de referencias. Esta reflexión inventiva es el resultado de una buena preparación filosófica, pero lo que interesa es descubrir qué metodología es la adecuada para proporcionar esa preparación.

    El profesor aparte de ser un “árbitro” en la discusión debe estimular a los niños a que razonen. No debe establecer unos objetivos mínimos ni unos contenidos concretos a lograr en cada sesión, en las sesiones surgen discusiones en las que se habla del libro leído pero, normalmente, estas llegan a unos temas algo alejados del tema principal pero que provocan impresiones duraderas en los niños. Lipman considera mucho más importante el que los niños aprendan a pensar de forma efectiva que los conocimientos concretos que puedan adquirir, ya que opina que un cambio en la forma de pensar de un niño, cambia todos sus procesos de pensamiento.

    Guiar una Discusión en el Aula

    Una discusión reflexiva no es un logro fácil. Requiere práctica. Normalmente a los niños pequeños les cuesta mantener una discusión ordenada. Esto ocurre principalmente porque los modelos que tienen de discusión (en casa, escuela, medios de comunicación...) no son los adecuados. Para adquirir esa discusión reflexiva, es necesaria la práctica, para ello el profesor debe inculcar una tradición de discusión tradicional que les aporte el modelo adecuado para llevarla a cabo, debe introducirse siempre de manera significativa.

    El Rol de las Ideas en el Diálogo Filosófico

    Podríamos distinguir, aquí, dos tipos de discusiones, distintas de las filosóficas:

    Discusiones Científicas:

    Estas normalmente se preocupan por cuestiones y teorías de hecho, son cuestiones a las que se les puede dar respuesta. El científico trata de descubrir una porción del mundo. Los asuntos que tratan pueden ser aclarados, su resolución siempre es posible.

    Discusiones sobre creencias religiosas:

    Estas creencias suelen estar relacionadas con el destino del mundo (inmortalidad, Dios, esperanza de recompensas o castigos divinos...)NO pueden ser decididas a través de experiencias empíricas. No es papel del profesor ocuparse de “resolver” en clase estas discusiones, ya que no sería posible hacerlo sin un adoctrinamiento. El niño puede tener sus creencias religiosas y el profesor de filosofía no es quién para juzgarlas. Estas discusiones no explorar las bases en las que se sustentan los pensamientos religiosos, mientras que una discusión filosófica no puede darse por satisfecha al menos que explore sobre sus presuposiciones.

    Discusiones filosóficas:

    Frecuentemente, tratan cuestiones religiosas y científicas, del mismo modo que cualquier otro tema. La filosofía se preocupa por clarificar significados, descubrir supuestos y presuposiciones, analizar conceptos..., pero no se preocupa sólo por la clarificación de conceptos, es una fuente de ideas que precede a toda empresa filosófica.

    El profesor tiene que tener presente las diferencias señaladas entre los distintos tipos de discusiones explicadas anteriormente. Tiene que tener claro que en un momento dado cualquier discusión filosófica puede cambiar su rumbo y buscar soluciones que pueden hallarse de manera empírica, aquí su papel es el de orientar a los niños hacia el cómo encontrar esas soluciones empíricamente. Las discusiones filosóficas pueden desarrollarse a partir de muchas preguntas que les asaltan a los niños sobre cualquier idea.

    Alentar el diálogo filosófico

    Discusiones, buenas discusiones y discusiones filosóficas

    Una buena discusión puede tratar sobre cualquier tema, al contrario que otras discusiones que no llevan a ningún sitio. Una buena discusión ocurre en cualquier área. Una mera discusión puede implicar una exposición de varios comentarios de los participantes, pero sin llegar a una “comunicación de mentes”. Puede ser la base desde la que nazca una buena discusión. Lo importante en una buena discusión, es que cada participante sea capaz de expresar sus creencias y se relacionen y refuercen con las de los demás.

    Motivar a los Estudiantes

    Lograr que los estudiantes se involucren en un diálogo filosófico es un arte, para ello, el profesor debe poseer una comprensión de cuándo es apropiado intervenir y cuándo no lo es.

    Obtener puntos de vista u opiniones

    Es importante estimular aquellos intereses que de otro modo irían disminuyendo. Se comienza con la lectura de la historia, al terminar podemos preguntarles acerca de lo que más le interesa de esa historia. Según avanza la clase es conveniente escribir esos intereses en la pizarra. Esos intereses se convierten en un punto de discusión de clase. A continuación tomamos el primer punto de interés para discutirlo. Se les pide su punto de vista, si no se animan el profesor puede pedir a quien ofreció ese interés a que explique sus razones.

    Ayudar a los estudiantes a que se Expresen Ellos Mismos: Clarificación y Reformulación

    Si durante una clase el profesor se da cuenta de que a sus alumnos les cuesta explicar sus posturas es positivo que les ayude aportando un tipo de frases que sirven para clarificar lo que el niño ha dicho, peor que no pide razones o implicaciones de lo que el niño dijo; son refuerzos para reformular ciertos comentarios. Esto facilita la discusión.

    Explicar los puntos de vista de los estudiantes

    Si el profesor quiere explorar, no sólo lo que dice un alumno, sino el sentido de lo que dice, debe poner atención en lo que es la explicación. Ésta, se sitúa entre la reformulación y la interpretación. Explicas cuando seleccionar y enfatizar ciertas características de lo que el estudiante ha afirmado.

    Interpretación

    La discusión en el aula puede centrarse en lo que alguien ha afirmado, o en el significado de algún pasaje leído. El desentrañar significados, es interpretar. La interpretaciones que se le den a unas afirmaciones puede variar del significado que estas tienen para quien las realiza. Al guiar la discusión es importante tener presente, no sólo lo que se está diciendo, sino también cómo se puede estar interpretando.

    Podríamos lograrlo de dos formas:

      • Infiriendo las implicaciones lógicas.

      • Infiriendo lo que se está sugiriendo.

    Buscar la coherencia

    Durante el transcurso de una discusión filosófica es útil hacer preguntas acerca de la coherencia.

    Pedir definiciones

    Hay ocasiones en las que los términos que están siendo utilizados en una discusión llegan a provocar más confusión que claridad, sería muy útil, por lo tanto detener la discusión para buscar definiciones o abndonar los términos conflictivos.

    Buscar presuposiciones

    Una de las características principales de un diálogo filosófico es la búsqueda de las presuposiciones que subyacen en lo que se está diciendo.

    Señalar las falacias

    Si los profesores toman la iniciativa de mostrar a los alumnos las falacias que cometen durante las discusiones de clase, notarán que, después de algún tiempo los estudiantes lo harán por sí solos, aprendiendo a corregirse.

    Pedir razones

    Otra de la características de un discusión filosófica consiste en el desarrollo de la presentación sistemática de ideas.

    Pedir a los estudiantes que digan cómo lo saben

    Puede hacer que surjan razones para sus afirmaciones, porque algunos estudiantes interpretan la pregunta como una petición de explicaciones.

    Obtener y analizar alternativas

    Orquestar una discusión

    Un profesor puede aprenderse una serie de preguntas modelo para dirigir la discusión filosófica, y aún así no lograrlo. Las sugerencias del autor para alentar y facilitar el diálogo son:

    • Agrupar las ideas

    • Sugerir posibles líneas de convergencia o divergencia

    • Llevar las discusiones a un nivel más elevado de generalidad.




    Descargar
    Enviado por:PPT
    Idioma: castellano
    País: España

    Te va a interesar