Psicología


Evolución humana


Introducción

La evolución humana ha sido objeto de estudio de muchos investigadores , todos han tratado de descifrar los procesos que hemos sufrido para llegar a ser las personas que somos en nuestros días. Pero con la misma importancia y tal vez mas muchos investigadores se han inmerso a la tarea de describir como se lleva acabo el desarrollo de la persono desde su nacimiento hasta su enfrentamiento con la muerte.

La siguiente investigación solo resume las generalidades que la persona humana presenta a lo largo de vida. las etapas del desarrollo humano se pueden dividir en infancia, adolescencia, senectud y muerte.

Lo mas sobresaliente del desarrollo humano es que el ser humano no lo se desarrolla físicamente sino que en igual medida que avanza por la vida se desarrolla emocional e intelectualmente.

En esta investigación tratamos de darle un lugar especial al desarrollo de la personalidad a lo largo de la vida. La personalidad es la preocupación de todo ser humano. La gran importancia de este tema es que el hombre de hoy podrá darse cuenta de sus errores en el aspecto de su personalidad, y también es muy importante para nosotros, ya que nos ayuda a atender los diferentes tipos de problemas que actúan en las personas que habitan en nuestro mundo.

La gran importancia que tiene la personalidad es que a través de ella los sicólogos pueden darse cuenta de los diversos tipos de problema o enfermedad que tiene ese individuo y esta es una ciencia muy interesante, porque con ella se aprende los caracteres de cada tipo de persona.

1.- LA INFANCIA

1.1 Desarrollo biológico

Las cuatro primeras semanas de vida marcan el período neonatal, un momento de transición de la vida intrauterina cuando el feto depende totalmente de la madre a una existencia independiente.

El bebé al nacer tiene características distintivas, cabeza grande, ojos grandes adormilados, nariz pequeña y mentón hendido (lo que hace más fácil amamantar) y mejillas gordas.

La cabeza del neonato es un cuarto de la longitud del cuerpo y puede ser larga y deformada debido al amoldamiento que ha facilitado su paso a través de la pelvis de su madre. Este amoldamiento temporal es posible debido a que los huesos del cráneo del bebé no se han fusionado aún; no estarán completamente unidos durante los 18 meses. Los lugares de la cabeza en donde los huesos no han crecido juntos- puntos suaves o fontanela- están cubiertos por una membrana fuerte. Debido a que el cartílago de la nariz del bebé es moldeable, el viaje a través del canal deja la nariz luciendo aplastada por unos pocos días.

1.2 Crecimiento del cuerpo

El crecimiento físico es más rápido durante los 3 primeros años que durante el resto de la vida. A medida que los niños pequeños crecen en tamaño, la forma del cuerpo también cambia. El tamaño del resto del cuerpo se proporciona con el de la cabeza, la que sigue el proceso en curso hasta alcanzar el tamaño de la de un adulto. La mayoría de los niños se adelgazan durante los 3 primeros años; el niño de 3 años es más delgado si se compara con el regordete y barrigón de un año.

En la mayoría de los bebés el primer diente aparece entre los 5 y 9 meses, y al año tiene 6 u 8 dientes y a los 2 años y medio tiene 20.

1.3 Crecimiento del cerebro

El cerebro humano crece más rápido mientras el bebé está todavía en el vientre y en los primeros meses de vida. En el feto en desarrollo, se forman un promedio de 250.000 células cerebrales por minuto, a través de la división celular (mitosis); así la mayoría de los cien mil millones de células en el cerebro humano ya están presentes en el nacimiento.

El cerebro, la columna vertebral y una red de nervios que llega a todas las partes del cuerpo constituye el sistema nervioso. Este complejo sistema de comunicación envía mensajes sensoriales desde todas las partes del cuerpo al cerebro y regresa órdenes motrices de éste.

Inmediatamente después del nacimiento hay un incremento en el crecimiento de las células cerebrales. Las células formadas recientemente se clasifican por funciones, y se dirigen a sus posiciones apropiadas bien sea en la capa superior del cerebro, o en la capa inferior, o niveles subcorticales. En un recién nacido, las estructuras subcorticales que regulan funciones biológicas como la respiración y la digestión son las que estñan desarrolladas de manera más completa; las células en ek córtex cerebral, que es donde se origina el pensamiento y la solución de problemas, todavía no están bien conectadas. Las conexiones entre las células en el córtex aumentan marcadamente a medida que el bebé madura y hacen posible el funcionamiento motor e intelectual en niveles más altos.

1.4 Conductas reflejas

Los seres humanos tienen un arsenal de reflejos, algunos de los cuales parecen ofrecer protección e inclusive abarcan hasta la supervivencia misma.

Los llamados reflejos primitivos, o reflejos de los recién nacidos, se encuentran presentes en el momento del nacimiento o un poco después, y algunos se pueden producir aun antes del nacimiento. En un bebé neurológicamente saludable, estos reflejos desaparecen en diferentes épocas durante el primer año. La breve aparición de estos reflejos primitivos indica el control subcortical del sistema nervioso de un infante, ya que la maduración de la corteza cerebral inhibe sus manifestaciones.

Los reflejos primitivos son normales en los recién nacidos pero después de los primeros meses es normal que se desvanezcan como señal de desarrollo neurológico. Los reflejos primitivos se hallan controlados por la subcorteza; su desaparición es prueba de que la corteza se está desarrollando

y da como resultado el cambio de conducta refleja a conducta voluntaria. Ya que hay un tiempo preestablecido para el desarrollo y la desaparición de los reflejos primitivos, el desarrollo neurológico de un bebé, se puede evaluar al observar qué reflejos se hallan presentes o ausentes.

1.5 Desarrollo psicomotor

Hay un orden definido para la adquisición de destrezas motrices y la habilidad de moverse deliberada y acertadamente es progresiva. Las habilidades van de lo simple a lo complejo. Primero, el niño alza objetos relativamente grandes con toda su mano. Luego, gradúa el uso de pequeños movimientos como de pinza con su pulgar y su índice para alzar objetos muy pequeños. Después de que ha logrado control sobre movimientos separados de los brazos, manos, piernas y pies, será capaz de coordinar todos estos movimientos para poder caminar.

La habilidad para caminar y la precisión para agarrar son dos de las habilidades motrices más distintivas de los humanos, ninguna de las cuales está presente en el momento de nacer.

1.6 control de la cabeza

Al nacer, el bebé puede voltear la cabeza de lado a lado cuando está acostado hacia arriba y, cuando está boca abajo, puede levantar la cabeza lo suficiente como para voltearla. Primero domina el elevar la cabeza mientras que está boca abajo; luego mantiene su cabeza derecha cuando se le sostiene, y después levanta la cabeza cuando está boca arriba. Durante sus primeros 2 ó 3 meses continúa elevando la cabeza más alto y, alrededor de los 4 meses, puede mantenerla derecha cuando se le ayuda ocuando se lo mantiene sentado.

1.7 Control de las manos

Aproximadamente a los 3 meses y medio, el bebé puede agarrar un objeto de tamaño no muy grande, aunque todavía tiene dificultad para agarrar cualquier cosa que sea mucho más pequeña. Alrededor de los 7 meses, las manos están lo suficientemente coordinadas como para poder alzar un guisante de la bandeja de su silla de comer, haciendo uso solamente de un movimiento como de pinza . A los 14 meses puede construir una torre de dos cubos; alrededor de los dos años pude agarrar una taza y beber de ella, y su lateralidad ya se halla bien establecida; aproximadamente 3 meses antes de su tercer cumpleaños, puede copiar un círculo, bastante bien.

1.8 Locomoción

A los 3 meses, después de un cuarto de año como prisionero de la gravedad, el bebé empieza a rodar sobre sí mismo a propósito, primero de su estómago a la espalda y más tarde de la espalda al estómago. Los bebés aprenden a sentarse ya sea levantándose por sí mismos, ya sea cuando están acostados o dejándose caer cuando están de pie.

El bebé promedio puede sentarse sin apoyo entre los 5 y 6 meses y puede adoptar una posición de sentado sin ninguna ayuda, dos meses más tarde. Alrededor de los 6 meses aproximadamente, empiezan a moverse por todas partes en forma muy variada y bajo su propia cuenta y riesgo. Se mueven sobre el estómago, empujan el cuerpo con los brazos y arrastran con dificultad los pies detrás de ellos. A veces, sentados, corren rápidamente, empujándose hacia delante con los pies y las manos. La mayoría de los bebés ya se desenvuelven por todas partes con bastante propiedad alrededor de los 9 ó10 meses.

Alrededor de los 10 meses, después de unos 4 meses de práctica parándose con el apoyo de cualquier objeto, puede soltarse y pararse solo. Alrededor de dos semanas antes del primer cumpleaños, se pone de pie correctamente, por sí mismo.

1.9 Desarrollo del conocimiento experiencial del mundo

Cuando el niño recién nacido agarra algo, esta acción es un acto reflejo. Es una respuesta ante un estímulo. Las manos del bebé se desarrollan durante los 2 primeros años de vida, a los 3 meses de edad, el niño ya empieza a adquirir hábitos o habituación a agarrar instrumentos, utensilios...

Se establecen conexiones en el cerebro para poder realizar movimientos con las manos, este es el primer paso.

El segundo paso, es establecer una relación con el medio. El niño puede percibir un objeto, pero no puede alcanzarlo. Cuando logra alcanzar algún objeto que quería, se da cuenta que todos sus esfuerzos no son en vano, y repite la acción continuadamente.

Cuando consiga coordinar el alargamiento del brazo y la mano, conseguirá agarrar aquellos objetos que quiera, con más precisión. La boca, las manos, son las primeras acciones que se desarrollan en la corteza cerebral ( conexiones cerebrales).

El bebé es capaz de reconocer un objeto que haya tenido en la boca sin haberlo visto antes. Un bebé sabe que su madre está en casa aunque no se encuentre en la habitación Permanencia de los objetos.

El niño puede agarrar un objeto en movimiento, pero se encuentra con un problema, el niño no puede soltar el objeto, tiene que esperar a que se suelte por sí solo. Al cabo de un tiempo, el niño es capaz de agarrar y soltar los objetos.

A los dos años de edad, el niño ya puede tener la habilidad de abrir y cerrar las puertas. Lo más dificultoso es vestirse y desvestirse, limpieza de dientes.

La percepción de la profundidad es innata o aprendida muy temprano. Sin embargo, la habilidad para percibir la profundidad no indica un temor a las alturas. El sentido del peligro no se desarrolla sino más tarde y está relacionado con la habilidad de los niños para moverse por sí solos.

1.10 Desarrollo lingüístico

La primera actividad vocal del bebé es llorar. Uno o dos meses después, balbucea, utilizando su lengua de diferentes formas para moldear los sonidos; alrededor del primer cumpleaños. El niño dice algunas palabras cortas formadas por sonidos simples; puede producirlas bien y muestra un control sutil y voluntario de su cuerpo.

El manejo del habla no es únicamente una cuestión de aprendizaje. Es también una función de maduración. La importancia de la maduración, el desdoblamiento de los patrones de conducta en una secuencia determinada biológicamente y relacionada con la edad. Estos cambios son programados por los genes; es decir, antes que el niño pueda tener control completo de todas las habilidades debe estar biológicamente listo.

1.11 Discurso prelingüístico

A las 6 semanas del nacimiento, los bebés se arrullan cuando están felices produciendo chillidos, gorgoteos y sonidos vocálicos. Entre los 4 y los 6 meses empiezan a balbucear, repitiendo una serie de sonidos simples.

De los 7 a los 12 meses imitan accidentalmente sonidos que han escuchado y luego se imitan a sí mismos al producir estos sonidos. Cerca de los 9 a 10 meses imitan sonidos deliberadamente. Aun cuando no los entiendan.

Al principio del segundo mes, cuando de arrullan para expresar satisfacción, los bebés empiezan a aumentar en forma continua la gama de entonaciones emocionales.

1.12 Discurso lingüístico

Cuando la primera palabra no es mamá o papá, puede ser una sola sílaba que tiene gran variedad de significados, de acuerdo con lo que está sucediendo en ese momento. Una palabra sola que parece expresar un pensamiento completo se llama holofrase.

Normalmente, alrededor de los 15 meses un niño de cualquier sexo ha dicho diez nombres o palabras diferentes, y el vocabulario continúa creciendo a través de la etapa de las palabras simples. También hay seguridad creciente en las palabras, más y más ocasiones inspiran al bebé para decir una palabra o un nombre.

La edad en que los niños comienzan a combinar palabras varían. Generalmente, lo hacen después de su segundo cumpleaños. Aunque el discurso prelingüístico está clara e íntimamente ligado a la edad cronológica, el discurso lingüístico no.

Algunas de las características del habla temprana:

  • Los niños simplifican y dicen solamente lo suficiente para que se les entienda.

  • Generalización de reglas: las aplican rígidamente sin usar excepciones.

  • Entienden las relaciones gramaticales que no pueden expresar.

1.13 Desarrollo cognitivo

A las doce semanas el niño entiende la relación causa-efecto. Han aprendido que llorando puede conseguir que ocurran cosas, ha aprendido también a saber a escuchar. El cerebro de un bebé empieza a desarrollarse los primeros meses de vida, el córtex permite al bebé controlar su comportamiento. El córtex humano se desarrolla más lentamente, y hasta los 3 años no se aprecia la diferencia en cuanto a la creatividad.

A los 6 meses, se es sensible a las diferencias matemáticas, ej: saben diferenciar entre un juguete y dos juguetes. Para los bebés “más de tres“ es más. Saben diferenciar que un juguete no es igual que dos juguetes.

Aprenden mediante la acción y no sólo mediante la observación. Desarrollan la capacidad de categorización. A los 15 meses, ya comienzan a experimentar. Descubren que el agua no tiene las mismas propiedades que el aire. La habitación de los juguetes, es donde el niño monta y desmonta las cosas, rara vez pasa de un juguete a otro sin manipularlo. Con 1 año más de edad, el niño tiende al orden, ha aprendido que los objetos se pueden clasificar.

El pensamiento no sólo es científico, sino también creador. Los bebés 1º aprenden a copiar, después improvisar y más tarde a crear.

1.14 Desarrollo emocional

El desarrollo emocional depende de muchos factores, algunos de los cuales son innatos y visibles en el nacimiento y otros sólo aparecen después de un tiempo. Este proceso puede provenir de un reloj ”biológico” en maduración, gobernado por el cerebro, el cual dispara sentimientos específicos en diferentes etapas. Esta cronología puede tener valor para la subsistencia: expresiones de dolor de niños indefensos de dos meses pueden hacer que se les proporcione la ayuda que necesitan, mientras que la ira expresada por los mismos bebés en la misma situación, pero siete meses más tarde, puede ocasionar que alguien haga algo para ayudarles, por ejemplo a alejar a una persona que le molesta.

Poco después de nacer, los bebés muestran interés, angustia y disgusto. En los meses siguientes van más allá de estas expresiones primarias para expresar alegría, cólera, sorpresa, timidez, miedo. Pero emociones más complejas que dependen del sentido de sí mismo llegan más tarde, alguna de ellas el segundo año, que es cuando la mayoría de los niños desarrollan la autoconciencia: capacidad para reconocer sus propias acciones, intenciones, estados y competencia y para entender que están separados de otras personas y cosas. Al darse cuenta de esto, pueden pensar sobre sus acciones y juzgarlas.

Alrededor de los ocho meses, la mayoría de los bebés desarrollan miedo a los extraños, sin embargo no muestran miedo si el extraño es otro niño.

El logro de la autoconciencia representa un gran salto de los niños en la comprensión y en la relación con otra gente; pueden colocarse en el lugar de otras personas y así desarrollan el sentimiento de empatía; además pueden pensar sobre sus propios sentimientos. Cuando se dan cuenta de que nadie más puede conocer sus pensamientos, desarrollan la habilidad de mentir.

1.15 Expresión de las emociones

Durante el primer mes, el bebé se aquieta al sonido de una voz humana o cuando la alzan, y sonríe cuando le mueven las manos y se las ponen juntas para jugar a dar palmaditas. Cada día que pasa, responde más a la gente- sonriendo, arrullándose, agarrando objetos...

Al nacer, su grito indica incomodidad física; más tarde, posiblemente expresa angustia psicológica. Sus primeras sonrisas con frecuencia son espontáneas como una expresión de bienestar interno. Después de unos meses, las sonrisas son, con más frecuencia, señales sociales en las cuales el bebé muestra su agrado por otras personas.

1.16 El llanto

Como la forma más poderosa - y a veces única - como los bebés pueden señalar al mundo externo cuando necesitan algo, el llanto es un medio vital de comunicación. Desde la primera semana de vida, los infantes lloran cuando sienten hambre, frío y cuando están desnudos o despiertos. Durante las siguientes semanas, también lloran cuando se les interrumpe la comida, cuando se los estimula estando incómodos y cuando se los deja solos en un cuarto.

Patrones de llanto: Hay cuatro patrones de llanto:

  • Llanto de hambre básico: llanto rítmico que no siempre está asociado con hambre.

  • Llanto de ira: variación del llanto rítmico en cual un bebé expele el exceso de aire a través de las cuerdas vocales.

  • Llanto de dolor: ataque súbito de llanto en voz de alta sin quejidos preliminares, o grito inicial prolongado seguido de un período largo de retención de la respiración.

  • Llanto de frustación: empieza con dos o tres gritos largos sin períodos largos de retención de la respiración.

  • La sonrisa

    Su sonrisa pone en movimiento un ciclo de confianza y afecto. La sonrisa se desarrolla por etapas. La primera sonrisa tímida aparece muy pronto después del nacimiento y en alguna ocasión se explicó que se debía a gases; pero se sabe que ocurre en forma espontánea como resultado de la actividad del sistema nervioso central y, frecuentemente, aparece cuando el niño se está quedando dormido.

    Durante la segunda semana después del nacimiento, el bebé sonríe con frecuencia de manera somnolienta después de comer, posiblemente como respuesta a los sonidos de su madre. Después de la segunda semana, es probable que sonría más cuando está despierta pero inactiva y, alrededor del mes, sus sonrisas llegarán a ser más frecuentes y sociales. Las primeras sonrisas sociales son breves en tanto que la primera sonrisa refleja hace uso de los músculos faciales inferiores únicamente y la sonrisa social, también, incluye los músculos de los ojos. A esta edad los bebés sonríen cuando se los hace palmotear y cuando oyen una voz familiar; durante el segundo mes, pueden reconocer a distintas personas y les sonríen más a aquellas que conocen; alrededor de los tres meses, sus sonrisas son más amplias y duran más.

    1.17 La risa

    Durante su cuarto mes, el bebé empieza a reír fuerte cuando lo besan en el estómago, cuando oye determinados sonidos. A medida que el bebé va creciendo, ríe con más frecuencia y ante más cosas. De los cuatro a los seis meses se ríe en forma nerviosa como respuesta a los sonidos y al contacto, pero de los siete a nueve meses lanza la cabeza hacia atrás y ríe en igual proporción ante situaciones más complejas. El cambio refleja su desarrollo cognoscitivo creciente: al reír ante lo inesperado, muestra que sabe qué esperar; la risa también le ayuda a descargarla tensión.

    1.18 La rabieta

    Las rabietas es uno de los signos que delatan que se están haciendo humanos conocen su mente y están intentando tomar sus propias decisiones.

    A los 2 años, es capaz de fabricar emociones con las que sabe que conseguirá lo que quiera. Es capaz de reaccionar ante los sentimientos, pueden imaginarse lo que sienten los demás. Comienzan a aprender el mundo adulto, de los premios y los castigos. A los 3 años dominan todas las técnicas para entablar una amistad.

    2 ADOLESCENCIA

    2.1 Definición de adolescencia:

    Etapa de maduración entre la niñez y la condición de adulto. El término denota el periodo desde el inicio de la pubertad hasta la madurez y suele empezar en torno a la edad de catorce años en los varones y de doce años en las mujeres. Aunque esta etapa de transición varía entre las diferentes culturas, en general se define como el periodo de tiempo que los individuos necesitan para considerarse autónomos e independientes socialmente.

    La adolescencia comienza en la biología y termina en la cultura, en el occidente comienza de los 12 o 13 años y termina finalizando los 19 o comenzando los 20. Por una parte, los procesos de la maduración dan lugar a una rápida aceleración del crecimiento físico, al cambio de las dimensiones del cuerpo, a modificaciones hormonales y a unos impulsos sexuales más fuertes, al desarrollo de las características sexuales primarias y secundarias, así como a un nuevo crecimiento y diferenciación de las capacidades cognoscitivas.

    Estos desarrollos biológicos y la necesidad en que se ve el individuo de adaptarse a los mismos dan a la adolescencia algunas características universales y la separan de períodos anteriores al desarrollo. Por otra parte, la cultura determina si el período de la adolescencia será largo o corto; si sus demandas sociales representan un cambio brusco o tan sólo una transición gradual desde etapas anteriores al desarrollo; y, ciertamente, el que se la reconozca explícitamente o no como una etapa aparte; claramente perfilada, del desarrollo en el transcurso de la vida.

    La adolescencia es considerada generalmente como un período de cambio y también de consolidación en el concepto de sí mismo. Existen para ello diversas razones. En primer lugar, los importantes cambios físicos que se verifican ocasionan, como ya hemos leído, un cambio en la propia imagen corporal. En segundo lugar, el desarrollo intelectual durante la adolescencia posibilita un concepto más complejo y sofisticado acerca de sí mismo, que implica un número mayor de dimensiones, abarcando tanto posibilidades como realidades. En tercer término, parece probable que se produzca cierto desarrollo del concepto de sí mismo debido a la creciente independencia emocional y a la necesidad de adoptar fundamentalmente decisiones sobre trabajo, valores, comportamiento sexual, elección de amistades, etc. Por último, la naturaleza transitoria del periodo adolescente y en especial los cambios de papel experimentados en dicha época, parecen hallarse asociados con cierta modificación del concepto de sí mismo.

    2.2 Identidad y crisis de identidad:

    Comenzaremos señalando que Erikson considera la vida como una serie de estadios o etapas, cada uno de los cuales va asociado a una determinada misión, de naturaleza picosocial, dentro del desarrollo. En la infancia, por ejemplo, dicha misión consiste en establecer un sentimiento de confianza básica y en combatir la desconfianza. La relación con la madre es considerada aquí como esencial para constituir un fundamento, sobre el cual el niño puede establecer más adelante relaciones basadas también en la confianza. Por lo que respecta a la adolescencia, la misión implica el establecimiento de una identidad coherente y la superación de un sentimiento de difusión de la identidad. Erikson opina que la búsqueda de identidad resulta especialmente urgente en este estadio, a resultas de numerosos factores, como son las circunstancias sociales y culturales.

    Así, Erikson concede importancia al fenómeno del rápido cambio biológico y social durante la adolescencia y señala en especial la importancia que para el individuo tiene la necesidad de adoptar decisiones, en dicha época, en casi todas las facetas de la vida.

    La difusión de la identidad, según Erikson, tiene cuatro componentes principales, Existe, en primer lugar, el problema de la intimidad. Aquí, el individuo puede temer el compromiso o la implicación en estrechas relaciones interpersonales, debido a la perdida de su propia identidad. Este miedo puede llevar a relaciones estereotipadas, formalizadas, al aislamiento, etc.

    En segundo lugar existe la posibilidad de una difusión de la identidad temporal. En ésta, le resulta imposible al adolescente planificar para el futuro o mantener cualquier tipo de relación.

    A continuación existe una difusión de la laboriosidad, en la que el joven tiene dificultades para aplicar sus recursos, de un modo realista al trabajo o al estudio.

    Por último analiza la elección de una identidad negativa. Significa con esto la selección, por parte del joven o de la joven, de una identidad que es exactamente la opuesta a la preferida por los padres o por otros adultos que revisten importancia para el joven.

    Estos cuatro elementos constituyen los rasgos principales de la difusión de la identidad, si bien, evidentemente, no todos estarán presentes en los individuos que experimenten una crisis de identidad. Además de conceptos como los señalados, hemos de mencionar otra noción con rasgo integrante de la teoria de Erikson: la moratoria picosocial. Con este último término se designa un periodo durante el cual se dejan decisiones en suspenso. Se afirma que la sociedad permite e incluso estimula un periodo de la vida en que el joven puede demorar importantes elecciones sobre su identidad, experimentando papeles para descubrir que clase de persona desea ser; aunque dicho estadio puede conducir a una desorientación o a alteraciones.

    2.3 Identidad de papel sexual:

    La identidad de papel sexual es un aspecto del concepto de sí mismo que rara vez ha sido abordado con anterioridad

    El término "papel sexual" se emplea corrientemente para referirse a una serie de estándares o predisposiciones que describen el comportamiento masculino o femenino adecuado en una determinada cultura. Así, desde la más temprana infancia, los individuos aprenden que comportamientos resultan aceptables y cuales no para cada uno de ambos sexos. Este aprendizaje puede no tener forzosamente lugar de un modo explícito, sino que es más frecuente que sea adquirido por el niño como un aspecto de las normas generales que existen en su medio ambiente.

    Respecto a la identidad del papel sexual, puede considerarse que representa el grado en que el individuo cree haberse ajustado al papel prescrito. Es decir: la identidad con el papel sexual se refiere a la media en que una persona siente que su comportamiento va de acuerdo con los estándares que operan en la respectiva cultura y que determinan el comportamiento masculino o femenino en general.

    El hecho de que la identidad de papel sexual se convierta en problemática durante los años de adolescencia parece ser generalmente aceptado por cuantos han considerado el tema. ¿Por qué ha de ser así?. En primer lugar se afirma que, en nuestra sociedad, antes de la pubertad se permite un considerable margen de acción en el comportamiento adecuado del sexo. Así las niñas, si quieren, pueden presentar una conducta más bien propia de los chicos, sin provocar mucha desaprobación, mientras que los niños pueden preferir actividades sosegadas, reflexivas y escaso interés por el deporte hasta la edad de 10 u 11 años. Sin embargo, a continuación de la pubertad, el individuo está sometido a dos presiones. En primer lugar, los padres, los profesores y otros sujetos mayores consideran la aproximación a la edad adulta y desean asegurar al joven una adaptación, con éxito, a la misma. En segundo lugar, el grupo de los compañeros va ejerciendo una creciente influencia en la determinación de los comportamientos que son aceptables. Ambos grupos destacan los niveles correspondientes a papel sexual y señalan, de manera que no deje lugar a dudas, las sanciones que tendrán lugar si el adolescente se desvía demasiado radicalmente de la norma.

    Cuando se establecen comparaciones entre adolescentes de ambos sexos se observa con frecuencia que intereses y actitudes vinculados al sexo llegan a dominar el comportamiento de los jóvenes en este estadio. Los muchachos se preparan para ingresar en el mundo laboral, estudian para obtener un título profesional y procuran lograr cualificaciones educativas adecuadas. En estas actividades son considerablemente apoyados y asistidos por escuelas y otros entes sociales. Las muchachas, por otra parte, reciben mucha menos ayuda en esta esfera. Debido en parte a esto, la mayoría presentan aspiraciones más limitadas y vagas, opinando con frecuencia que el matrimonio las liberará, antes o después, de la necesidad de trabajar. El problema de asegurar a las muchachas idénticas oportunidades de cualificación profesional es sumamente complejo.

    La distinción entre los sexos nos lleva a considerar otro aspecto de la identidad del papel sexual: la posibilidad de que el desarrollo de este tipo de identidad resulte más problemático para las muchachas que para los chicos. El argumento que habitualmente se presenta en apoyo de esta noción apela la intermitencia de la socialización. Hemos de recordar que la discontinuidad, dentro de este contexto, se refiere a la falta de una secuencia ordenada de expectativas de papel, de un estadio al siguiente.

    Podemos concluir esta sección considerando brevemente algunas de las similitudes y diferencias, en cuanto a desarrollo de la identidad, entre los adolescentes de ambos sexos: En cuanto a la autoestima no existe ninguna diferencia entre ambos sexos en dicha dimensión del concepto de sí mismo. En contra de la creencia común, no parecen existir datos demostrativos que nos indiquen que las muchachas tienen niveles de autoestima inferior a los muchachos.

    Algunos autores han llamado la atención sobre la posibilidad de que, mientras que los niveles de autoestima pueden ser similares en ambos sexos, la base de dicha autoestima puede diferir en los hombres y en las mujeres. En una investigación que realizó el psicólogo Carlson se estableció una diferencia entre orientación social y orientación personal en el desarrollo de la identidad y los resultados indicaron que mientras que los chicos se iban preocupando más por metas personales cuando progresaban a través de la adolescencia, las chicas se desarrollaban en dirección opuesta, tendiendo cada vez más a una orientación social según iban haciéndose mayores.

    2.4 Cambios de la adolescencia: Cambios y desarrollo físico en la pubertad:

    La maduración de los órganos sexuales se manifiesta en las mujeres por el comienzo de la menstruación, en los hombres por la producción de semen, y en ambos por el aumento de tamaño de los genitales externos. El rápido desarrollo indica una serie de cambios fisiológicos. Así mismo, durante la pubertad aparecen por primera vez los caracteres sexuales secundarios. En los hombres, se incrementa de forma notable la producción de pelo en ciertas partes del cuerpo, en particular en la zona púbica, en las axilas y en la cara; además, por lo general, la voz cambia y comienza a tener un tono más grave. En las mujeres, también aparece pelo en la región púbica y en las axilas, y los senos empiezan a crecer. El desarrollo acelerado de las glándulas sudoríparas en ambos sexos puede provocar la aparición de acné.

    La pubertad suele ocurrir en los hombres entre los 13 y los 16 años de edad, y en las mujeres entre los 11 y los 14. Ciertas patologías relacionadas con la pubertad son la amenorrea y la pubertad precoz. La primera se caracteriza por una ausencia o cese del flujo menstrual sin que exista embarazo. La segunda es la aparición prematura, en hombres o mujeres, de las características fisiológicas típicas de la pubertad; está causada por trastornos de las secreciones del lóbulo anterior de la hipófisis o adenohipófisis, de las glándulas adrenales o de las gónadas.

    El comienzo de la pubertad está asociado con cambios drásticos en la estatura y en los rasgos físicos. En este momento, la actividad de la hipófisis supone un incremento en la secreción de determinadas hormonas con un efecto fisiológico general. La hormona del crecimiento produce una aceleración del crecimiento que lleva al cuerpo hasta casi su altura y peso adulto en unos dos años. Este rápido crecimiento se produce antes en las mujeres que en los varones, indicando también que las primeras maduran sexualmente antes que los segundos. Las principales hormonas que dirigen estos cambios son los andrógenos masculinos y los estrógenos femeninos. Estos cambios físicos pueden estar relacionados con las modificaciones psicológicas; de hecho, algunos estudios sugieren que los individuos que maduran antes están mejor adaptados que sus contemporáneos que maduran más tarde.

    2.5 Factores Hormonales del Desarrollo

    Los cambios físicos de la pubertad, sin exceptuar la maduración sexual y el crecimiento acelerado, son iniciados por una mayor producción de hormonas activadoras de la glándula pituitaria anterior, situada inmediatamente debajo de la base del encéfalo. La señal para este incremento de la producción hormonal, a su vez, proviene del hipotálamo, parte importante y compleja del encéfalo, pero sólo después de que el hipotálamo ha madurado lo suficiente, lo cual puede ocurrir a edades distintas en diferentes individuos.

    Una de las cosas que probablemente habrán de preocupar tanto a los adolescentes como a sus padres es la de la estatura final. En vista de los persistentes estereotipos masculino y femenino, esto habrá de ocurrirles especialmente a los chicos que son cortos de estatura y a las chicas que tienen miedo de llegar a ser demasiado altas.

    Gran parte de la preocupación de los adolescentes y de sus padres acerca de la estatura final es exagerada, sin embargo, puede ser resultado de una peculiar combinación de relaciones del desarrollo. Sin embargo, los individuos que ya son altos en la preadolescencia tienden a iniciar el crecimiento antes. De tal modo, durante en un tiempo pueden entrar en acción varias fuerzas combinadas engañosas y podrá ofrecerle a una chica que finalmente habrá de ser mucho más alta que sus compañeras. Sin embargo, una vez que tal chica y sus iguales de maduración más tardía hayan pasado el período de crecimiento rápido de la adolescencia, sus posiciones relativas en los tocante a la estatura muy probablemente volverán a ser las de la preadolescencia.

    2.6 Maduración sexual

    Tanto en estatura como en peso, hay notables diferencias individuales por lo que toca a la edad en que comienza la pubertad. Aún cuando hay alguna variación dentro de las series del desarrollo por ejemplo, los senos puede desarrollarse en las chicas antes o después de la aparición del pelo pubiano, el desarrollo físico durante la pubertad y la adolescencia sigue por lo general una progresión bastante ordenada.

    Por ejemplo, el chico crece pronto probablemente desarrollará también el pelo pubiano y otros aspectos de la maduración sexual; la chica que muestra un desarrollo precoz de los senos probablemente tendrá pronto su primera menstruación. Los preadolescentes que muestran un desarrollo avanzado del esqueleto (huesos) probablemente iniciarán el crecimiento y su maduración sexual será precoz también.

    2.7 El Desarrollo Sexual en los Varones

    La primera indicación externa de la inminente maduración sexual en los varones consiste por lo común en un aumento de la tasa de crecimiento de los testículos y del escroto (la estructura en forma de bolsa que contiene a los testículos).

    Puede observarse también el comienzo, aun cuando quizás sea lento, del crecimiento del pelo pubiano hacia las mismas fechas, o poco después. Aproximadamente un año más tarde, una aceleración en el crecimiento del pene acompaña al comienzo del tamaño de la estatura. El pelo axilar (corporal) y facial comúnmente hacen su primera aparición unos 2 años después del comienzo del pelo pubiano, aun cuando la relación es lo suficientemente variable como para que, en algunos chicos, el pelo axilar aparezca realmente primero.

    La voz se hace patentemente más baja o grave, pero lo común, bastante avanzada de la pubertad. En algunos chicos este cambio de voz, es más bien brusco y dramático, en tanto que en otros ocurre tan gradualmente que casi no es perceptible. Durante este proceso, la laringe (o manzana de Adán) aumenta significativamente y las cuerdas vocales que contiene aplican aproximadamente su longitud, con lo cual el tono baja más o menos una octava.

    Así como el comienzo de la menstruación puede ser causa de preocupaciones para la muchacha, la erección incontrolada y la eyaculación inicial pueden sorprender y preocupar a algunos varones púberes. Aun cuando la estimulación genital, así como otras formas de estimulación corporal, es agradable para el niño, la erección y la estimulación genital comúnmente llevan consigo un mayor sentido de apremio sexual durante la pubertad.

    En este período el pene queda tumescente con gran facilidad, ya sea espontáneamente o en respuesta a toda una variedad de estímulos psicosexuales; "visiones provocativas, sonidos, olores, frases o cualquier cosa que sea; el adolescente varón (de menor edad) habita un espacio vital libindinizado, en el que casi todo puede adquirir un significado sexual.

    Aun cuando los varones pueden sentirse orgullosos de su capacidad de erección como símbolo de su naciente virilidad, también pueden sentirse preocupados o molestos por una aparente incapacidad de controlar esta respuesta. Quizás les apene bailar con una muchacha o inclusive el ponerse de pie en un aula para dar una lección. A menudo se preguntan si a los demás muchachos les sucede esa falta de control semejante.

    La eyaculación inicial del fluido seminal puede ser también motivo de preocupación. La primera eyaculación del chico adolescente probablemente ocurrirá al cabo de un año de iniciado el crecimiento en cuanto a la estatura, alrededor de los 14 años, aunque puede ocurrir desde los 11 o demorarse hasta los 16. La primera eyaculación puede producirse a consecuencia de una masturbación o de una emisión nocturna. Un chico que previamente se ha masturbado, con sensaciones acompañantes agradables pero sin eyaculación, podrá pensar que la eyaculación del fluido seminal es nociva o indicativa de que algo anda físicamente mal en él.

    Al parecer, los adolescentes contemporáneos están mejor desarrollados y es menos probable que les preocupen tales sucesos del desarrollo como son las menstruación o las emisiones nocturnas que a los jóvenes de generaciones anteriores. No obstante, muchos jóvenes, de cualquiera de los sexos, especialmente en los primeros años de la adolescencia, no reciben instrucción adecuada de parte de sus padres, las escuelas o sus iguales y se torturan a sí mismos con miedos innecesarios.

    2.8 El Desarrollo Sexual en las Muchachas

    En la mujeres, el comienzo de la elevación del seno (el llamado período del botón en el desarrollo del pecho) suele ser la primera señal de madurez sexual, aun cuando en cerca de una tercera parte de las niñas puede antecederla la aparición de pelo en el pubis.

    El crecimiento del útero y de la vagina ocurre simultáneamente con el desarrollo del seno y también se agranda, los labios y el clítoris. La menarquía (es decir, la edad a que comienza la menstruación) se produce relativamente tarde en la serie de desarrollo, y caso invariable después de que el crecimiento en cuanto a estatura ha comenzado a frenarse.

    Frecuentemente hay un período que puede durar de un año a un año y medio después del comienzo de la menstruación, durante el cual la chica adolescente no es capaz aún fisiológicamente de concebir. De manera semejante, los chicos son capaces de tener relaciones sexuales mucho antes de la aparición de espermatozoides vivos.

    Para la muchacha adolescente, la menstruación es mucho más que un simple reajuste fisiológico. Es un símbolo de madurez sexual, de su estatus futuro como mujer. Porque las reacciones de una chica a la menstruación pueden generalizarse ampliamente, tiene importancia capital que su experiencia inicial sea lo más buena posible.

    Muchas chichas esperan serenamente el comienzo de la menstruación y algunas lo interpretan orgullosamente, como señal de un ascenso de rango. Por desgracia, sin embargo, muchas otras toman negativamente este fenómeno normal de su desarrollo. En varios estudios una clara mayoría de muchachas que todavía no menstruaban, o que ya lo hacían, interpretaron los efectos de la menstruación como negativos o, en el mejor de los casos, como neutrales.

    2.9 Cambios psicológicos: Desarrollo sexual:

    Los cambios físicos que ocurren en la pubertad son los responsables de la aparición del instinto sexual. En esta etapa su satisfacción es complicada, debido tanto a los numerosos tabúes sociales, como a la ausencia de los conocimientos adecuados acerca de la sexualidad. Sin embargo, a partir de la década de 1960, la actividad sexual entre los adolescentes se ha incrementado. Por otro lado, algunos adolescentes no están interesados o no tienen información acerca de los métodos de control de natalidad o los síntomas de las enfermedades de transmisión sexual. Como consecuencia de esto, el número de muchachas que tienen hijos a esta edad y la incidencia de las enfermedades venéreas está aumentando.

    Los cambios de actitudes y comportamiento sexual, han de tener inevitablemente efectos en el desarrollo del adolescente, así como en la adaptación personal. Los jóvenes no sólo deben afrontar sus propios cambios en la maduración, sino también una confusa falta de consecuencias en los puntos de vista de los adultos y una ausencia de cualquier género de estándar claramente formulable o de código moral de conducta. Tal situación no contribuye a que la vida del adolescente sea más fácil. Los jóvenes tendrían una mayor sensación de seguridad si al menos más adultos de los que ocupan puestos de responsabilidad mostraran interés por estas dificultades y desarrollasen con más frecuencia modos y medios para ayudarles a resolver los problemas asociados al comportamiento sexual. Sin embargo, y con raras excepciones, lo que sucede es más bien lo contrario, al lamentar los mayores la creciente "permisividad" del comportamiento de sus hijos e hijas adolescentes.

    El principal temor de la mayoría de los adultos consiste en que una mayor libertad sexual, asociada sobre todo con la creciente disponibilidad de la "píldora" y una facilidad de acceso a los servicios de aborto para los jóvenes, conducirá al aumento de la promiscuidad (convivencia de personas de sexos y procedencias distintas).

    Hemos visto cómo los cambios en el comportamiento sexual han tenido implicaciones a través de la sociedad. Resulta imposible determinar cómo interactuan las actitudes y la conducta, o decir cuál de éstas precede a la otra. Así, por ejemplo, ¿es que los cambios en la legislación estimulan a los jóvenes a obtener experiencia sexual, o es que tales cambios proporcionan, sencillamente, una estructura que legitima un comportamiento que ya esta sucediendo?. Nadie podría responder a esta pregunta. Es indudable que la disponibilidad de anticonceptivos orales han desempeñado un importante papel para ocasionar cambios, pero no hay que infravalorar a otros factores sociales menos tangibles. Desde el punto de vista del adolescente, hemos visto que, no hay datos demostrativos en favor de que este aumentando la promiscuidad y las relaciones sexuales casuales entre los jóvenes. Sin embargo, la existencia de medios anticonceptivos, aunque han reducido algunos problemas, han creado otros a su vez. Las presiones sociales para obtener experiencia sexual resultan difíciles de resistir y pueden ser causa de muchos conflictos personales. Los métodos anticonceptivos utilizados en la actualidad, distan mucho de ser perfectos y bastantes adolescentes pasan por la dura experiencia de descubrirlo por sí mismos, pese a los mitos que abundan en la s películas y en la literatura. Por último, el aumento de oportunidades para la actividad sexual crea dilemas morales y éticos sumamente complejos y difíciles de tratar. Por ello resulta esencial una educación sexual que proporcione una buena información, que no se limite simplemente a comunicar hechos biológicos.

    2.10 Desarrollo intelectual: Efectos del crecimiento mental durante la adolescencia

    Las capacidades cognoscitivas del joven o de la joven siguen desarrollándose también, lo mismo cuantitativa que cualitativamente, durante los años de la adolescencia. La importancia de los cambios que tienen lugar durante este período, sobre todo la aparición de la etapa de las operaciones formales, mal podría sobreestimarse.

    Estos cambios desempeñan un papel decisivo en lo que respecta a ayudar al adolescente a encarar las demandas creciente complejas, en materia de educación y de vocación, que se le hacen. Sería virtualmente imposible dominar temas académicos tales como el cálculo o el uso de metáforas en poesía, sin un elevado nivel de pensamiento abstracto; sin poseer la capacidad que Piaget ha llamado de las operaciones de segundo grado, o capacidad de pensar acerca de aseveraciones que no guardan relación con objetos reales del mundo.

    Nuevas reflexiones, sin embargo, nos harán ver que muchos otros aspectos del desarrollo adolescente dependen también de los adelantos cognoscitivos realizados durante este período. Estos cambios cognoscitivos influyen fuertemente en la modificaciones del carácter de las relaciones padres-hijos, en las nacientes características de la personalidad y en los mecanismos de defensa psicológica, en la planeación de las futuras metas educativas y vocacionales, en las crecientes preocupaciones por los valores sociales, políticos y personales, e incluso en el sentido que se va desarrollando de la identidad personal.

    Uno de los aspectos más importantes de la aparición del pensamiento operacional formal es la capacidad de tomar en consideración hipótesis o proposiciones teóricas que se apartan de los acontecimientos inmediatamente observables.

    La personalidad de un individuo se ve afectada por la conducta que no es mas que las manifestaciones visibles del comportamiento, juzgadas según el grado en que dichas actuaciones se conforman a las normas y costumbres del grupo social. Así se habla de buena conducta" o "mala conducta", según el nivel de adecuación del comportamiento de los individuos a los mencionados parámetros.

    Sin embargo, los padres, los educadores y todas las personas que tienen a su cargo la tarea de formar y guiar a las jóvenes generaciones, deben profundizar más en el conocimiento de estos aspectos para tener una mejor comprensión del complejo mecanismo del comportamiento humano. Una definición bastante amplia de la conducta la describe como: "Todo aquello que hacemos, sentimos y pensamos". Esta definición, a pesar de su aparente sencillez, abarca tres campos básicos: actividades motrices, actividades intelectuales y reacciones emocionales.

    Los aspectos motrices incluyen: el comportamiento relativo al desarrollo físico, las reacciones posturales, la coordinación neuromuscular y ciertas aptitudes específicas como: prensión, locomoción y manipulación. Esta categoría comprende también adaptaciones de carácter perceptual manual, verbal y de orientación.

    La actividad intelectual se refiere a la capacidad del individuo para acomodarse a nuevas situaciones, servirse de las experiencias pasadas para trazarse nuevos esquemas conceptuales y realizar abstracciones.

    La conducta social concierne a las relaciones con los demás individuos y las reacciones ante los estímulos culturales. Abarca el lenguaje, la vida doméstica, la interacción social y la adaptación a los convencionalismos de la comunidad.

    Karl y William Smith citados por Sánchez Hidalgo ofrecen otra definición de conducta, en la forma siguiente: "respuestas de un organismo vivo a su medio; adaptaciones que realiza un individuo a las condiciones y cambios del mundo que le rodea"

    El individuo reacciona ante tres clases de estímulos: los que provienen del medio externo (frío, luz, calor, sonido, presión y otros); los que se originan en su medio interno (indispensables para mantener la homeostasis, o sea

    la tendencia del organismo o mantener un estado interno constante) y las exigencias del medio social (presiones familiares, influencias culturales y raciales, grupos nacionales, actividades de recreación, de trabajo y otros).

    Las personas, en su vivir cotidiano, responden constantemente a los estímulos de los medios externo, interno y social. Como el individuo tiene la capacidad de recordar y de aprender, los acontecimientos pasados y las experiencias actuales afectan sus respuestas. La conducta es, pues, la adaptación al medio, ya sea modificando las actuaciones, cambiando las condiciones del estímulo o transformando el ambiente.

    En las definiciones planteadas, se observa que la conducta tiene una fase objetiva y una fase subjetiva, lo que complica considerablemente cualquier estudio que se trate de efectuar en relación con un caso específico. La fase objetiva es aquella que se percibe fácilmente, debido a que presenta manifestaciones exteriores. La fase subjetiva es el móvil interior o subyacente que, muchas veces, ni siquiera la persona afectada puede definir con claridad.

    Los móviles interiores o impulsos subyacentes son los que hacen que el tratamiento de la conducta que se aparta de las normas que la sociedad considera deseables; se torne difícil en múltiples ocasiones.

    El hombre ha intentado, a través de los tiempos, descubrir, en primer lugar, la explicación del mundo físico; y en segundo lugar, una explicación de sí mismo. Ambas investigaciones han sido llevadas hacia adelante, en virtud de dos tipos de esfuerzos que se han realizado en el tiempo y que corresponden a dos grandes etapas del conocimiento humano: la primera, caracterizada por la intuición y las explicaciones racionales; y la segunda, determinada por el advenimiento del método científico, una aplicación sistemática de observaciones y experimentos, que establecen las explicaciones sobre la base de hechos comprobables.

    Sin embargo, a pesar del desarrollo de la ciencia, muchas consideraciones sobre la naturaleza de la conducta humana constituyen todavía motivo de especulación. Hasta las últimas décadas del pasado siglo se impuso la tendencia de explicar la delincuencia, o cualquier otra forma de desajuste social, como resultado de una perversión innata del ser humano. En los primeros años de este siglo la conducta humana se atribuía a los instintos, es decir, a patrones no aprendidos de la conducta.

    Los modernos aportes de la Psicología y de la Sociología han permitido llegar a la conclusión de que toda personalidad está regida por la conducta humana. No hay conducta sin causa y, por lo tanto, existe una explicación para cada forma de conducirse. Hay actos cuya explicación salta a la vista, pero no siempre el individuo es capaz de explicar su conducta. En esos casos, la persona ignora cuáles son las presiones que determinan su manera de proceder.

    Los móviles que establecen las necesidades, impulsos, tendencias, valores, intereses apreciaciones y actuaciones de los individuos, son el resultado de la interacción de diversos elementos entre los que se cuentan: los factores físicos, fisiológicos y psíquicos que componen la herencia biológica; y factores mesológicos, que proceden de la influencia del ambiente en que el individuo crece y se educa.

    Durante la adolescencia no se producen cambios radicales en las funciones intelectuales, sino que la capacidad para entender problemas complejos se desarrolla gradualmente. El psicólogo francés Jean Piaget y B. Inhelder, investigaron en su obra "De la lógica del niño a la lógica adolescente", cómo en la adolescencia se pasa del estadio de las operaciones concretas al estado formal.

    Mientras que el niño sólo es capaz de pensar, manipular objetos, pensar sobre contenidos concretos y utilizar una lógica elemental (clasificación, numeración), el adolescente alcanza el último estadio de la inteligencia, el pensamiento abstracto.

    Entre las características funcionales del pensamiento formal suelen citarse las siguientes:

    - Apertura al mundo de lo posible: el adolescente descubre que la vida tiene muchas posibilidades más allá de su experiencia personal. Puede distinguir entre lo real y lo posible, probar hipótesis, trabajar con pensamientos abstractos. De niño podía amar a los padres y odiar a las cucarachas, ahora se puede amar la libertad y odiar la discriminación.

    - Pensamiento lógico: el pensamiento formal se basa en proposiciones, no en realidades. Un adolescente es capaz de realizar inferencias o deducciones lógicas sin necesidad de tener en cuenta los datos concretos. Por ejemplo "todo A es B" es equivalente a "todo B es A".

    - Posibilita el razonamiento hipotético-deductivo: imaginemos un péndulo, un objeto que cuelga de una cuerda. podemos cambiar la longitud de la cuerda, el peso del objeto, la altura desde la que cuelga o la cantidad de fuerza que usamos para empujarlo. De estos cuatro, ¿qué factor o factores determinan la velocidad con que el péndulo se balancea?. Si queremos resolver este problema tenemos que utilizar el razonamiento hipótetico-deductivo. Este método consiste en establecer una hipótesis, deducir consecuencias y comprobarlas o verificarlas mediante la experimentación. Finalmente debemos interpretar los resultados de las sucesivas comprobaciones, rechazando las hipótesis falsas. El adolescente es capaz de deducir conclusiones no sólo basadas en la observación de la realidad, sino también a partir de hipótesis. En el problema anterior, la única variable que determina la velocidad del péndulo es la longitud de la cuerda.

    - Pensamiento egocéntrico: esta forma de pensar, típica del adolescente, se caracteriza porque se concede un gran poder a la reflexión y a la abstracción. Tiende a supervalorar las ideas como agente de cambio social, se cree que el mundo debe adaptarse a sus ideas y no ideas a la realidad.

    Además, al adolescente cuesta diferenciar entre su punto de vista y el de su grupo social y, a menudo, cree que lo que piensa o le preocupa es similar a los pensamientos y preocupaciones de los demás.

    Abrirse a otros puntos de vista servirá al adolescente en su desarrollo social para poder participar de forma efectiva en la sociedad. Alcanzará el equilibrio cuando comprenda que la función de la reflexión no es contradecir, sino predecir e interpretar la experiencia.

    2.11 Desarrollo emocional:

    En estos últimos años se ha manifestado un considerable interés por un aspecto particular del desarrollo cognitivo: el pensamiento moral. Aquí han sido también las ideas de Piaget las que han servido a modo de trampolín para las posteriores reflexiones de este tema y, aunque se han expuesto diversas teorías para explicar el desarrollo de los conceptos de moralidad en los niños, el enfoque "cognitivo-evolutivo" de Piaget y Kohlberg es indudablemente más adecuado para la adolescencia que ningún otro. En su trabajo acerca del juicio moral del niño, Piaget ha descrito dos estadios principales del pensamiento moral. El primero, al cual designo como realismo moral, se refiere a un periodo durante el cual los niños de corta edad establecen juicios sobre una base objetiva calculando, por ejemplo, la cuantía total de los daños que ha causado. Así un niño que rompe doce tazas es considerado como más reprobable que otro que tan solo ha roto una, sin importar las circunstancias. El segundo estadio, aplicado habitualmente a los niños cuyas edades oscilan entre los 8 y los 12 años, ha sido descrito como el de la moralidad de cooperación o moralidad de reciprocidad. Durante este estadio, Piaget creía que las decisiones relativas a moralidad se adoptaban habitualmente sobre una base subjetiva, dependiendo con frecuencia de una apreciación de las intenciones, más que las consecuencias.

    Kohlberg ha elaborado el esquema de Piaget, transformándolo en otro compuesto por seis estadios diferentes. Su método consistió en presentar situaciones hipotéticas, que implicaban dilemas morales, a niños o adolescentes de diversas edades, clasificando las respuestas con arreglo a una teoría de los estadios de desarrollo moral.

    Ha descrito los siguientes estadios del desarrollo moral:

    Preconvencional (de 4 a 10 años):

    Estadio 1: "Orientación castigo-obediencia". Los comportamientos que son castigados son considerados malos. Un niño puede pensar: "si no cuido a mi hermana pequeña, quizás me castiguen".

    Estadio 2: "Hedonismo instrumental". Aquí, el niño se porta bien a fin de obtener recompensas, para que le devuelvan los favores que hace, etc. La fórmula latina do ut des (te doy para que me des) ilustra la reciprocidad mutua de las normas morales.

    Convencional (de 10 a 13 años):

    Estadio 3:"Orientación hacía las relaciones interpersonales". La buena conducta es aquella que gusta a los demás o les ayuda y que es aprobada por ellos. ¿Soy un buen chico?.

    Estadio 4: "Mantenimiento del orden social". La buena conducta consiste en cumplir con el propio deber, mostrar respeto a la autoridad y mantener el orden social por el propio bien.

    Post-convencional (a partir de 13 años):

    Estadio 5: "Contrato social y/o orientación de la conciencia". Al comienzo de este estadio, el comportamiento moral tiende a concebirse según derechos y niveles generales establecidos por la sociedad, considerada ésta como un todo, pero más tarde existe una creciente orientación hacia las decisiones íntimas de conciencia.

    Estadio 6: "Orientación según principios éticos universales". En este estadio existe una tendencia a formular principios éticos abstractos y a guiarse por ellos (así como por ejemplo: la igualdad de derechos, la justicia o el respeto a todos los seres humanos).

    El psicólogo estadounidense G. Stanley Hall afirmó que la adolescencia es un periodo de estrés emocional producido por los cambios psicológicos importantes y rápidos que se producen en la pubertad. Sin embargo, los estudios de la antropóloga estadounidense Margaret Mead mostraron que el estrés emocional es evitable, aunque está determinado por motivos culturales. Sus conclusiones se basan en la variación existente en distintas culturas respecto a las dificultades en la etapa de transición desde la niñez hasta la condición de adulto. El psicólogo estadounidense de origen alemán Erik Erikson entiende el desarrollo como un proceso psicosocial que continúa a lo largo de toda la vida.

    El objetivo psicosocial del adolescente es la evolución desde una persona dependiente hasta otra independiente, cuya identidad le permita relacionarse con otros de un modo autónomo. La aparición de problemas emocionales es muy frecuente entre los adolescentes.

    2.12 El desarrollo de la conducta social:

    ¿Cómo se pueden hacer nuevos amigos?. ¿Por qué hay personas con miedo a hablar en público?. ¿Por qué hay personas a quienes nadie les levanta la voz y otras son humilladas y despreciadas?.

    Sabemos que el ser humano es social. Comunicarnos e interactuar con los demás es una de nuestras actividades cotidianas. Sin embargo, existen grandes diferencias entre las habilidades de unas personas y otras. Así, algunos médicos y profesores saben mucho de sus respectivas profesiones, pero interáctuan y se comunican mal con sus pacientes y estudiantes por falta de habilidades sociales.

    Las habilidades sociales (HS) son las conductas o destrezas específicas que ejecutamos en nuestras relaciones interpersonales, por ejemplo cuando hacemos nuevas amistades o nos negamos a una petición. Según V: Caballo, las HS tienen estas características:

    - Nadie nace sabiendo relacionarse con los demás; las HS requieren aprendizaje, ya sea instruccional o por experiencia directa.

    - Las HS contienen componentes motores observables (la conducta gestual), emocionales y afectivos (ansiedad o alegría) y cognitivos (percepción social, autolenguaje)

    - Las HS son una característica de la conducta, no de las personas; son estilos de respuestas específicas a situaciones concretas. La competencia social de una persona varia a través de las situaciones.

    Las relaciones interpersonales son importantes para el desarrollo y el funcionamiento psicológico de cada individuo. Para desarrollar nuestras relaciones es necesario mejorar nuestras conductas y tener pensamientos y sentimientos asertivos, muy diferentes de las tradicionales conductas pasivas y agresivas.

    2.13 Conducta pasiva:

    La conducta pasiva es propia de personas que no expresan sus sentimientos y pensamientos, y si lo hacen es con falta de confianza o de forma autoderrotista. También muestran conductas no verbales acordes con su falta de asertividad: evitación de la mirada, postura corporal tensa o nerviosismo.

    La persona pasiva tiene dificultades en el manejo de sus problemas personales porque los demás no le respetan, evita tener contacto con otras personas por miedo a los conflictos y, a menudo, se siente incomprendida o manipulada. Esto puede conducirle a tener una visión negativa de sí mismo, baja autoestima, y sentimientos de inferioridad o culpa por no saber defender sus derechos.

    2.14 Conducta asertiva:

    La conducta asertiva consiste en expresar las necesidades, derechos u opiniones sin avasallar o violar los derechos de otros. Una persona asertiva manifiesta sus pensamientos y sentimientos en cada momento y su conducta no verbal, la mirada o la expresión facial, se corresponde con su expresión verbal.

    2.15 Conducta agresiva:

    La conducta agresiva implica la defensa de los derechos, pensamientos o sentimientos personales sin tener en cuenta a los demás. La conducta agresiva puede ser directa, con insultos y amenazas, o indirecta, mediante murmuraciones maliciosas acerca de otras personas.

    Las personas agresivas son temidas por los demás porque tratan de minimizar o dominar a quienes les rodean, quieren conseguir sus deseos a cualquier precio, sólo valoran sus pensamientos y consideran estúpidos a quienes piensan de forma diferente.

    2.16 Factores que Inciden en la Personalidad

    Toda personalidad tiene factores que la ocasionan, por lo tanto es importante conocerlos para poder orientar al adolescente, ya que a esta edad lo que más le preocupa es su apariencia física.

    Los cambios que observamos actualmente en el ambiente socioeconómico afectan considerablemente el desarrollo, el comportamiento del hombre de su familia y de todo grupo social.

    En la escuela, algunas situaciones desconciertan al educador que debe enfrentar y manejar educandos que evidencian trastornos de personalidad. Estos adolescentes poco a poco se van convirtiendo en seres apáticos, descontentos, agresivos, tímidos, exhibicionistas, nerviosos; y hasta llegan a sufrir ciertos defectos físicos (visuales, auditivos) y desajustes emocionales con limitadas posibilidades de aprendizaje presentando en el aula problemas de conducta.

    Debemos ser muy cautelosos al formular juicios valorati- vos sobre el comportamiento del ser humano procurando que los mismos no posean valoraciones prejuiciadas desde distintas perspectivas:

    El enfoque biofísico se refiere al trastorno orgánico; el enfoque psicoanalítico se presenta cuando hay problemas psíquicos dentro del individuo (disturbios emocionales); el enfoque conductual pone énfasis en las normas de conducta que se aprenden. Dentro del enfoque educativo podemos decir que el desajuste de una conducta es el trastorno en el desarrollo emocional manifestando sentimientos de hostilidad, inadaptación, desconfianza y otros.

    Es importante que el educador, ante los problemas de conducta realice un diagnóstico de las posibles causas de dichos problemas, para poder aplicar cualquier procedimiento que influyan sobre los mismos de una manera racional y aceptable. De esta forma orienta al estudiante y nunca reprime ni prohíbe ni castiga ya que no sería la mejor actitud ejecutada por el educador.

    El alumno es un ser en pleno desarrollo evolutivo por lo cual las normas de conducta que se establezcan tienen importancia vital, ya que de ello dependerá lo que el individuo habrá de ser en el futuro.

    En el aprendizaje del niño influyen factores exógenos o sea lo que le rodea exteriormente y los factores endógenos, es decir lo que el individuo internaliza. De la intensidad en que intervengan estos factores se determinarán los problemas de aprendizaje que presentará el estudiante en diversas etapas de su vida.

    Los nuevos ideales de la educación y el desarrollo de una filosofía de la vida que reconoce la importancia de los derechos individuales se han cambiado para transformar básicamente el significado de la disciplina como una fase de proceso educativo.

    Lo esencial de la disciplina, como aspecto educativo, es que los educandos adquieran formas de actuación adecuadas a la convivencia social y a la organización conveniente para el trabajo.

    El aprendizaje será efectivo y continuo sólo cuando la actividad educativa esté de acuerdo con las capacidades, necesidades e intereses de los educandos para ello el maestro tendrá que graduar; clasificar y adecuar el contenido y las experiencias de aprendizaje.

    Les enseñará a los niños cómo profundizar y ampliar sus intereses; cuando les dé la oportunidad de compartir su propio aprendizaje, no sólo se sentirán orgullosos de las satisfacciones logradas, que recordarán y aplicarán lo aprendido sino que disminuirán los problemas disciplinarios.

    La calidad de la disciplina en el aula dependerá por lo regular de lo que el maestro hace o deja de hacer mientras imparte y comparte su enseñanza en la clase. Lo que haga el maestro con una clase entera, o aun con un solo estudiante delante de la clase afectará a menudo la disciplina del grupo entero.

    • LA MADUREZ

    3.1 El funcionamiento sensorial y psicomotor

    El tipico adulto joven de 20 a los 40 años tiene buena salud sus habilidades físicas y sensoriales son generalmente excelentes

    El funcionamiento intelectual esta generalmente en un nivel muy alto en los adultos jóvenes

    El problema del desarrollo moral en la mujer ha sido explorado por Carol Gilligan, quien propone que la mujer tiene preocupaciones y perspectivas que no han sido profundizadas en la teoría y en la investigación de Kohlberg. Mientras los hombres tienden a pensar mas, acerca de la justicia y la igualdad, las mujeres se preocupan mas por las responsabilidades con gente especifica.

    3.2 La experiencia de la universidad

    La experiencia de la universidad afecta el intelecto y la personalidad, cuando los estudiantes universitarios cuestionan presunciones y valores sostenidos por largo tiempo.

    En el pasado, las niñas frecuentemente trabajaban mejor que los, muchachos en la escuela elemental y en

    la secundaria pero este cuadro tiende a cambiar en el nivel universitario. Hoy, mas mujeres van a la universidad Y obtienen grados avanzados. Sin embargo, las áreas de estudio de los hombres y de las mujeres todavía difieren marcadamente.

    3.3 El desarrollo de una carrera

    • El desarrollo de la carrera es importante durante la vida adulta joven. Los trabajadores jóvenes están menos comprometidos con su trabajo presente que los trabajadores más viejos.

    • Las familias con dos salarios, en las cuales ambos esposos trabajan fuera del hogar, han Llegado a ser más prevalecientes. Tanto la sociedad como las parejas que trabajan tienden a efectuar cambios para aliviar el estrés asociado con las demandas potencialmente conflictivas del trabajo y de la familia.

    • Las mujeres, al igual que lo-, hombres, trabajan por una variedad de razones -para ganar dinero, para lograr reconocimiento, y para satisfacer necesidades personales- Las mujeres tienden a ganar menos que los hombres y, aunque mas mujeres están consiguiendo mejores trabajos que en las décadas anteriores, la mayoría de ellas todavía están desempeñando trabajos con bajos salarios. Hoy un número creciente de mujeres esta adelantando carreras en los negocios, leyes, medicina y otras dominadas por los hombres.

    3.4 Desarrollo de la personalidad en la edad adulta

    Los estudios, sobre los adultos muestran que el desarrollo continua durante toda la vida. En la edad adulta temprana, la gente se desarrolla a medida que enfrenta los problemas de abandonar el hogar de sus padres, decidir que carrera estudiar, establecer relaciones, familias y metas para la vida.

    Dos perspectivas importantes en la edad adulta son el modelo de crisis normativa y el modelo de programación de eventos.

    El modelo de crisis normativa, ejemplificado por los; trabajos de Erikson, Vaillant y Levinson, propone que, hay un plan fundamental inherente para el desarrollo humano y que durante cada parte del periodo de vida la gente debe tratar con una crisis o tarea particular.

    La sexta crisis psicológica de Erikson es la intimidad versus el aislamiento. Para desarrollarse exitosamente, según Erikson, los adultos jóvenes deben fusionar su identidad en una relación heterosexual intima y estrecha que Ileve a la procreación. Los resultados negativos que pueden producirse durante este periodo son el ensimismamiento y el aislamiento

    En el estudio, Grant de los hombres de la Universidad de Harvard, Vaillant encontró que los hombres que utilizaban defensas 'maduras' eran mis exitosos en muchas formas que los que utilizaban tecnicas de adaptación menos maduras. Este estudio también revelo un periodo de consolidación de carrera que caracterizaba a los hombres de 30 a' los 40 años.

    Según Levinson, el objetivo del desarrollo de los adultos es establecer la estructura de vida. En sus estudios sobre el hombre, Levinson encontró periodos de transición y periodos de estabilidad alternados durante toda la edad adulta. Sus cuatro fases de la edad adulta temprana son la 'transición del adulto joven (17 a 22 años), el ingreso la estructura de vida para la edad adulta temprana (22 a 28 años), la transición de los 30 años (28 a 33 años) y la estructura de vida culminante para la edad adulta temprana (33 a 40 años).

    Dos influencias importantes durante la edad adulta temprana son un. consejero y el sueño propio.

    3.5 Teoría e investigación de la crisis normativa

    Algunas características de la personalidad permanecen estables en la edad adulta, pero el crecimiento y el cambio realmente ocurren en La gente de edad intermedia tiende a volverse mis introspectiva, y ambos sexos tienden a adoptar características que están Épicamente asociadas con el otro sexo.

    La séptima crisis psicosocial de Erikson, que ocurre durante la edad intermedia, es la generatividad versus el estancamiento. La persona generativa se preocupa por establecer y guiar a la generación venidera. Alguien que fracasa en desarrollar un sentido de generatividad padece de estancamiento, autoindulgencia y, posiblemente, invalidez física psicológica.

    Extendiéndose sobre los conceptos de Erikson, Peck especificó cuatro desarrollos psicológicos críticos para la adaptación exitosa durante la edad intermedia: valoración de la sabiduría versus valoración de las capacidades físicas; socializar versus sexualizar; flexibilidad emocional versus empobrecimiento emocional, y flexibilidad mental versus rigidez mental.

    El estudio Grant de los hombres de la Universidad de Harvard (reportado por Vaillant) y el estudio de Levinson de 40 biólogos masculinos, novelistas, ejecutivos de negocios y trabajadores de fabricas señalan que el principio de los cuarenta es una época de transición potencialmente estresante. Alguna gente experimenta "crisis", a pesar de que la mitad de vida no necesariamente señala una crisis.

    Los periodos de la edad adulta intermedia de Levinson incluyen la transición de la mitad de la vida (40 a 45 años), el ingreso a la estructura de vida para la edad adulta intermedia (45 a 50 años), la transición de los 50 años (50 a 55 años), la estructura de vida culminante para la edad adulta intermedia (55 a 60 años) y la transición de la etapa de la edad adulta (60 a 65 años).

    Debido a que el estudio Grant y las investigaciones de Levinson se centraron principalmente en los .hombres blancos privilegiados nacidos en los años 20 6 30, sus resultados pueden no aplicarse a las mujeres, a las gente no blanca y a los miembros de otros grupos y a otras culturas. La universalidad de las fases de desarrollo asociadas con la edad, en general, y de la crisis de la mitad de la vida, en particular, es cuestionable.

    A investigación de la crisis normativa en las mujeres de edad intermedia indica que las mujeres, también, atraviesan por cambios de la mitad de la vida pero sus subsecuentes vidas se hallan menos establecidas que las de los hombres.

    3.6 Relaciones personales y programación de eventos

    El modelo de programación de eventos señala que el desarrollo depende de la ocurrencia y programación eventos importantes. los cuales, a menudo, son cambios que suceden en las relaciones.

    Las investigaciones sobre la calidad del matrimonio en la edad intermedia son inconclusas. El patrón mas preválente parece ser una caída en la satisfacción matrimonial durante los años de crianza de los hijos seguido por una relación mejorada. después de que los hijos se van de casa.

    Los factores rnas importantes en la longevidad, del matrimonio parecen ser los sentimientos positivos hacia el cónyuges, un compromiso de matrimonio por toda la vida y los objetivos y metas compartidos

    Las parejas de edad intermedia de hoy en día participan en relaciones sexuales mas frecuentemente y demas diversas maneras que su contraparte en el pasado. La compatibilidad sexual no es el factor mas importante en un matrimonio feliz, pero la actividad y la satisfacción sexual pueden, y a menudo lo hacen, continuar durante la edad intermedia y las edades de adulto Y mas avanzadas.

    Los vínculos con hermanos a menudo se vuelven mas estrechos durante la edad intermedia.

    La gente de edad intermedia tiende a emplear menos tiempo y energía para desarrollar amistades que los que emplean los adultes mas jóvenes, puesto que dedican sus energías a la familia, al trabajo y a asegurarse para la jubilación.

    Los padres de adolescentes necesitan llegar a un acuerdo con la pérdida de control sobre la vida de sus hijos.

    Los años pospaternales --cuando los hijos se han ido-- están, a menudo, entre los mas felices.

    El vació del nido" puede ser estresante, sin embargo, para los padres que no se han involucrado en la crianza de sus hijos, para los padres cuyos hijos no se han vuelto independientes cuando se esperaba, y para las madres que han dejado de prepararse para el evento.

    Actualmente, mAs adultos jóvenes están viviendo con sus padres, a menudo por razones económicas. El conflicto entre las dos generaciones puede poner dificultades en el matrimonio de los padres.

    Los padres de edad intermedia tienden a permanecer involucrados con sus hijos adultos jóvenes y a continuar dándoles rnas de lo que reciben de ellos.

    Las emocionales que los hombres y, de nuevo, los amigos mis íntimos de la gente eran de su mismo sexo. Sin embargo, los hombres y las mujeres de esta muestra que apoyaban las, actitudes no convencionales tenían mas en común entre si que con la gente del mismo sexo que era convenconal en sus creencias y comportamientos.

    El investigador definió la no convencionalidad desde el punto de vista del deseo de influir en el cambio, buscar placer o mayor felicidad y ejercer mas control sobre la vida de uno, asi como una completa satisfacción con la vida, combinada con la disposición de tomar riesgos. Los hombres y mujeres que encaja en esta descripción tienen mas amigos de los dos sexos. y revelan mas de si mismos a sus amigos que los que no encajan. Los amigos de los dos sexos son importantes para ellos, pero también lo es una parte de soledad: no necesitan estar con otras personas todo el tiempo (R. R. Befl, -f981).

    Amistades de la pareja. La gente recién casada a menudo encuentra que a uno no le interesan las amistades de los días de soltero del otro, y después tiene que decidir si ver a sus amigos, separadamente, si tolerara los amigos mutuos, a si puede lograr algún tipo de arreglo. La gente puede hacer amigos coma parejas -un nuevo elemento que hace mas compleja la formación de amistades-. Muy a menudo, la gente disfruta la amistad de un miembro del matrimonio, Pero no la -del otro. Aun en una sociedad orientada hacia la pareja, es difícil ver a uno sin el otro. Muchas parejas solucionan este problema permitiendo una clase de "licencia" Para las amistades de pareja. Esto es, no esperan el mismo nivel de intimidad que buscarían en una amistad individual. La amistad satisface sus necesidades de involucrarse con otras personas diferentes de si mismos y sus familias, les permite evitar el aislamiento y verse mutuamente en situaciones externas, y ofrece una fuente extra de estimulo Para cada pareja (Leefeldt y Callenbach, - 1979).

    Los lazos formados en la edad adulta temprana tanto con los amigos como con la familia, a menudo perduraran durante la edad intermedia y la vejez, y los cambios que experimenta en sus años mas maduros afectan estas relaciones.

    La edad adulta intermedia es una época, de reevaluación. No hay un. único, determinante biológico o una señal de comportamiento que denote el comienzo de la edad intermedia. En este libro, la edad intermedia se define como el período que va desde los 40 hasta los 65 años.

    3.7 Cambios físicos

    Los adultos de edad intermedia experimentan. algunos descensos en las habilidades sensorias y las habilidades motrices complejas, pero pueden compensarlos con ayudas tales como las gafas y con la aplicación de la experiencia y el discernimiento.

    La menopausia, la cesación de la menstruación y la habilidad reproductora en las mujeres, típicamente ocurre alrededor de los 50 años. Adelgazamiento del revestimiento vaginal y disfunción urinaria. La osteoporosis, una condición en la que los huesos se vuelven mis delgados y mis susceptibles a fracturas, afecta a una entre cuatro mujeres posmenopáusicas. No hay razón para atribuirle problemas Psicológicos a la menopausia.

    A pesar de que los hombres pueden continuar engendrando hijos hasta avanzada edad, en algunos el periodo critico trae un descenso en la fertilidad y en la frecuencia del orgasmo, un aumento en la impotencia y otros síntomas.

    El "doble estándar del envejecimiento' en la sociedad norteamericana hace que las mujeres (pero no la mayoría de los hombres) parezcan menos deseables a medida que pierden su apariencia juvenil. Para ambos sexos, los problemas de envejecerse se amplia a menudo, al vivir en una sociedad que premia a la juventud.

    3.8 Salud

    La mayoría de la gente de edad intermedia tiene buena salud. Muchos de los problemas de salud que hay son debidos a la perdida de la capacidad de reserva de sistemas del cuerpo particulares, o la habilidad de esos sistemas de aplicar un esfuerzo adicional en épocas de estrés o disfunción.

    A pesar de que las tasas de mortalidad han descendido en las actuales generaciones (especialmente por enfermedad del corazón y ataque apopléjico), las tasas de mortalidad aumentan durante la mitad de vida. En este periodo es probable que la muerte ocurra. mis por causas naturales que por accidentes la muerte son el cáncer, las enfermedades del corazón, los accidentes y los ataques apopléjicos. Como en los; grupos de edades mis jóvenes, las tasas de mortalidad son mis altas para los hombres que para las mujeres y para la gente negra que para la blanca.

    3.9 Aspectos del desarrollo intelectual en la edad adulta intermedia

    El rendimiento en muchas mediciones de la inteligencia se incrementa durante la, edad adulta, especialmente en las habilidades verbales y las tareas que involucran conocimiento almacenado. Sin embargo, es cuestionable que tan adecuadas son estas pruebas de coeficiente intelectual para los adultos.

    Debido a que la gente de edad intermedia puede desempeñarse mas lentamente y no ser tan adaptadas a solucionar problemas, algunas investigaciones señalan que la habilidad de sulucionar problemas prcticos atravez de la experiencia llega a su máximo a la mitad de la vida

    La educación continuada para los adultos es el área de educación en desarrollo mas rápido en los Estados Unidos.

    Los adultos estudian por muchas razones, pero principalmente para mejorar sus destrezas y conocimientos relacionados con el trabajo o para prepararse para un cambio, de carrera.

    Los estudiantes adultos tienden a estar mas motivados, pero menos confiados en si mismos que los estudiantes jóvenes.

    3.10 Trabajo

    Mucha gente de la edad adulta intermedia esta en la cumbre de sus carreras, pero otra se involucra en cambios de carrera que pueden provocarse por el proceso de autoevaluación de la mitad de la vida. Para algunos, las tensiones de trabajo corno el agotamiento, el desempleo y las condiciones de trabajo especificas afectan el bienestar físico y emocional.

    Combinar educación, trabajo y tiempo libre durante la vida puede enriquecerla toda.

    El tipo de trabajo que hacen los adultos afecta el grado en el cual se desarrollan intelectualmente. Parece haber una directa relación entre la complejidad del trabajo que una persona hace y su flexibilidad intelectual.

    Alguna gente hace un trabajo extremadamente creativo en la edad adulta intermedia. Estudios de científicos muestran que la creatividad parece tener que ver mAs con el trabajo lento y esmerado que con la inspiración repentina.

    4. ENVEJECIMIENTO

    En biología, conjunto de modificaciones inevitables e irreversibles que se producen en un organismo con el paso del tiempo, y que finalmente conducen a la muerte. Tales cambios varían considerablemente, en el tiempo y gravedad de los acontecimientos, según las distintas especies, y de un organismo a otro. En el hombre, estas modificaciones comprenden la reducción de la flexibilidad de los tejidos, la pérdida de algunas células nerviosas, el endurecimiento de los vasos sanguíneos, y la disminución general del tono corporal. Los biólogos interesados por el envejecimiento investigan dichos cambios o centran su atención en los déficit e incapacidades corporales que se acumulan con la edad, si bien, éstos parecen ser un resultado más directo de las enfermedades, el estrés, o factores ambientales. No existe ningún consenso científico sobre la verdadera naturaleza del proceso del envejecimiento.

    4.1 TEORÍAS SOBRE EL ENVEJECIMIENTO  

    Aunque la investigación sobre el envejecimiento biológico no está basada en ninguna teoría aceptada universalmente, los estudios genéticos, celulares y fisiológicos han suscitado varias hipótesis. Uno de los conceptos genéticos más importantes, la llamada teoría del error, supone que las alteraciones propias de la edad se deben a la acumulación de errores genéticos aleatorios, o a pequeños errores en la transmisión de información genética. Estos daños o errores reducen o impiden el funcionamiento adecuado de las células.

    En los estudios celulares, la teoría del envejecimiento más conocida está basada en el llamado efecto Hayflick, que recibió el nombre del microbiólogo americano Leonard Hayflick. Éste observó en un cultivo celular, que ciertas células humanas experimentaban sólo un número limitado de divisiones celulares antes de morir. Este hallazgo sugiere que el envejecimiento está programado en el interior de la células, y podría explicar las diferencias que existen en la duración de la vida de las distintas especies animales, así como la longevidad desigual de los distintos sexos en las mismas especies. Por ejemplo, en la especie humana, las mujeres habitualmente viven una media de ocho años más que los varones.

    Las teorías fisiológicas del envejecimiento se centran en los sistemas orgánicos y sus interrelaciones. Por ejemplo, una de las áreas más investigadas en la actualidad es el sistema inmune que protege nuestro organismo de las células extrañas. Una característica de los mamíferos es que su sistema inmune pierde gradualmente su capacidad de enfrentarse a las infecciones y a otras situaciones como el envejecimiento. Como resultado, los anticuerpos que produce el organismo son incapaces de distinguir entre células "amistosas" o "propias", y "enemigas" o "no propias". Actualmente, la mayoría de los expertos consideran que el envejecimiento no es el resultado de un mecanismo aislado sino que comprende un conjunto de fenómenos que actúan en concierto.

    4.2 ASPECTOS SOCIALES Y DEL COMPORTAMIENTO  

    El proceso del envejecimiento humano debe ser considerado también en el contexto de sociedades complejas sujetas a grandes variaciones. La forma en la que la población envejece no está totalmente determinada por la biología, también está influida por las circunstancias sociales y el ambiente individual. En consecuencia, el envejecimiento se contempla cada vez más como un proceso que incluye aspectos culturales y psicosociales. Además, en lugar de limitarse exclusivamente a la etapa de la vejez, su estudio se está extendiendo a todo el periodo vital.

    El conocimiento adquirido a través de los estudios sociológicos y del comportamiento, está contribuyendo a disipar algunos de los mitos establecidos acerca del carácter inevitable del proceso del envejecimiento. Un ejemplo es la creencia de que la inteligencia alcanza su nivel máximo en la adolescencia, deteriorándose a partir de entonces; otro es el que se refiere al inicio del descenso irreversible de la actividad sexual en la mitad de la vida, y sin embargo, actualmente sabemos que ésta se mantiene incluso durante los últimos años.

    Ya que el proceso del envejecimiento no es inalterable, los estudiosos del comportamiento están buscando formas que puedan modificarlo. Por ejemplo, se han encontrado ciertas técnicas de ayuda para evitar la pérdida de memoria a corto plazo que experimentan algunos ancianos. Se ha establecido un sistema de ayuda en el hogar como medida para favorecer la vida independiente de los pacientes, consiguiendo en ellos niveles de actividad superiores, incluso en algunos casos que se consideraban irrecuperables. También se ha comprobado que los problemas nutricionales derivados de la disminución de los sentidos del gusto y el olfato, son fácilmente resueltos con simples cambios en la condimentación de los alimentos; además, están siendo perfeccionados los medios técnicos que permitan aliviar los problemas visuales y auditivos de la vejez.

    4.3 Aspectos históricos:

    Para todos nosotros, el envejecer es una situación ambigua, no logramos reconocerla como parte de un continuo de nuestra propia vida, en donde nacemos, crecemos y morimos. Tenemos dificultad en aceptar el envejecimiento y para ello nos protejemos con una serie de mecanismos psicológicos, decimos que existe pero que está muy lejos de nosotros; es como cuando nos enteramos de un accidente, sabemos que existen pero "eso" no nos va a pasar a nosotros.

    En otras culturas no occidentales el proceso de envejecer se enfoca de distintas maneras: por ejemplo, los chinos ven la vida como un continuo circulas en que se nace, se muere y se vuelve a nacer. Hay sociedades en que se preparan para nunca envejecer, mientras en otros sitios los ancianos son venerados por que representan la sabiduría y experiencia del pueblo.

    Durante la historia muchos científicos y filósofos han estudiado la vejez. Cicerón fue uno de los primeros hombres en hacer un trabajo sobre el psiquismo del anciano, por otro lado, Galeno es el primer científico en analizar la vejez no como una enfermedad sino como un estado fisiológico del organismo. En el ultimo tiempo hombres como el francés Quirol han descrito cosas como la demencia senil, junto con la fisiología y fisiopatología del anciano (hecho descrito por un médico suizo).

    4.4 Psicología normal:

    Freud distingue tres aspectos de la personalidad:

    Yo: es el "árbitro" que equilibra al superyo y al ello, con la realidad.

    Superyo: Es la prohibición instantánea de la conciencia frente al deseo de cometer un acto "no permitido". Existe por que nuestros padres y profesores se encargaron de crearlo. Es externo a nosotros, es la moral que se nos enseña en el colegio y dentro de la familia. Se crea de afuera hacia adentro.

    Ello: Es el inconsciente, es una fuerza incontrolable que no tiene tiempo, ni moral, ni orden. Existe porque quiere darse el gusto de existir. Su mayor expresión es el sueño, actúa día y noche, pero en el día el superyo lo limita

    Estos tres aspectos forman el aparato psíquico para enfrentarnos a la realidad.

    La idea es que estos tres aspectos bien equilibrados nos permiten enfrentar la realidad sin angustia. Por ejemplo, si el ello (inconsciente) tiene un deseo que nosotros no satisfacemos por acción del superyo, nos queda la angustia de haber pensado algo "malo" además de la frustración. Esta angustia se neutraliza con ayuda del yo y los distintos mecanismos defensivos que este utiliza.

    4.5 Psicología del anciano:

    Cuando nos llega un paciente anciano no solo debemos hacer una anamnesis y examinarlo, debemos analizar su contexto bio-psico-social, donde vive, con quien vive, es casado, viudo, trabaja o es jubilado, etc. Hay que analizar el contexto en el que aparece la enfermedad.

    Una persona anciana se enfrenta a una disminución de su energía, tanto biológica como física, con un aumento de las exigencias. Ya no logra cruzar la calle con la misma agilidad de antaño, ni puede correr detrás de una micro. Con las respuestas psicológicas pasa lo mismo, el anciano tiene que vivir muchos cambios (aumente la exigencia) pero su energía psíquica dada por el yo ha declinado, ya no es capaz de neutralizar la angustia y la frustración. Por eso el anciano prioriza algunas respuestas con carácter de urgente en detrimento de otras, no responde al tiro, si no que fragmenta la respuesta.

    En el anciano existe una ANGUSTIA constante producto de un aumento de las exigencias del entorno biopsicosocial y una disminución de la energía psiquica. Al anciano todo le parece amenazador porque se enfrenta a una época en donde aparecen:

    1-. Pérdidas: el anciano comienza por quedarse con el "nido vacío", se van los hijos, se casan. Por orto lado jubila, pierde el trabajo, se le van muriendo los amigos y hasta el cónyuge.

    2-. Ataque: para el anciano todo es una amenaza por que ha perdido su capacidad de adaptación, cualquier cosa es una odisea.

    3-. Restricción: el anciano tiene cosas que ya no puede hacer, muchos deben cuidarse de que comer, tienen limitaciones físicas, etc.

    En todo caso el anciano no necesita pasar por pérdidas, ataques o restricciones para sufrir angustia, basta la sola perspectiva para sentirse amenazados. Todo esto es porque los mecanismos de defensa psicológicos como la negación, la proyección y otros ya no funcionan bien.

    A los 60-65 años es la edad de la jubilación, el problema es que la persona puede seguir trabajando perfectamente. Hay un grupo que sabe lo que va a hacer, pero la gran mayoría (40-60%) ven esa gran cantidad de tiempo libre como una amenaza. Además a las mujeres las jubilan y por debajo pasan el mensaje de que es más débil.

    Antes los ancianos eran venerados, porque representaban la memoria colectiva, tenían un lugar en la sociedad, ahora uno puede adquirir información en forma rápida y fácil con lo que los ancianos quedaron sin esa función. Por otro lado los abuelos tenían la función de cuidar a los nietos pero ahora han sido desplazados por los jardines infantiles a donde los niños van desde su más tierna infancia. Así y todo hay gente que soporta muy bien todos estos cambios.

    Durante la historia se han dado fenómenos que rompen mitos: durante la II guerra mundial los hombres en edad productiva se fueron a la guerra, y la industria quedó en manos de los supuestos estratos más débiles de la sociedad, las mujeres y los ancianos y funcionó perfectamente, e incluso demostraron ser más eficientes y dedicados que los hombres adultos.

    Los países que cuidan bien a sus ancianos son aquellos que cuentan con dinero excedente social.

    Por último quiero contarles que Butler fue quien acuñó el término AGEISM o "viejismo". Butler dice: "El viejismo es un conjunto de perjuicios, estereotipos y discriminaciones que se aplican a los viejos en función de su edad". Butler compara el ageism con el racismo, el sexismo y la discriminación religiosa, pero peor por que ya lo traen los niños. Tiene una raíz muy fina y difícil de objetivar que nosotros mismos creamos pero que algún día nos afectará. Butler dice que esto se debe a que nosotros no podemos concebirnos viejos y que esto nos lleva a no abordar a los ancianos con respeto, porque no reconocemos en ellos nuestro futuro.

    4.6 INVESTIGACIONES ACTUALES

    La comprensión global del proceso del envejecimiento precisa de la combinación de los esfuerzos de científicos psicosociales y biomédicos. Los nuevos métodos de investigación incluyen ensayos clínicos en los estudios biomédicos y análisis estadístico de datos en los estudios a largo plazo. Se presta particular interés a las necesidades nutricionales de la edad, cambios en las reacciones frente a fármacos relacionados con la edad y demencia senil.

    Algunos investigadores también se hacen un gran número de preguntas acerca de cómo pueden afectar al proceso de envejecimiento los cambios sociales, cambios en los hábitos de consumo de tabaco, ejercicio, costumbres dietéticas, fluctuaciones económicas, reformas políticas y nuevas tecnologías.

    4.7 DURACIÓN MEDIA DE VIDA  

    El tiempo máximo de vida es la edad límite que puede alcanzar un individuo de una especie, mientras que la duración media de vida, es el promedio de la expectativa de vida de los individuos de esa especie. Este parámetro refleja la benevolencia relativa del medio, entre otros aspectos.

    El tiempo máximo de vida para la especie humana, que se haya podido comprobar, es de 113 años y ha cambiado muy poco en los últimos siglos. Sin embargo, el periodo medio de vida, ha aumentado considerablemente. En países industrializados como el Reino Unido, se ha pasado de los 35 o 40 años a finales del siglo XVIII hasta los 76 años en la actualidad.

    Los seres humanos tienen el periodo medio de vida más largo de todos los mamíferos. A continuación se muestran datos de algunos animales: elefantes, 70 años; perros, 18 años; gatos, 14 años; caballos, 20 años; ballenas, 50 años; carpas, 30 años; gupies, 5 años; águilas, buhos y loros, 60 años; periquitos, 12 años; y algunas tortugas, 100 años. Los animales con la vida más larga son las tortugas gigantes, con un máximo de hasta 200 años. Algunas plantas, generalmente árboles, viven mucho más tiempo que los animales, por ejemplo la secuoya, que puede vivir más de 3.000 años.

    4..8 TEORÍAS SOBRE LOS LÍMITES DEL PERIODO DE VIDA  

    Una buena parte de los biólogos cree que la duración de la vida de un organismo está determinada y limitada por selección natural. No existe una única teoría que explique por qué los individuos de una generación desaparecen para dejar paso a la siguiente. De acuerdo con la llamada teoría del error, el envejecimiento se debe a la acumulación de pequeños fallos en la información genética, que se acumulan en las células reproductoras. La cantidad de errores acumulados es muy variable. Por ejemplo, el envejecimiento en el hombre es un proceso que lleva muchos años, mientras que en las lampreas un "error catastrófico" provoca la muerte rápida de los tejidos, pocas horas después del desove.

    Según otras teorías, el envejecimiento está programado en el interior de las células de cada organismo. En células de cultivo de seres humanos y otros mamíferos, se ha visto que antes de llegar a la fase de senectud y muerte, se logran 50 transferencias de células hijas a otro medio de cultivo nuevo. Según esta hipótesis, el ritmo al que las células individuales envejecen, determina no sólo el periodo de vida medio de la especie, sino también el de cada sexo (las hembras suelen ser más longevas que los machos).

    Según la teoría inmune del envejecimiento, (véase sistema inmunológico), el organismo va perdiendo paulatinamente la capacidad de la autodefensa ante invasores patógenos y ante sus propias células anómalas. En la especie humana, el timo juega un papel esencial en este sistema, mediante la producción de anticuerpos. En una persona de 50 años, el timo ha perdido gran parte de su volumen y funcionalidad. Los seguidores de esta teoría sostienen que todo el sistema inmunológico pierde la capacidad de distinguir entre lo propio y lo ajeno, y cuando esto ocurre se atacan los prpios tejidos, produciendo lo que se conoce como enfermedades autoinmunes.

    En los pueblos primitivos los etnólogos han realizado estudios de gran interés. Frazer ha señalado que en muchas de esas colectividades primitivas el jefe se veneraba como una encarnación de la divinidad, pero si la edad con sus avances lo iba debilitando y no se encontraba en condiciones de defender con eficiencia su pueblo, entonces recurrían a matarlo antes de que sufriera esa declinación.

    Frazer cita el ejemplo de los viejos de las islas de Fidji que voluntariamente se dan la muerte sin esperar su destino de decrepitud.

    Una colectividad que habita al sur de Sudán procede aún con más crueldad llegando a enterrar vivos a los más ancianos en cuanto muestran signos de debilitamiento.

    En sociedades civilizadas hasta el Siglo XVIII se cumplían ceremonias que tenían por objeto la expulsión de los ancianos del grupo social, lo que se realizaba mediante ficciones.

    En Italia, España y en Francia, el cuarto domingo de cuaresma se hacia el "aserramiento" de una anciana, es decir se fingía aserrar en dos a una anciana real, en ortos casos se quemaban muñecos o maniquíes que representaban a personas seniles.

    Los Ciriones, habitantes de la selva boliviana, que viven en estado salvaje, abandonan y dejan morir a sus viejos, que se convierten en un impedimento para su vida seminómade.

    En Africa, los Fangs, los habitantes de Gabón, los Thongas, de raza Bantú, ubicados en la parte oriental de Africa del Sur, los Chuckees tribu que habita en Siberia, los Boskínanos, los Esquimales, los Hotentotes y los Ojibwos del Canadá observan conductas eliminatorias frente a sus ancianos aunque la muerte la realizan por distintos medios y muchas veces rodeado de determinado ceremonial.

    La China milenaria es quizás el mejor ejemplo de civilización que haya proporcionado a sus personas de edad avanzada el mejor trato y la situación más privilegiada.

    El pueblo judío a través de la Biblia, muestra en general el respeto con el que rodea a la senectud.

    Reviste interés la posición de la civilización griega frente a la vejez por ser ella la que más ha influido en la civilización occidental actual.

    En la mitología griega se señalan ejemplos de antiguos dioses que al envejecer se hicieron malos o perversos suscitando rebeliones que promovieron su sustitución por otros dioses jóvenes.

    Otros poetas como Teognis de Megara y Anacreonte cantaron loas a la juventud y lamentaciones al envejecimiento.

    Los romanos en la Roma antigua, tenían la costumbre de desembarazarse de los ancianos llevándoles al puente para arrojarlos al agua y que murieran ahogados.

    El cristianismo mejoró la condición de las personas de edad avanzada con los principios de su doctrina, sin embargo durante el Bajo Imperio y la Alta Edad Media, los ancianos tenían poco acceso a la vida pública.

    La Edad Media, en general dominada por el ideal caballeresco, se mostró poco favorable con los gerontes.

    En el Siglo XVIII comienza a observarse en Europa un aumento de la población con disminución de la mortalidad en edades tempranas y correlativamente empieza a aumentar la proporción de gerontes.

    Contemporáneamente la actitud de la sociedad frente a la vejez experimentó cambios trascendentales que puede resumirse en una verdadera toma de conciencia y este cambio radica en que en los países desarrollados se presenta un fenómeno demográfico que se conoce con el nombre de envejecimiento de la población, pero tan cargado de consecuencias que algunos lo han denominado la revolución vital del Siglo XXI.

      La persona que envejece cae en un problema metafísico: la angustia de lo que se oculta tras la muerte y que cualquiera que sea la posición que se tome ante este misterio, no tenemos ninguna seguridad de que sea cierta.

    Esa angustia crece cuanto más se acerca el instante del tránsito, cuando puede ocurrir que sujetos escépticos o incrédulos o agnósticos se conviertan en creyentes fervorosos o los que tenían una fe o un credo religiosos se reafirman más, al punto de caer en el misticismo o la beatería.

    Los dos temas constituidos por el morir y la muerte, entran en la categorías de tabúes, si nos hacemos cargo de que la mayoría de nosotros preferimos evitarlos o ignorarlos en las discusiones de la vida diaria.

    Estos temas cobran particular importancia en la senectud y quizás la anormal aversión a los mismos pueda ser disminuida empleando la expresión más neutral como "el estado terminal".

    En algunos casos, este estado se inicia cuando se instala una enfermedad que se sabe de pronóstico fatal, continuado la enfermedad su curso, pero pudiendo la persona darse cuenta del futuro mortal.

    En ortos casos, el estado terminal surge gradualmente cuando la persona se apercibe de que tiene muy acortada su expectativa de vida.

    Por definición, la expectación ulterior de vida en una persona anciana es pequeña y por lo tanto sus probabilidades de morir son elevadas aunque la causa posible de muerte y el tiempo que le resta vivir son inciertas.

    Una persona anciana alcanza el estado terminal cuando se da cuenta que puede morir en cualquier momento por causas naturales y cuando su comportamiento está influido por la significación de este hecho.

    Hay una amplia gama de diferencias individuales que van desde aquella persona que padece crisis emocionales severas ante la perspectiva de morir y las que exhiben una aceptación tranquila o aún humorística de ella.

    Algunos de los efectos del estado terminal, como el dolor, el insomnio, las incontinencias pueden ser más perturbadoras y deprimentes que las perspectivas de morir.

    La vida, considerada como energía sobre la que se basa la existencia de los organismos, constituye en cuanto a su origen y esencia el mayor problema de la biología.

    La vida humana es un bien cuya protección prioriza a la condición humana en el marco del desarrollo histórico de las sociedades y del progreso de su conciencia moral. Es el primero de los derechos humanos que adquiere el hombre por el solo hecho de serio.

    Una filosofía de la vejez debe comenzar por una filosofía del hombre mismo.

    El hombre no puede elegir su tiempo de nacer y de morir, pero tanto el nacimiento como la muerte, dan significado a su vida.

    5. MUERTE

    interrupción irreversible de la vida y proximidad inminente de la muerte. La muerte implica un cambio completo en el estado de un ser vivo, la pérdida de sus características esenciales.

    5.1 FISIOLOGÍA  

    La muerte se produce a diversos niveles. La muerte somática es la que se refiere al organismo considerado como un todo. Generalmente es precedida por la de los órganos, células, y partes de ellas y se reconoce por la interrupción del latido cardiaco, la respiración, los movimientos, los reflejos y la actividad cerebral. El momento exacto de la muerte somática es difícil de determinar, ya que los síntomas de estados transitorios como el coma, desvanecimiento y estupor se parecen mucho a los signos de muerte.

    Tras la muerte somática, se producen varios cambios que sirven para determinar el momento y las circunstancias de la muerte: la frialdad cadavérica, enfriamiento del cuerpo después de la muerte, está determinada principalmente por la temperatura ambiental y por lo general no es de gran ayuda; la rigidez cadavérica, que aparece en los músculos esqueléticos y se inicia entre las cinco y las diez horas posteriores a la muerte y desaparece después de tres o cuatro días; la lividez cadavérica, coloración violácea que aparece en las partes declives del cuerpo, y que es el resultado de la acumulación de sangre. La coagulación de la sangre, así como la autolisis (muerte de las células) se inician al poco tiempo de la muerte. La putrefacción, la descomposición que le sigue, está producida por la acción de enzimas y bacterias.

    La muerte de los órganos se produce a distintos ritmos. Aunque las células cerebrales no pueden sobrevivir durante más de cinco minutos después de la muerte somática, las del corazón lo hacen durante alrededor de quince minutos, y las del riñón cerca de treinta. Por esta razón, los órganos se pueden extraer de un cuerpo recién muerto y ser trasplantados en una persona viva.

    5.2 DEFINICIÓN DE MUERTE  

    El concepto respecto a qué constituye la muerte varía según las diferentes culturas y épocas. En las sociedades occidentales, la muerte se ha considerado tradicionalmente como la separación del alma del cuerpo. En esta creencia, la esencia del ser humano es independiente de las propiedades físicas. Debido a que el alma carece de manifestación corpórea, su partida no puede ser vista, o lo que es lo mismo, ser determinada objetivamente. De aquí que, en esta creencia, se ha determinado el cese de la respiración como el signo de muerte.

    En la actualidad, se cree que la muerte se produce cuando las funciones vitales —la respiración y la circulación (expresada por el latido cardiaco)— se detienen. Sin embargo, este punto de vista ha sido puesto en duda, debido a que los avances médicos han hecho posible que se mantenga la respiración y la función cardiaca mediante métodos artificiales. Por ello, el concepto de muerte cerebral ha ganado aceptación. Según éste, la pérdida irreversible de actividad cerebral es el signo de muerte.

    Incluso, durante los últimos años, este concepto ha sido puesto en tela de juicio, ya que una persona puede perder toda capacidad para ejercer su actividad mental superior y sin embargo mantener las funciones cerebrales inferiores, como la respiración espontánea. Por esta razón, algunas autoridades argumentan que la muerte debe ser considerada como la pérdida de la capacidad para la interacción consciente o social. El signo de muerte según este principio es la ausencia de actividad en los centros cerebrales superiores, principalmente el neocórtex.

    El concepto de muerte en la sociedad es más que un interés académico. La rapidez del progreso de la tecnología médica ha suscitado cuestiones morales e introducido nuevos problemas en la definición legal de muerte. Entre los puntos que se debaten están los siguientes: ¿Quién debe establecer los criterios de muerte?, ¿el médico, las legislaturas, o cada persona por sí misma?, ¿es moral o legalmente permisible adelantar el momento de la muerte interrumpiendo el soporte artificial?, ¿tiene la gente el derecho de solicitar que estas medidas extraordinarias dejen de adoptarse de modo que un individuo pueda morir en paz?, ¿puede el pariente más cercano o el tutor legal actuar en nombre de la persona que agoniza en estas circunstancias? Todas estas cuestiones han adquirido ahora un carácter más urgente ante la aparición de los transplantes de tejidos humanos. La necesidad de órganos debe ser sopesada frente a los derechos del donante que agoniza.

    Como resultado de dichas preguntas, diversos grupos han solicitado el derecho a morir de un individuo, en particular a través del significado legal de testamentos en vida, en los que un sujeto otorga a familiares o figuras legales el derecho a retirar el tratamiento de soporte vital.

    5.3 PSICOLOGÍA DE LA AGONÍA  

    A partir de la década de 1960 se ha prestado de nuevo atención a las necesidades de los pacientes agonizantes y de sus familiares. Los tanatólogos, aquéllos que estudian las circunstancias y las experiencias internas de las personas cercanas a la muerte, han identificado diversos estados que atraviesan las personas que agonizan: rechazo y aislamiento (“¿no, yo no?”), ira, rabia, envidia y resentimiento (“¿por qué yo?”), ofrecimientos (“si soy bueno, ¿podré entonces vivir?”), depresión (“¿qué sentido tiene?”) y resignación. La mayoría de los investigadores piensan que estas fases se producen en un orden impredecible y que se pueden entremezclar con sentimientos de esperanza, angustia y terror.

    Al igual que los pacientes que agonizan, sus amigos y familiares atraviesan estados de rechazo y de resignación. Sin embargo, ellos siguen una secuencia más regular que con frecuencia se inicia antes de que el ser querido fallezca; este dolor anticipado puede ayudar a eliminar angustias posteriores. La fase de desconsuelo que sigue a la muerte es más larga y difícil de soportar si se produce inesperadamente. Durante este periodo, los afectados generalmente lloran, tienen dificultades para dormir y pierden el apetito. Algunos pueden sentirse asustados, enojados, o agraviados al ser abandonados. Después, el dolor puede convertirse en depresión, lo que generalmente ocurre cuando las formas convencionales de apoyo social cesan y la gente deja de ofrecer ayuda y consuelo, pudiendo surgir la soledad. Finalmente, el superviviente empieza a sentirse menos aquejado, recupera energía y reanuda sus relaciones con los demás.

    Los cuidados de un paciente terminal pueden realizarse en el hogar pero habitualmente se llevan a cabo en hospitales o instituciones más especializadas llamadas hospicios. Esta atención requiere cualidades especiales por parte de los médicos y tanatólogos, quienes deben enfrentarse a su propio temor a la muerte para confortar de forma adecuada al sujeto que agoniza. Aunque los médicos no suelen estar de acuerdo, el principio de que los pacientes deben ser informados de que están agonizando tiene hoy en día una gran aceptación. Esto debe efectuarse con tacto y cautela. Muchas personas, incluso los niños, saben cuándo están muriendo; ayudarles a exteriorizarlo evita situaciones fingidas y refuerza la expresión de sentimientos honestos. Una vez recibida la seguridad y confianza, el paciente puede alcanzar una muerte apropiada, digna y serena. Terapeutas preparados o sacerdotes pueden ayudar a conseguirlo permitiendo al paciente hablar acerca de sus sentimientos, pensamientos o recuerdos, o actuando como sustitutos de familiares o amigos que demuestran ansiedad cuando la persona que agoniza habla de la muerte.

    5.4 Percepción de la muerte del infante.

    El desarrollo psicológico del niño lo imposibilita para darse realmente cuenta del fenómeno de la muerte y sus implicaciones. Su aparato psíquico se encuentra en esta etapa centrado en su propia perspectiva y en la realidad vivenciada desde sí mismo, por lo cual su pensamiento presenta las características de egocentrismo y animismo entre otras, que distorsionan sus experiencias en la formación de su realidad configurada particularmente.

    La falta de introspección y la incompleta cimentación de su individualidad, que aún está en desarrollo hacen que la muerte para el niño tenga un significado libre en gran medida de angustia y crueldad, por lo cual difiere de la significación adulta de la muerte. Sin embargo, el niño vivencia el fenecer como un viaje o un abandono, por lo que puede experimentarlo con mucha ansiedad y considerar esta dolorosa separación como un acto de agresividad contra él, ej. "la persona se murió por que no quiere estar conmigo".

    Los niños asocian la muerte principalmente a la pérdida de su objeto amoroso más preciado, su madre, y con ella todas las garantías de cuidado y amor incondicional que solían protegerlo del mundo desconocido y hostil. Todo esto, además de temor le produce ira, pues como ya dijimos, el niño cree que la muerte es una afrenta contra él, dado que el morir es para él dejarse morir sin perder la vida, sino solamente alejándose como en un viaje. A su vez desconocen la posibilidad de su propia muerte dado que ésta constituye algo externo, ajeno, situación en la cual no hay amenaza vital. En este sentido los niños tienden a ver la muerte como algo remoto en cuanto la aversión que les provoca los obliga a alejarla hasta el punto que quede fuera de nuestra realidad. Ellos creen que el que evita la muerte, engañándola, no muere. Esta es una característica de su pensamiento egocéntrico, el cual no le permite entender la muerte por que va más allá de su experiencia personal, y además es consecuencia de que los niños tienen en parte la noción de la inevitabilidad de la muerte, sin embargo, desarrollan defensas psicológicas tales como el pensamiento mágico, para sobreponerse al sentimiento de indefensión que le produce.

    Los psicólogos abocados a la investigación de la ontogénesis de las distintas capacidades a lo largo del desarrollo humano, han realizado diversos trabajos con niños. Ellos en sus distintos estudios encontraron que a los 4 años la idea de muerte es muy limitada, y el hecho de que ésta ocurra o se mencione su concepto no supone una emoción intensa, ni tanto positiva como negativa. Antes de esta edad el niño tiene ciertas nociones ligadas a la muerte, pero éstas se traducen en intuiciones emocionales ligadas a la ausencia de la madre.

    Entre los 5 y los 7 años, los niños comienzan a entender que la muerte es irreversible, universal, o sea que todas las cosas que están vivas inevitablemente tienen que morir, también comprenden que todas las funciones de la vida terminan con la muerte. Según Piaget estas características se desarrollan cuando los niños pasan del pensamiento preoperacional al operacional concreto. Durante esta etapa el niño busca reafirmar su conocimiento objetivo, y vuelca sus esfuerzos al entendimiento de las pautas de su cultura. En este sentido los códigos de significación cultural constituyen una buena base para la elaboración más acabada del concepto de muerte. Las explicaciones fantasticas ya no le son funcionales, pasando de un razonamiento mágico a un pensamiento materialista positivo. Aún más, en esta etapa la muerte adquiere una connotación emocional mucho más intensa para el niño, que comienza a temer la muerte de sus seres queridos. El hecho de morir se tiñe en su mente con las ansiedades de su cultura, y pese a no tener conciencia de la posibilidad objetiva de morir, si reconoce a la muerte como una clara experiencia humana.

    Ya a la edad de 8- 10 años acepta que todos moriremos, asimila con todo realismo el hecho de tener que morir más adelante.

    No todos los autores concuerdan en cuanto al grado de consciencia real que tienen los niños sobre las diferentes dimensiones de éste acontecimiento, y prefieren hablar de etapas no tan marcadas y otorgar un poco más de flexibilidad en el desarrollo de la elaboración de un concepto tan complejo como lo es la muerte. De esta manera hablar de etapas sin referentes en el plano etario es útil para captar la secuencia del desarrollo o formación del concepto. Diversos autores reconocen ésta secuencia de etapas como adecuadas :

    1º etapa en que el niño es incapaz de comprender el problema de la muerte.

    2º etapa en que la muerte se relaciona con una ausencia provisional.

    3º etapa en que la muerte se integra en una imagen del mundo mediante elementos culturales.

    4º etapa en que el niño elabora la idea de su irremediable destrucción.

    El hecho de que la cultura otorgue un espacio dentro de su dinámica donde el dolor y la muerte se resuelvan, mantienen la armonía de su continuidad.

    Una cultura debe estructurar este dolor por que su sentido se configura a través de las historias personales que la atraviesan. El orden y la continuidad de la misma depende de la construcción simbólica de rituales que orienten la identidad de todos los individuos a la conformación de la unidad estructural y funcional de la cultura.

    Ahora bien, basta dar una mirada hacia el interior de nuestra cultura y nos encontramos con la sobreexaltación de la vida, basada en su energía, en su dinámica y en su desarrollo, una cultura que esconde a sus moribundos en hospitales donde no logren infectarnos con la muerte y que reducen las tumbas en los cementerios donde cada domingo cientos de personas caminan sobre los cuerpos de nuestros ancestros que simbólicamente yacen extendidos en el césped. Nuestra cultura no acepta la muerte, la arroja lo más lejos de sí para no entorpecer su funcionamiento. En esta cultura la muerte debe ser un proceso rápido, dado que se ha convertido en un tabú, así como alguna vez lo fue el sexo. Esta situación disminuye las posibilidades de que logremos un duelo verdadero, dado que el duelo negado es el peor de los duelos.

    El niño quiere saber que ocurre cuando está frente a la muerte, busca la respuesta en sus padres quienes no confían en su capacidad de entender la situación, y creyendo protegerlo lo envuelven en un manto de fantasía. Nuestra cultura nos enseña a proteger a nuestros hijos de algo que es tan natural como la vida misma y lo único que logramos es condenarlos a una vida a medias, una vida orientada al absurdo de la imposible eternidad, una ansiedad perpetua, una vida irreal.

    Entonces el niño calla al ver la cara de sus padres timoratos ante la muerte y calla para protegerlos, el sabe que odiamos a la muerte y lo que le espera como herencia es este odio, quien odia la muerte odia a la vida y por lo tanto se odia a sí mismo y vive temiendo.

    Un niño solo requiere expresar sus emociones, sus temores, sus inquietudes, solo requiere de un adulto capaz de escucharlo y saber explicar con palabras simples y sensibles qué es lo que ocurre, sin mentiras. En este sentido la religión puede ser muy beneficiosa, siempre y cuando su acción esté dirigida a resolver los conflictos humanos existenciales en la forma más honesta, evitando la sobreexplotación de artificios y que pueda brindar un soporte espiritual para el niño.

    Desde el punto de vista del psicoanálisis, la muerte es tan poderosa que nuestros impulsos dirigidos a ella constituyen parte de nuestra personalidad. Estos impulsos no son privativos del hombre, dado que operan en todas las criaturas vivientes y tienden a reducir la vida a su materia inerte original, estos impulsos son los responsables de las tendencias destructivas y agresivas. Esto se traduce en que parte de nuestra naturaleza busca la muerte, se dirige a ésta como también se dirige al amor. Esta dualidad posee al niño en su corporalidad y en su psiquis, por eso a temprana edad inician su exploración con la muerte de pequeños seres vivos, buscando la forma para asegurarse a sí mismo su individualidad y su potencia, actuando con superioridad ante estos seres, pero a la vez reteniendo sus impulsos agresivos e identificándose proyectivamente con sus víctimas. Esta experiencia condiciona de manera inevitable una buena parte de las respuestas del niño y su desarrollo cognitivo respecto al concepto de muerte.

    En la medida en que el niño va desarrollando más destrezas tanto en el área biológica, social, cognitiva y emocional el concepto de muerte va evolucionando hacia causas más abstractas, como "enfermedades", "hacerse mayor", etc. el punto de cambio para esta parte del concepto de algo concreto a algo abstracto parece situarse alrededor de los 7 años. A esta edad se produce en el niño un gran temor en cuanto a su salud dado que la relación que establece entre la enfermedad y la muerte lo atormenta cuando él está enfermo, cualquier síntoma; fiebre, catarro, estornudos, etc. le hacen creer que se va a morir.

    Los niños que se ven enfrentado al hecho de la muerte presentan una serie de reacciones, que si bien pueden no darse en un orden específico, ni aparecer todas ellas, si nos sirven para comprender el cómo lo vivencian en general:

    1.  La negación: el niño niega que la muerte haya ocurrido y parece que ésta no le ha afectado. Normalmente esto significa que la pérdida ha sido demasiado grande para él y que sigue pretendiendo que la persona en cuestión está viva.

    2.  Aflicción corporal: la muerte produce en el niño un estado de ansiedad que se expresa en síntomas físicos y/o emocionales.

    3.  Reacciones hostiles contra el difunto: el niño toma la muerte de una persona o animal como una afrenta personal por parte del difunto, que lo ha abandonado.

    4.  Reacciones hostiles hacia otros: el niño, generalmente, culpa a otros de la muerte acaecida.

    5.  Sustitución: el niño rápidamente comienza a buscar el afecto de otros con el fin de sustituir la figura del difunto.

    6.  El niño asume las maneras del difunto, intentando conseguir sus mismas características.

    7.  Idealización: el niño sobrevalora las cosas buenas del difunto y elimina los recuerdos de sus defectos, llegando incluso a falsear los recuerdos respecto al carácter y la vida real del difunto.

    8.  Reacciones de ansiedad y de pánico, preocupándose por quién le cuidará en el futuro.

    9. Reacciones de culpa: el niño puede pensar que la muerte tiene que ver con que «es malo» o ha tenido mal comportamiento, y elaborar a partir de aquí fantasías de muerte.

    El dato esencial es que toda muerte requiere un duelo, y esta es una ley de la naturaleza, dado que si bien la estructura cultural de la vivencia varía, el sentido de la perdida es universal, con distinto matiz connotativo emocional, pero que no obstante revela su cualidad netamente humana.

    El niño debe poder desidentificarse de la causa de la muerte y estar desprovisto de todo deseo de muerte inconsciente (los cuales llevan en sí sentimientos de culpabilidad o remordimiento) además debe elaborar y aceptar a través de su experiencia la propia muerte futura en tanto que destino.

    5.4. Percepción de la muerte del adolescente.

    La adolescencia se expresa en las siguientes necesidades: mayor autonomía, necesidad de estabilidad y seguridad, reconocimiento del grupo de amigos y necesidad de diferenciación. Estos podrían considerarse un buen marcador de la etapa, sin embargo la falta de un hito psicológico que determine el cambio de etapa hace necesario un espacio social de soporte para el adolescente en su lucha por integrar su identidad, este espacio estaría constituido por la familia. La falta de este soporte trae graves consecuencias al adolescente quien ve como se ve absorbido por situaciones que escapan de su control, apareciendo sentimientos de incontrolabilidad ante factores sociales, políticos y económicos para construir un proyecto de vida. Las características de esta etapa hacen del adolescente un ser muy vulnerable a sentimientos ligados a la autodestrucción. La muerte en estos casos puede presentarse como una alternativa favorable en pos de darle fin al dolor psicológico que abruma al adolescente. El considerarse solos, alienados, que no son amados pueden constituir motivos suficientemente fuertes como para elegir extinguirse, para comprender esto es necesario pensar en que el joven está esencialmente volcado hacia las relaciones con otros y su aceptación, por lo que hasta los fracasos académicos adquieren una fuerza desconocida dado que en estas actividades sociales el joven va configurando su autoconcepto. Otros puntos de vista versan sobre el suicidio adolescente no como una fuerza o tendencia a la autodestrucción, sino más bien como una súplica por llamar la atención y pedir ayuda, por lo que prefieren hablar de prevención considerando el mejor modo de hacerlo, el tomar conciencia del cuidado del adolescente y ser sensible a sus peticiones.

    En otro sentido, el adolescente vivencia la muerte como un hecho romántico, entregando su vida por la lucha por ideales, el ejercito, etc. a los jóvenes les importa mucho más la calidad de la vida que la cantidad, este es otro factor que acerca a los jóvenes al suicidio. Dentro de su desarrollo mantienen una idea egocéntrica llamada "fábula personal" la cual les hace creer que pueden tomar cualquier clase de riesgos dado que a ellos jamás les ve a ocurrir nada, manejan imprudentemente, toman decisiones descabelladas, experimentan potentes drogas y formas de placer.

    Cuando los adolescentes se encuentran cara a cara con la muerte reaccionan de maneras sorprendentes y contradictorias, elevando algunos las cuotas de misticismo o religiosidad. O bien otros jóvenes enfermos optan por negar su condición y hablan como si se fuesen a recuperar aunque tienen la certeza de que eso no será así. Sin embargo pese a lo dramático de esta situación y a los problemas que acarrea la utilización de mecanismos de defensa en cuanto a la elaboración e integración de los hechos sin distorsión, la negación y la represión de las emociones constituyen herramientas útiles que ayudan a muchos jóvenes enfermos a tratar y superar este golpe agobiante para sus expectativas de vida. Los jóvenes enfermos por lo general están más enfadados y disgustados que reprimidos. Ocupan mucho menos tiempo en pensar en el suicidio en comparación a adultos de la misma condición, y probablemente están mucho más dispuestos en buscar a alguien a quien culpar.

    Las distintas maneras de reaccionar ante el hecho de la muerte inminente está supeditada en gran medida al estilo de personalidad.

    5.6 Percepción de la muerte en adultos jóvenes.

    Los adultos jóvenes están abocados al término de sus tareas sociales, y se encuentran ansiosos por desarrollar sus planes de vida, para lo cual ya se encuentran capacitados. Su gran tarea es lograr la intimidad para lo cual destinan una no menospreciable cantidad de su tiempo y energía. La muerte es algo lejano, asumido como algo inevitable, sin embargo con una certeza inconsciente de que a uno jamás le va a pasar, comienza la carrera por la consecución de lo que uno pueda llegar a ser, y junto a quienes ame, construir una vida plena de satisfacción.

    Para un individuo que se encuentra en esta etapa de la vida, la aparición de una enfermedad catastrófica se vivencia como algo muy frustrante y difícil de llevar debido a la imposibilidad de conquistar las metas anheladas. Su trabajo no ha valido de nada y esta injusticia lo enfurece, es el paciente más conflictivo y el más lábil emocionalmente, a esto se suma la dificultad del personal que por lo general tiene la misma edad que el paciente para tratar asertivamente a un desahuciado de su mismo grupo etáreo.

    Estos adultos piensan de manera evasiva, rehuyen de la muerte pues es un tema que no les agrada.

    5.7 Percepción de la muerte de un adulto intermedio

    En esta edad se produce la defunción de los padres, y este hecho constituye el motivo por el cual es en esta etapa donde se instala la certeza de la muerte en nuestros corazones, en esta etapa sabemos muy adentro que de veras moriremos. Sin embargo este no es el único dato sobre su condición que recibirá en esta época; los obituarios comenzaran a llenarse con nombres conocidos, los organismos e instituciones enviaran información sobre nuestra condición y se encargará además de hacernos saber que tan aceptados seremos en el mundo en el que supuestamente nosotros (los de esta etapa) tenemos el poder. Los adultos intermedios cambian el referente de su cuenta de edad, pues ahora los días que faltan son mucho menos que los que ya han pasado. Esta sensación de limite impulsa al sujeto a buscar sacarle provecho a lo que le resta de vida, y nace un nuevo ímpetu por hacer mayores cambios en su vida. La evaluación a la que se someten será crucial en cuanto una vida satisfactoria propugna integridad y autoestima, y por el contrario la inconformidad genera desesperanza, frustración y un sentimiento de vacuidad.

    5.8 Percepción de la muerte en ancianos.

    La muerte puede sobrevenir en cualquier etapa de la vida, sin embargo el orden natural supone que se produzca al final del ciclo completo, cuando su cercanía forma ya parte de la experiencia cotidiana. En esta edad casi la mayoría del tiempo está destinada a la solución de asuntos acerca de la muerte y están significativamente menos ansiosos que los adultos intermedios con respecto a la muerte.

    Es necesario considerar que el mundo frente al cual se enfrenta el anciano es un mundo distinto, irreconocible, perturbador, obviamente que nuestra es la responsabilidad de que no le sea hostil. Antes su mundo estaba poblado por determinadas personas que fueron muy significativas en su vida. Con el c de los años todo eso de alguna manera, por no decir literalmente, ha desaparecido. Es probable que los problemas cotidianos de hoy le resulten algo abrumador e inexplicable. Ante esta situación uno puede entender el por qué los abuelos están cansados de la vida, y por qué es tan natural que muchas veces los inunde la tristeza.

    La gran tarea del anciano es reorganizar sus pensamientos y sentimientos para aceptar su propia muerte. Los problemas físicos impiden que el anciano vea las cosas de un modo alentador y placentero, al contrario, esto se suma a la lista de estímulos que lo abandonan a la muerte.

    Cuando la persona ha construido un autoconcepto estable y satisfactorio, y cuando ha sido rodeada de amor logra concebir de manera más tranquila su propia muerte, aceptando este final natural.

    Conclusión

    Como hemos visto en esta investigación el desarrollo humano no es fácil, es un proceso complejo que involucra al hombre como un ser social . Lo mas sobresaliente del desarrollo humano es que el ser humano no lo se desarrolla físicamente sino que en igual medida que avanza por la vida se desarrolla emocional e intelectualmente. En esta investigación tratamos de darle un lugar especial al desarrollo de la personalidad a lo largo de la vida. La personalidad es la preocupación de todo ser humano. La gran importancia de este tema es que el hombre de hoy podrá darse cuenta de sus errores en el aspecto de su personalidad, y también es muy importante para nosotros, ya que nos ayuda a atender los diferentes tipos de problemas que actúan en las personas que habitan en nuestro mundo.

    La importancia que tiene la personalidad es que a través de ella los sicólogos pueden darse cuenta de los diversos tipos de problema o enfermedad que tiene ese individuo y esta es una ciencia muy interesante, porque con ella se aprende los caracteres de cada tipo de persona.

    La evolución que tiene el hombre a través de la vida siempre esta en constante cambio y conflicto, ya que el hombre desea alcanzar una autonomía que le brindara seguridad para afrontar cualquier situación.

    La etapa de mayor conflicto es sin lugar a duda la adolescencia que en esta se sucintan una serie de cambios que afectan a la persona por el resto de su vida .

    " el cuerpo es un combate que se pierde

    pero de que forma se pierde

    de pie o de rodillas"

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    Psicología

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