Educación y Pedagogía


Desarrollo del lenguaje


Introducción

Los seres humanos tenemos una necesidad de comunicarnos, somos seres sociales que estamos en una constante interacción y para esto necesitamos el lenguaje, que viene a ser ese sistema de representación y comunicación que al utilizarlo implica una forma de comportamiento.

El desarrollo del lenguaje por lo tanto, es eje primordial en nuestras vidas, es una etapa que debemos alcanzar y al hacerlo no sólo nos gratifica sino que también nos permite formar parte activa de la sociedad, sentirnos pertenecientes a una cultura.

El desarrollo del lenguaje que se da en los seres humanos desde que nacemos y todos pasamos por las mismas etapas de desarrollo, pero cada quien lo hace a su propio ritmo, según el proceso madurativo.

Este proceso de desarrollo no se da de forma aislada, la familia que es el círculo más cercano al niño o la niña juega un papel importante en su estímulo y desarrollo, de aquí la importancia de compartir con ellos la experiencia de adquisición del lenguaje.

Este trabajo por tanto, viene a dar un panorama general de lo que es el desarrollo del lenguaje, las posiciones teóricas que han surgido sobre el tema, así como una serie de recomendaciones que las familias pueden considerar con la finalidad de fortalecer este proceso y hacer de este una experiencia óptima.

Desarrollo del Lenguaje

Los seres humanos somos seres sociales con necesidades de comunicación, usualmente utilizamos el lenguaje oral para hacerlo, no obstante, existen otras formas de comunicarnos y diferentes tipos de lenguaje.

Desde el campo de la docencia se vuelve trascendental tener claro como se desarrolla el lenguaje dado que las personas con las que trabajamos están en procesos de adquisición del mismo. Sería importante por lo tanto, definir ¿qué es lenguaje? Y tomar esto como un punto de partida.

Lenguaje:

“Lenguaje es un método exclusivamente humano y no instintivo, de comunicar ideas, emociones, deseos por medio de un sistema de símbolos producidos de manera deliberada” (Sapir, 1934)

El lenguaje es un elemento esencial para el pensamiento humano y es un rasgo que nos caracteriza, es por esta razón, que a través de los años ha habido un interés generalizado en realizar estudios referentes al tema. Al respecto, Orlando Terré Camacho apunta cómo la Psicología y otras ciencias han estudiado el lenguaje en sus relaciones de pensamiento y cultura, asimismo, cómo el niño aprende a hablar y las posibles alteraciones en el desarrollo del lenguaje que se pueden llegar a presentar.

Dado lo anterior se puede afirmar que los niños y niñas de todas las culturas llegan a dominar el lenguaje materno y esto implica una serie de condiciones tales como:

  • Ausencia de lesión en los órganos implicados (aparato fonador, sistema auditivo, etc.).

  • Correcto funcionamiento y maduración adecuada del sistema nervioso.

  • Capacidad intelectual.

  • Motivación, es decir, deseo de comunicación con las personas que lo rodean.

  • La intervención del adulto es fundamental, ya que es el responsable de dar un indicio de lenguaje al niño

Evidentemente surge la gran interrogante que ha llevado a que se desarrollen diversas teorías: ¿Cómo se desarrolla el lenguaje?

Las primeras teorías hacían referencia que el niño y la niña aprendían a hablar por repetición de los adultos, sin embargo, se ha demostrado que los primeros enunciados infantiles no son imitaciones sino creaciones originales. En el desarrollo del lenguaje participan muchos factores biológicos y de experiencias, los niños y niñas van a adquirir el lenguaje al desarrollar otras capacidades cognoscitivas en su esfuerzo por dar sentido a lo que escuchan y al buscar patrones y reglas empíricas que permitan resolver lo que es el lenguaje.

De acuerdo con el siguiente cuadro, tomado de la clase de Introducción a los desórdenes del lenguaje I de la profesora Merlyn Sancho, podemos ver cómo se desarrolla el lenguaje en las diferentes edades que tiene el niño y la niña.

Edad

Área del Lenguaje

Área Motora

0-3 meses

Llanto y Sonrisa Social

Succión

3-4 meses

Vocalización

Control de Cuello

4-5 meses

Sonidos Guturales

Sello Labial

5-6 meses

Balbuceo

Control de Caderas

6-9 meses

Primeras Palabras

Posición 4 puntos

9-12 meses

Aumenta el número de palabras considerablemente

Aprende a caminar

12-18 meses

Utiliza Frases

Comienza a correr

18 - 24 meses

Utiliza oraciones simples

Brinca, baja escaleras. Perfecciona Movimientos

24-36 meses

Utiliza oraciones compuestas.

Salta en un pie

36-48 meses

Aumenta vocabulario, concepto de número, color, relaciones espaciales, preposiciones

Empieza a desarrollar motora fina

4 - 5 años

Termina de adquirir fonemas

Aumenta el grado de dificultad del área motora

6 - 7 años

Dominio de todos los fonemas, de la lengua natal. Preparado para la Lectoescritura

Inicia el proceso de Lectoescritura.

De acuerdo con el libro: Desarrollo del niño y el adolescente, de Berk, L, existen etapas en el proceso de adquisición del lenguaje. Antes de que empiecen a hablar los menores se comunican mediante llantos, sonrisas y movimientos corporales. Casi al final del primer año ingresan a lo que los psicólogos llaman la etapa de una palabra.

  • Las primeras palabras: durante los siguientes 3-4 meses los niños y niñas van aumentando lentamente su vocabulario. Luego el léxico crece con rapidez. A los veinte meses el vocabulario incluye 50 palabras.

  • Primeras oraciones: Alrededor de los 18 meses, muchos niños ingresan a la etapa de dos palabras. Es cuando unen palabras en oraciones. Aunque la oración es breve. La semántica puede ser compleja.

  • Aprendizaje de la gramática: Es cuando los niños y niñas comienzan a sobrerregularizar las palabras al aplicar a cualquier situación las reglas gramaticales que conocen, lo que demuestra lo lógicos y racionales que son los menores al intentar asimilar nuevas palabras a sus esquemas.

  • Aprendizaje del vocabulario: Durante la edad preescolar los niños duplican su vocabulario aproximadamente cada seis meses entre los 2 y los 4 años, alrededor de 200 a 2000 palabras. En este período disfrutan de inventar palabras.

Desarrollo del lenguaje en los años escolares

  • Pronunciación: Cundo están en edad escolar la mayoría de los niños y niñas dominan la mayor parte de los sonidos de su idioma materno, aunque todavía les queda algunos por conquistar. Los niños pequeños pueden entender y ser capaces de valerse de muchas palabras, pero suelen utilizar aquellas que les sean más fáciles de pronunciar.

  • Sintaxis: Llegan a dominar los fundamentos del orden de las palabras o sintaxis de su idioma materno rápidamente. Sin embargo, el proceso puede hacerse más lento en las formas complicadas como la voz pasiva.

  • Vocabulario y el significado: En edades escolares el niño debe de aproximadamente a los 6 años de tener un léxico de 8 000 a 14 000 palabras. Entre los nueve y los 11 años agrega 5 000 nuevas palabras a su repertorio.

  • Pragmática: Al ser la pragmática el uso adecuado del lenguaje para la comunicación, los niños y niñas van a demostrar que comprenden cuando emplean oraciones sencillas para dirigirse a otros más pequeños.

  • Conciencia metalingüística: Aproximadamente a los cinco años los niños y niñas empiezan a desarrollar la conciencia metalingüística, lo que significa que si compresión del lenguaje y la forma en que opera se hacen explícitas. El proceso continua durante toda la vida.

De acuerdo con La Didactica de la Lengua en la Educación Infantil, en el capítulo 1: El desarrollo de la comunicación, en el menor se da una comunicación preverbal y verbal.

La comunicación preverbal (prelingüística)

Señala que desde que el bebé nace busca relacionarse con su entorno, sus primeras comunicaciones se dan con la madre y se establecen a través de un vínculo afectivo y éste surge durante la satisfacción de las necesidades del niño, en las que el cuerpo del niño entra en contacto directo con el cuerpo de su madre. Esta relación será imprescindible para el desarrollo de las capacidades comunicativas del bebé que le harán posible comunicarse verbalmente.

Asimismo, el bebé cuenta con predisposiciones para la interacción y esto es gracias a las percepciones que son fuente básica para la obtención y el procesamiento de la información. El llanto y la sonrisa son elementos fundamentales en las primeras formas de comunicarse de los bebés, y reflejan las percepciones.

El desarrollo de la comunicación preverbal se da cuando el niño empieza ha adquirir una serie de significados creados por el grupo cultural al que pertenece lo que permite que comparta un conocimiento y que hayan significados comunes que le permitan comunicar algo nuevo. A estas adquisiciones de experiencias conjuntas se le llama intersubjetividad primaria. Es por esto que surgen:

Las protoconversaciones se dan cuando los bebés instauran un ciclo de interacción entre ellos y la persona que los cuida en la que se establece una alternancia de sonrisas miradas y vocalizaciones. Estas primeras representaciones compartidas permiten al bebé interpretar las palabras y gestos del adulto en el contexto de las rutinas que se estructuran como esquemas mentales de acontecimientos referidos a sus experiencias concretas. Estas relaciones son usualmente triangulares intervienen el niño, el adulto y el objeto y dan paso para que surjan estrategias de comunicación más compleja.

En el desarrollo de la comunicación preverbal se articulan las primeras vocalizaciones que se caracterizan por ser reflejas y universales, entre estas se encuentran:

  • Gorjeos (2 a los 4 meses): posibilitan el establecimiento de las protoconversaciones. Son universales, similares en todos los contextos y producidos por los niños sordos de nacimiento.

  • Laleo (6 meses): el niño o niña comienza a producir cadenas silábicas, reiteradas y largas en la que predominan sonidos de su lengua materna, por ejemplo: papapapapapa, o tatatatata…Estos sonidos articulados implican el funcionamiento de los órganos de fonación.

  • Ecolalia (9 meses): es capaz de reproducir nuevas estructuras silábicas que son usadas en contextos comunicativos. A partir de este punto las producciones fónicas del niño y la niña se parecen cada vez más a las de los adultos

Comunicación verbal (lingüística)

  • 12-18 meses: El niño dice sus primeras palabras y las emplea con un valor de señal, de gesto comunicativo y no tanto de palabra. Hacen referencia a un contexto compartido y tienen una función de frase. Es por esto que se denominan palabra frase o holofrase. Utiliza sobreextensiones que es utilizar una palabra generalizando su significado a objetos de categorías próximas.

  • 20-24 meses: Se acelera el proceso y crece el léxico rápidamente. Hay una necesidad de comunicarse que hace que crezca el vocabulario. Utiliza palabras de todas las categorías gramaticales. Aparece la concordancia entre género y número, se inicia el uso con algunas dificultades, de los artículos demostrativos, posesivos, y pronombres personales y utiliza la forma verbal del infinitivo y del presente. Esto permite las primeras combinaciones de palabras.

  • 3 años: Los niños y niñas pronuncian correctamente la mayoría de los fonemas de su lengua materna, a excepción de los que presentan mayor complejidad (por ejemplo el fonema vibrante compuesto de carro), algunos grupos consonantes como pr o bl o los diptongos. Se expresan con mayor precisión dado que el léxico aumenta constantemente. Usa los pronombres posesivos de la primera y segunda persona. Utiliza los artículos determinados e indeterminados, adjetivos y demostrativos y emplea preposiciones como a, en, de o para. Construye oraciones simples (sujeto -verbo-objeto) aunque no siempre respeta el orden convencional.

  • 4 años: Es la edad del lenguaje egocéntrico. Comprende el discurso descontextualizado del adulto siempre que sea significativo para él y en caso de que no entienda pregunta. Es capaz de explicar algo que le haya sucedido. Pronuncia correctamente la mayoría de los fonemas de su lengua materna. Utiliza oraciones compuestas coordinadas.

  • 5 años: El lenguaje anticipa la acción. Comprenden y se expresan de forma descontextualizada. Narran historias inventadas o de organizar eventos en el pasado, darles un tratamiento lógico y explicarles respetando las convenciones lingüísticas formales. Se interesa por el análisis de la secuencia fónica, básico para el aprendizaje de la lengua escrita.

Los datos anteriores son generalizaciones que se han dado sobre lo que es el desarrollo del lenguaje, no obstante, es necesario entender que todo lo anterior se da gracias a una serie de teorías y propuestas que se han dado con el pasar de los años y que hacen que haya habido tantos avances en la materia.

Según Isabel Guiborg en: La Didáctica de la Lengua en la Educación Infantil, a mediados del siglo XX se inicia un interesante proceso en el ámbito psicológico impulsado por las aportaciones que, desde la filología, se realizan sobre el acto del habla. Estas explicaciones reproducen los grandes temas que centran la mayoría de las discusiones psicológicas: la aportación de la herencia y el medio, y la jerarquía que se establece entre cognición, pensamiento y lenguaje.

AUTOR

TEORÍA

Skinner

Desarrolla la teoría conductista donde explica la adquisición del lenguaje desde el punto de vista del condicionamiento operante. Donde el condicionamiento clásico es la asociación entre estímulos la que refuerza una determinada conducta, en el condicionamiento operante es la misma respuesta la que sirve de reforzamiento. Este autor y sus seguidores consideran que el enlace entre palabra y significado es un vínculo de asociación que se establece a través de percepciones simultáneas y repetidas de determinados sonidos y objetos.

Chomsky

Produce una revolución en la lingüística contemporánea y plantea una alternativa a la teoría conductista.

Resalta el carácter creativo del empleo del lenguaje por lo hablante y afirma que éste puede producir y entender infinitas oraciones que antes no había oído y para ello hace un uso infinito de medios finitos.

Apunta que el ser humano tiene una predisposición innata, o Dispositivo de Adquisición del Lenguaje (DAL) que es específicamente lingüístico y capacita para el aprendizaje de cualquier lengua.

Piaget

Entiende el lenguaje como una posibilidad de representar un significado por medio de un significante.

Considera que el lenguaje tiene una capacidad simbólica: que es la capacidad humana de representarse mentalmente la realidad, así como se manifiesta por el lenguaje se hace también por medio del juego, el dibujo y la imitación diferida.

El lenguaje emerge de la representación mental y ésta es previa a la adquisición de la palabra que permite su evocación. Es una construcción que se produce por medio de la interacción que tiene el niño o niña con el mundo de los objetos.

El lenguaje y el pensamiento van a tener su origen en la inteligencia sensoriomotor.

Plantea que hay dos clasificaciones para el lenguaje:

Lenguaje Egocéntrico: Es egocéntrico, porque el niño habla más que de sí mismo. Se dice que es de repetición o ecolalia ya que el niño repite sílabas o palabras que ha escuchado aunque no tengan gran sentido para él.

  • El monólogo: El niño habla para sí, como si pensase en voz alta. No se dirige a nadie, por lo que estas palabras carecen de función social y sólo sirven para acompañar o reemplazar la acción.

  • El monólogo colectivo: Cada niño asocia al otro su acción o a su pensamiento momentáneo, pero sin preocuparse por ser oído o comprendido realmente. El punto de vista del interlocutor es irrelevante; el interlocutor sólo funciona como incitante, ya que se suma al placer de hablar por hablar el de monologar ante otros.

  • Lenguaje Socializado: El niño busca comunicar realmente su pensamiento, informándole al interlocutor algo que le pueda interesar y que influya en su conducta, lo que puede llevar al intercambio, la discusión o la colaboración.

  • La crítica y la burla: Son las observaciones sobre el trabajo o la conducta de los demás, tienen como fin afirmar la superioridad del yo y denigrar al otro.

  • Las órdenes, ruegos y amenazas: El lenguaje del niño tiene, principalmente, un fin lúdico. Por lo tanto, el intercambio intelectual representado en la información adaptada es mínimo y el resto del lenguaje socializado se ocupa, principalmente, en esta categoría. Si bien las órdenes y amenazas son fáciles de reconocer, es relevante hacer algunas distinciones. Se les denomina "ruegos" a todos los pedidos hechos en forma no interrogativa, dejando los pedidos hechos en forma interrogativa en la categoría preguntas.

  • Las preguntas: La mayoría de las preguntas de niño a niño piden una respuesta así que se les puede considerar dentro del lenguaje socializado, pero hay que tener cuidado con aquellas preguntas que no exigen una respuesta del otro, ya que el niño se le da solo; estas preguntas constituirían monólogo.

  • Las respuestas: Son las respuestas dadas a las preguntas propiamente dichas (con signo de interrogación) y a las órdenes, y no las respuestas dadas a lo largo de los diálogos, que corresponderían a la categoría de "información adaptada". No forman parte del lenguaje espontáneo del niño.

El lenguaje egocéntrico va disminuyendo con la edad. El porcentaje del lenguaje egocéntrico depende de la actividad del niño como de su medio ambiente.

EDADES: Para Piaget en los niños menores de 7 años sólo existe comprensión en la medida que se encuentren esquemas mentales idénticos y preexistentes tanto en el que explica como en el que escucha.

Después de los 7 u 8 años del niño, cuando comienza su verdadera vida social, comienza el verdadero lenguaje

Piaget ha denominado etapa de las operaciones concretas al período que va de los siete a los once años de edad. El niño en esta fase se caracteriza por la habilidad que va adquiriendo con la percepción de los distintos aspectos o dimensiones de una situación y el entendimiento de cómo tales aspectos o dimensiones se relacionan.

Las etapas de Piaget son las siguientes:

  • Etapa sensorio-motora (0 a 24 meses):

Es anterior al lenguaje.

Se contempla la existencia de un período holofrástico, e incluso el final de la misma dada por las primeras manifestaciones simbólicas.

  • Etapa Preoperativa (2 a 7 años):

Los esquemas comienzan a ser simbolizados a través de palabras (habla telegráfica).

La última parte de esta etapa supone el surgimiento de la socialización.

El lenguaje alcanza un grado de desarrollo notorio. Aparición de las primeras oraciones complejas y uso fluido de los componentes verbales.

  • Etapa de Operaciones Concretas (7 a 12 años):

Adquisición de reglas de adaptación social.

Se aprende que es posible transformar la realidad incluso a través del lenguaje.

  • Etapa de Operaciones Formales (12 a 15 años):

Surgen verdaderas reflexiones intuitivas acerca del lenguaje, juicios sobre aceptabilidad y/o gramaticalidad de oraciones tratándose de una intuición consciente.

Jakobson

No está de acuerdo con las etapas, ya que considera que las vocalizaciones en el período prelingüístico no tienen relación con las de las primeras palabras y su subsiguiente desarrollo fonológico.

Observa un período silencioso entre las dos etapas.

Jespersen

Considera el balbuceo como una exploración de los sonidos que hacen los niños, pero el habla como una forma nueva y se trataba de la ejecución de otro tipo de sonidos.

Mowrer

Visión más conductista, considera que el balbuceo estaba compuesto por todos los sonidos posibles de la fonación natural y que debido al contacto con los adultos del entorno, sólo se reforzaban y permanecían los sonidos de las propias lenguas.

Locke

Observó que el 95% de los balbuceos a los 11 meses se basan en 12 consonantes; p,t,k,b,d,g,m,n,s y las semivocales w y j o la aspirada h, y que la estructura CV, generalmente repetida, era predominante.

Barrera Linares

Partiendo de que el hombre nace para hacer uso del lenguaje y construir el pensamiento y que gracias a ello es lo que es, para Linares es más pertinente considerar todo el proceso como un solo y único período en la vida, caracterizado eso si por varios estados particulares:

  • Estado Inicial de interacción con el medio (y reconocimiento del mismo), más o menos pertinente a los tres primeros meses de vida (y aquí la edad no es más que una referencia pedagógica) y asociado a la emisión del llanto y el gorjeo.

  • Estado de activación del Dispositivo para la Adquisición del Lenguaje (DAL), correspondiente a lo que tradicionalmente ha sido considerado como el período de balbuceo.

  • Estado correspondiente a las primeras conformaciones simbólicas de la realidad, a partir de la doble articulación del lenguaje (primeros signos lingüísticos, centrados en la recreación de referentes propios del ambiente físico y de la conducta de los adultos).

  • Estado de la consolidación de la gramática básica de la lengua particular que se está adquiriendo, relacionado con todos los componentes formales y funcionales del lenguaje.

  • Estado de la instauración de las estructuras más complejas de la lengua materna, inherente a los distintos componentes formales y funcionales, pero con particular énfasis en el inicio del dominio de las reglas pragmáticas, generadas sobre la base del incremento de intercambio verbal con miembros de la comunidad lingüística distintos a los del entorno familiar.

  • Estado de consolidación y reajuste de las competencias pragmáticas y discursivas, marcado por un acceso a los niveles más abstractos del lenguaje (formas discursivas variadas y complejas).

Cada estado implica la preparación de las condiciones sociolingüísticas y cognoscitivas requeridas como mínima base para el paso siguiente. Todos serían acumulativos, no excluyentes, ni evitables. También es probable que a partir de del segundo, cada estado se relacione de manera relevante con algún orden discursivo específico.

Vygotsky

Se interesa por la relación que se establece entre lenguaje y pensamiento. Plantea que a lo largo del primer año de vida el lenguaje y el pensamiento se desarrollan por caminos paralelos pero que durante el segundo año de vida se inicia un proceso de convergencia entre lenguaje y pensamiento que produce un cambio cualitativo en las posibilidades de desarrollo y aprendizaje.

Cree que además de un factor biológico el desarrollo humano se produce gracias a la interacción social a través de la cuál se garantiza la educación

Plantea la zona de desarrollo próximo: que delimitan aquellas actividades que el aprendiz no puede realizar solo pero sí con la ayuda y mediación del otro sujeto más capacitado. En este sentido considera el lenguaje como el instrumento ideal de mediación que garantiza la transmisión y la interiorización del conocimiento.

Considera que el lenguaje se origina en le proceso de comunicación y éste empieza antes de que el niño empiece a hablar. Aprender a hablar va a suponer saber usar el lenguaje más que conocer las reglas que lo rigen. Por eso implica regular la conducta del otro e informarlo acerca de intereses, deseos y necesidades. El lenguaje se aprende usándolo.

Ahora bien, como hemos visto la actividad lingüística es un proceso complejo y se encuentra interrelacionada con las demás funciones psíquicas del individuo. Sin embargo, como se dice Orlando Terré Camacho en el libro: Trastornos y alteraciones en el lenguaje infantil. Cualquier desviación del lenguaje repercute en estas funciones, del mismo modo que una alteración de ellas influye en el lenguaje del individuo.

Es aquí que la Terapia del Lenguaje o la Logopedia tiene un papel trascendental en el tratamiento de estos desórdenes ya que trabaja los defectos en el desarrollo del lenguaje, su superación y prevención mediante métodos pedagógicos y educativos.

Algunas de las señales que alertan sobre la posibilidad de un problema en el desarrollo del Lenguaje pueden ser:

El hecho de que un lactante no responda a los sonidos y no vocalice es motivo de inquietud.

Es motivo de preocupación si entre los 12 y los 24 meses el niño presenta algunas de estas características:

  • No utiliza gestos, como señalar o saludar con la mano (12 meses).

  • Prefiere comunicarse a través de gestos en lugar de vocalizar (18 meses).

  • Presenta problemas para imitar sonidos (18 meses).

A los 2 años:

  • Sólo puede imitar el habla o las acciones y no palabras o frases de manera espontánea.

  • Sólo emite algunos sonidos o dice algunas palabras en forma reiterada y no puede utilizar el lenguaje oral para comunicarse más allá de sus necesidades inmediatas.

  • No puede seguir instrucciones sencillas.

  • Tiene un tono de voz fuera de lo común.

  • Comprender lo que dice es más difícil de lo esperado para su edad.

Causas del retraso en el habla y el lenguaje:

Los retrasos en el desarrollo del habla y el lenguaje se deben a muchas causas. Los retrasos en el habla en niños con un desarrollo normal no suelen deberse a problemas en la boca, como complicaciones en la lengua o el paladar (la parte superior de la boca).

Algunos niños con retrasos en el habla, tienen problemas de motricidad en la boca, es decir que existe una comunicación ineficaz en las zonas del cerebro responsables del habla. El niño tiene dificultades para usar la lengua, los labios y la mandíbula para emitir sonidos. El habla puede ser el único problema o éste puede estar acompañado de otros problemas de motricidad, como la dificultad para alimentarse. Los retrasos en el habla también pueden ser indicadores de la presencia de un retraso en el desarrollo más "global" (o general).

Los problemas auditivos suelen estar relacionados con los retrasos en el habla. Por este motivo, es importante que un audiólogo evalúe la audición de los niños con dificultades en el habla. Si un niño presenta dificultades para escuchar, es posible que tenga problemas para comprender, imitar y utilizar el lenguaje.

Terapeuta del Lenguaje

Retomando el libro previamente mencionado de Orlando Terré Camacho, si se llegaran a presentar algunas de las causas citadas el terapeuta de lenguaje debe realizar el examen correspondiente en cada caso y determinar cuándo el trastorno de lenguaje es de patología básica y cuando es consecuencia de factor secundario o acompañante de otras entidades patológicas.

Al realizar una evaluación, el terapista del habla y el lenguaje o foniatra prestará atención a las habilidades de habla y lenguaje del niño dentro del contexto de su desarrollo total. Además de observarlo, el terapista del habla y el lenguaje o foniatra utilizará pruebas y escalas estándar, así como sus conocimientos sobre los logros en el desarrollo del habla y el lenguaje. El terapista del habla y el lenguaje o foniatra también evaluará lo siguiente:

  • Lo que el niño comprende (denominado "lenguaje receptivo").

  • Lo que el niño logra expresar (denominado "lenguaje expresivo").

  • Si el niño intenta comunicarse de otras maneras, como señalar, mover la cabeza, realizar gestos, etc.

  • La motricidad bucal del niño (de qué manera funcionan en conjunto la boca, la lengua, el paladar, etcétera, para hablar, comer y tragar).

  • Si el terapista del habla y el lenguaje o foniatra determina que el niño necesita terapia, la participación de los padres será muy importante. Pueden observar las sesiones de terapia y aprender a participar durante el proceso. El terapista del habla y el lenguaje o foniatra también les mostrará de qué manera pueden trabajar con el niño en la casa para mejorar sus habilidades de habla y lenguaje.

Por supuesto, es posible que el resultado de una evaluación por parte de un terapista del habla y el lenguaje simplemente indique que las expectativas son demasiado elevadas. Tal vez, los materiales educativos que describen las etapas y los logros del desarrollo lo ayuden a ver al niño de forma más realista.

Recomendaciones para la familia:

El desarrollo del habla además de tener presentes las características naturales necesita de la estimulación. La conformación genética de un niño determinará, en parte, su inteligencia y su desarrollo del habla y el lenguaje. No obstante, una gran parte depende del entorno del niño.

Cuando existen problemas de habla, lenguaje, audición o desarrollo, la intervención temprana puede brindar la ayuda que el niño necesita.

Algunas de las recomendaciones para la familia:

  • Pase mucho tiempo comunicándose con su hijo incluso cuando es bebé; háblele, cántele y aliéntelo a imitar sonidos y gestos.

  • Léale a su hijo; comience a hacerlo a los 6 meses. Busque libros con ilustraciones, adecuados para la edad del niño, y que inviten a su hijo a mirar mientras usted nombra las ilustraciones. Intente comenzar con libros en los que el niño pueda imitar movimientos o que presenten texturas que su hijo pueda tocar. Cuando su hijo sea mayor, permítale señalar las imágenes que reconozca e intentar nombrarlas. Después puede leerle poemas infantiles, que serán de gran ayuda por la sonoridad que tienen. Continúe con libros que le permitan al niño predecir lo que ocurrirá. Es probable que su hijo comience a memorizar sus historias favoritas.

  • Aproveche las situaciones de todos los días para reafirmar el habla y el lenguaje de su hijo. Por ejemplo, nombre los alimentos en el supermercado, explíquele lo que hace mientras cocina o limpia una habitación, señale objetos en la casa, y mientras maneja, hágale notar los sonidos que escucha. Hágale preguntas y demuéstrele que está atento a sus respuestas (aunque sea difícil comprenderlas). Emplee un vocabulario sencillo, pero jamás le hable en media lengua o lenguaje infantil.

  • Más allá de la edad de su hijo, la mejor manera de ayudar cuando existe un retraso en el habla y el lenguaje es reconocer y tratar los problemas en forma temprana. Con la terapia adecuada en el momento indicado, su hijo se podrá comunicar mejor con usted y con el resto del mundo.

Conclusiones

Después de realizada la investigación es importante rescatar ciertas ideas que niño y la niña en su infancia va adquirir gradualmente hitos que le permitirán alcanzar el habla lingüística.

Casi todos los niños aprenden del lenguaje a una edad temprana a través del uso, y a lo largo del tiempo, sin necesidad de tener instrucción formal. Por lo tanto, una fuente del aprendizaje es la genética. Los seres humanos nacen para hablar, ellos tienen la habilidad innata para descubrir las reglas del lenguaje que se utiliza a su alrededor, El ambiente en sí mismo es un factor significativo. Los niños aprenden la variedad específica del lenguaje (dialecto) que hablan las personas importantes alrededor de ellos.

Sin embargo, los niños no aprenden por imitación solamente. Nosotros sabemos que los niños analizan por su cuenta las reglas lingüísticas porque ellos hablan de una manera que los adultos nunca usarían. Los niños eventualmente aprenden a usar las formas convencionales del habla a medida que aprenden a distinguir por sí mismos las excepciones en las reglas del lenguaje. Como aprendiendo a caminar, aprender a hablar requiere tiempo para desarrollarse y practica todos los días. La corrección constante de un niño usualmente no ayuda.

Los niños parecen haber nacido no solo para hablar, sino también para interactuar socialmente. Incluso antes de que aprendan a usar palabras, los bebés lloran y gesticulan para comunicar significados; y a menudo ellos entienden el significado de las comunicaciones que emiten otras personas. Por lo tanto, la meta de aprender el lenguaje y de interactuar socialmente no es dominar las reglas, sino hacer conexiones con otras personas y darle sentido a las experiencias.

Tras investigar y conocer las distintas propuestas de las teorías, hemos podido concluir que los seres humanos poseemos una capacidad innata para aprender el lenguaje, pero el desarrollo y formación de éste, sólo será posible si existe un entorno social alrededor del niño y una estimulación apropiada, que le brinde el adecuado input lingüístico para que éste, de modo activo, construya progresivamente su lenguaje.

Bibliografía

Guibourg Isabel, Didáctica de la Lengua en la Educación Infantil. Compendio de Lecturas del curso Artes del Lenguaje en la Educación Inicial I. UCR.

Santa Paula. 2007. Berk, L. (1999) Desarrollo del niño y el adolescente. 4 Ed, Prentice Hall Iberia, Madrid.

Terré Camacho Orlando. Trastornos y Alteraciones en el Lenguaje Infantil. 3era edición. Editorial

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Enviado por:Patricia
Idioma: castellano
País: Costa Rica

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