Pedagogía


Construcción de la pedagogía social: Algunas vías de aproximación


CAPÍTULO 2

LA CONSTRUCCIÓN DE LA PEDAGOGÍA SOCIAL: ALGUNAS VÍAS DE APROXIMACIÓN

1. La pedagogía social como ciencia y disciplina

Conceptualizar el complejo campo de la pedagogía social no es una tarea fácil. Son muchas las cuestiones que precisan ser matizadas para lograr un mínimo de clarificación, como también lo son las diversas variables (sobre el objeto de esta disciplina, sobre sus métodos, sobre su evolución histórica...) que entran en juego en este haz de relaciones que conforman el conocimiento en pedagogía social (en adelante, P.S.). Cuestiones como ¿qué tipo de saber es?, ¿Es o no es una ciencia?; y, si lo es, ¿qué clase de ciencia es?, ¿Cuál o cuáles son su/s objeto/s de estudio?; ¿Y sus métodos específicos de trabajo y de investigación?; ¿qué funciones cumple en el ámbito del saber?; ¿es un saber para formar o/y también para profesionalizar?; ¿qué relaciones tiene este conocimiento teórico con la práctica profesional?...

De ahí que una disciplina tenga «tantas definiciones como diferencias existen de un dominio a otro del conocimiento» (Apostel, 1973).

Una DISCIPLINA es, por tanto, la enseñanza de una CIENCIA. La investigación produce conocimiento (ciencia). Por esta u otras vías, el conocimiento que se obtiene se organiza en disciplinas que son dadas a conocer, como saberes, a través de la enseñanza. Las formas de obtener conocimiento son diversas, lo que le permite a una disciplina ir acumulando información y reorganizando la nueva situación. No hay disciplinas estáticas porque el conocimiento está social y personalmente configurado. La P.S., como disciplina que intenta explicitar la enseñanza de un tipo de conocimiento, está sujeta a estas consideraciones. Recogiendo propuestas y trabajos de los estudiosos en fundamentación epistemológica y disciplinar, y de otros autores preocupados por explicar sus disciplinas (Escolano, 1978; Giugni, 1984) se presentan las siguientes vías como criterio fundamentador: la vía histórica, la vía práctica y la analítica (Ruiz, 199ó; Escarbajal, 199ó).

Son cuestiones apuntadas o sistematizadas con más profundidad por Natorp en sus trabajos sobre pedagogía social.

Análisis de los fundamentos de la P.S. a través del estatuto científico y del objeto de esta ciencia. La educación es un fenómeno social. ¿Qué añade el adjetivo «social» al sustantivo pedagogía? Según él, en realidad, nada. La pedagogía es siempre social, con vocación de práctica comunitaria.

Es justamente esta interacción, cultura-sociedad, el objeto de la P.S.: las condiciones sociales de la cultura y las condiciones culturales de la vida social». Para Natorp, el concepto de educación conduce al de comunidad. Como dice García Morente, intérprete kantiano de Natorp, la educación es, para Natorp, educación para la comunidad» (Morente, 1913).

La pedagogía social quiere dar sólo un método, una perspectiva en la infinita conquista del hombre por el hombre.

2. Los objetivos de la pedagogía social

También en torno al origen, aunque no centrado específicamente en la figura de Natorp, se basa la obra ya clásica, por pionera y sistemática, pedagogía social de J. M. Quintana (1984). Un texto realizado con verdadera oportunidad histórica de quien supo o intuyó por dónde podían caminar las surgientes temáticas educativas y sus retraducciones, como conocimiento teórico-práctico, en nuevas disciplinas. La pedagogía social se refiere al concepto de la tarea educativa social y estatal, en tanto que se realiza fuera de la escuela. (Quintana, 1984, p. 13), como los teóricos defensores de esta disciplina, que puede llegar a proporcionar la sistematización necesaria para intervenir en el amplio y complejo contexto del trabajo social.

Esta concepción binaria de la P.S. como ciencia de la educación social de los individuos y grupos, por una parte, y, por otra, como ayuda, desde una vertiente educativa, a las necesidades humanas que convoca el trabajo social... En «Para la reconstrucción de la pedagogía social» (1989) amplié estas reflexiones con el objetivo de sugerir algunas líneas de investigación que contribuyeran a cubrir las lagunas que aún sigue presentando esta área disciplinar. Quizás nadie se haya percatado como Petrus (1987, 1988) de cómo la P.S. en España va derivando hacia la línea anglosajona de la educación social donde, contra todo esencialismo pedagógico abierto o disfrazado, la educación va fuertemente unida al mundo de los servicios sociales. Muy al contrario, podría constituirse en la vía más sólida de obtención de conocimiento que contribuyera a racionalizar la P.S. Con un presupuesto inicial: llevar a cabo una buena tarea de clarificación sobre lo que son los teóricos (constructores de una ciencia) de la P.S., por una parte, los profesores (enseñanza de esa ciencia) de P.S., por otra y, no necesariamente en última instancia, los educadores sociales (profesionales en este tipo de conocimiento social).

3. La dimensión profesional del conocimiento

La vía práctica puede ir llenando de contenido el área de la P.S. haciendo de esta disciplina una estructura más emergente y dinámica. El trabajo más exhaustivo que a este respecto conozco es el de Petrus, en su enjundiosa colaboración al reading sobre El educador social (Sáez. y. por lo tanto, la vía práctica se presenta en este sentido fructífera como plataforma impulsora de conocimiento (Carr y Kemmis, 198ó). Pero también esta primera cuestión se ha desarrollado en paralelo, asimismo desde el recorrido práctico profesional, a una concepción de la P.S. como campo de conocimiento retraducido en intervenciones de carácter educativo y social (Caride. 1985). Desde la vía práctica, el objeto y el contenido de la P.S. viene determinado por sus ámbitos de intervención (aquí puede haber una respuesta sobre lo que añade el adjetivo «social» al sustantivo, pedagogía) pero éstos, a su vez, van reforzando la vía analítica (síntesis de la, histórica y la práctica), al ir propiciando una traducción de la P.S. como motor de intervención educativa y social, y no sólo como ciencia o disciplina. Como fácilmente puede comprobarse, entiendo la pedagogía social como el resultado de una intervención bien sea de elementos sociales, bien de elementos educativos que persiguen la formación social de los individuos... La pedagogía social estudiaría el papel educador de la sociedad en sentido social y el papel socializador que a su vez propicia la educación: ahora bien, al ser la pedagogía social en sus dos vertientes «Pedagogía, ambos sentidos deben ser retraducidos en normas de acción, o, como supongo, en intervención (1983, pp.171-172), formula el objetivo y los contenidos de la disciplina desde el punto de vista de la acción.

3.1. La pedagogía social y otras ciencias afines

El mismo Colom (1983, 1988) describe en algunos textos las diferencias claves que existen entre la P.S. y la sociología de la educación. Así, ha puesto de relieve el carácter sociológico (Y, por tanto, descriptivo) de la sociología de la educación, y el pedagógico, y por ende, normativo, de la pedagogía social. El hecho de que la educación (en sociología de la educación) sea siempre un fenómeno social y de que el sustantivo pedagogía tenga como adjetivo lo SOCIAL no permite establecer nítidas fronteras entre ambos saberes, ni tampoco configurar el estatuto epistemológico de uno y otro con absoluta autonomía. Se ha buscado, aunque en realidad no con excesiva profundidad, las relaciones entre la P.S. y la teoría de la educación, la psicología social, la filosofía de la educación... y aquellas otras disciplinas sobre las que se apuntaban intereses mutuos, relaciones y entrecruzamientos aun determinado nivel (Santelli. Me refiero al debate teoría-praxis en ciencias de la educación (Pérez Gómez, 1978). El objeto de la P.S. es configurado así como el estudio y la implementación de la educación social en tanto interacción. Un acto social es una unidad de interpretación entre dos o más personas que comparten sus significados (Mead, 1972).

La educación social se concibe así como un proceso de interacción entre personas que libremente deciden llevar a cabo, de modo consensuado, sus respectivas intencionalidades. La vía práctica, como vemos, se muestra fecunda al mostrar cómo los actores sociales comparten significados en una colectividad, De este modo, en el estudio de las acciones no observables de los protagonistas sociales el conocimiento que se va obteniendo es un conocimiento práctico, resultado de la interacción planificada de las personas y no en situaciones de experimentación (la base incondicional del conocimiento objetivo y positivo del modelo científico de la educación) (Sáez, 1989).

Conocimiento práctico que retraducido en teorías nos reenvía continuamente a la práctica con la intención de comprenderla mejor.

De este modo, la vía práctica, al considerar la importancia de la interacción en P.S., no sólo se muestra emergente al clarificar un debate de apariencias puramente analíticas, el debate teoría-praxis en educación, sino que también demuestra la relación existente entre las disciplinas que se preocupan por la interacción (las que existen, por ejemplo, entre la P.S., la psicología social y la sociología interaccionista), propiciando una consideración distinta de la educación social como interacción que ha movilizado, en los últimos años, la pedagogía alemana, importadora de este contexto temático planteado en el mundo anglosajón. Metateórica, porque, aspirando a ser una disciplina de dimensiones teóricas, es consciente de que para dar solidez ala teoría tiene que demandar de la práctica el conocimiento implícito o explícito que ello convoca, una disciplina con una vocación tan práctica, tal es el carácter fundamental de la pedagogía, tiene la obligación de ir construyendo un conocimiento que remita (de modo ordenado y planificado, de acuerdo con objetivos consensuados y con estrategias y métodos de participación) a la práctica de donde surge o debe surgir.

4. La pedagogía como ciencia social

Desde esta perspectiva analítica se han llevado a efecto en nuestro país una serie de tesis y tesinas, de proyectos docentes y de investigación... 1. Se ha comparado la pedagogía social con otras ciencias humanas: la psicología social, la sociología, la teoría de la educación...

Al fin y al cabo, tal saber es valorizado como área de conocimiento, pero, en este caso, también como un espacio curricular que va a contribuir, con la enseñanza de ese conocimiento, ala formación ya la capacitación de los profesionales de la educación social (Núñez, 1992). La P.S. en tanto praxis educativa es praxis tecnológica con finalidad social. Entiende por P.S. «la ciencia educativa del trabajo social». es el sistema de teorías científicas, tecnologías y teorías tecnológicas sobre fenómenos o clases de fenómenos que responden al concepto de educación terciaria (1973. p. 156).

Es una ciencia, pues, de carácter tecnológico; es decir, objetiva y neutra -y, por lo tanto, no debe contar con el elemento ideológico que contamina las estrategias educativas con el cuadro de valores que emponzoñan la acción-, que debe ir acumulando conocimiento sobre ese fenómeno social conocido como trabajo social en su dimensión pedagógica (Radl, 1984; Kisnerman, 1985; Alayon, 1981).

Toda acción educativa y social se inserta o se explica, explícita o implícitamente, en supuestos teóricos. La configuración del objeto de la P.S. (la educación social de la persona y las dimensiones pedagógicas del trabajo social) viene determinada por la concepción teórica que mantiene cada paradigma de la disciplina.

Para qué sirve dicho conocimiento. Es, pues, la casilla que determina el carácter y la tradición (empírico-analítica, interactiva e interpretativa y crítica) que ha ido configurando la P.S. como ciencia y como, disciplina (Sáez, 1988, 1989). Como es sabido, la construcción del conocimiento que se quiere científico es resultado de la investigación (Escudero, 1985; Delorme, 1982). La investigación en educación social también es diversa, acorde con la naturaleza de los métodos utilizados para la obtención de información y con la consideración que se le da al objeto que se trata de investigar (Pérez Serrano, 1990; Reason y Rowan, 1981). Los fenómenos sociales de la educación social están protagonizados por personas, a investigar para profundizar los fenómenos de educación social de los que son actores los seres humanos. Los apartados A y B son también secuenciales y explican el modo como los investigadores en educación social elaboran la información. De ahí que la investigación nos provea del conocimiento del que se han de servir los profesionales de la educación social para mejorar la situación en donde éstos actúan. Los tecnólogos de la educación social, que se dedican a aplicar el conocimiento obtenido por científicos expertos en esta labor, conciben la práctica como una tecnología y procuran intervenir en ella para modificarla con el armazón teórico que previamente se han preparado a través de la investigación empírica. Los últimos cuadros del esquema recogen las dimensiones profesionales, las metas formativas para las que se organiza el conocimiento en disciplinas. Como ciencia y disciplina la P.S. es el campo de conocimiento que organizado como ciencia en una disciplina -que dará cuenta de ella a través de la enseñanza- tiene como objetivo la formación y preparación de los profesionales de la educación social con la intención de que tales conocimientos remitan a la práctica y contribuyan a mejorarla. A mediados de la década de los ochenta, con motivo de un texto que escribí sobre Las Ciencias Sociales y la educación del sentido critico: Evolución y metodología (Sáez y González. 1985), propusimos, como resultado de la reflexión sobre la evolución del conocimiento en ciencias sociales y de una serie de lecturas que específicamente, sobre la cuestión de las disciplinas efectuamos -Apostel (1973); Piaget (1970, 1973); Kedrov (1973); Boisot (1973); Heckhausen (1973) formulamos, repito, una serie de criterios diferenciadores para determinar las distancias entre las disciplinas y el nivel de identidad de cada una de ellas.

A) El dominio material de las disciplinas o serie de objetos sobre los que una disciplina versa no es un problema para su identificación. tienen todas por objeto el estudio del lenguaje. La P.S., la psicología social, la sociología de la educación, etc.,

B) Dominio de estudio. La educación social de las personas es el objeto genérico de la P.S. Pero también se ha propuesto, a través de la publicación pública o de la defensa de proyectos, la inadaptación social (March, 1988; Orte, 1995), la integración social y el estudio de la marginación como objetos específicos a estudiar para una posterior estrategia educativa que tiene intención de mejorar. En tanto la educación social constituye -genéricamente y en sus diversas manifestaciones- el objeto de la P.S., y el citado objeto es de naturaleza social, resulta, en consecuencia pertinente que para su estudio se acuda a metodologías que presenten o recojan esta caracterización. Este hecho reclama otro tipo de métodos. La P.S. aún no ha recorrido ni contrastado las posibilidades que puede ofrecer a los trabajadores de la educación social el modelo de «formación en acción» de los profesionales de la práctica. Sensibilidad que, si se sigue el hilo de los tiempos, se mostrará en el modo en que los profesionales de la educación social colaboren con el mundo de los Servicios Sociales, sus naturales ámbitos de intervención social (Petrus, 1992).




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Enviado por:Armando
Idioma: castellano
País: España

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