Música


Clasicismo


Encuadre cronológico:

Clasicismo (arte y literatura)

Este término se emplea, en sentido estricto, para designar el arte y la literatura de Grecia y Roma, o cualquier manifestación similar en su estilo o calidad.

Clasicismo

En sentido estricto, un clásico es cualquier obra literaria de la antigüedad griega o romana que haya sobresalido por su excelencia artística y que se considere canon, modelo o referencia. Así, por ejemplo, se consideran clásicas las obras del poeta romano Virgilio o del dramaturgo griego Sófocles, y no la de otros escritores que hayan vivido y escrito en esa época y espacio. El periodo clásico griego abarca desde el 500 al 320 a.C., mientras que la edad de oro romana se sitúa entre el 70 a.C. y el año 18 de nuestra era.

Entre sus principales cualidades se encuentra el control consciente en el desarrollo de los temas y el sentido de ordenamiento racional y proporción formal.

Los órdenes clásicos de la arquitectura griega son el dórico, el jónico y el corintio, a los que se añaden los romanos compuesto y toscano.

Acerca del término clásico

Los términos clásico y clasicismo describen el estilo, el periodo histórico o la calidad de una obra literaria, artística o musical. Originalmente se asociaban con la cultura griega y romana, pero con el paso del tiempo también se usan para determinar los periodos clásicos, entendidos, como excelsos, de cualquier cultura. A mediados del siglo XVIII, la escena político-social europea dio origen a una nueva edad musical adecuada a las nuevas ideas iluministas (actitud de apertura mental, un método de pensamiento cientificista que cuestiona todo y pone en duda hasta los valores considerados más sagrados, todo merece ser estudiado y analizado: apertura mental del hombre).

El espíritu revolucionario y la efervescencia política tuvieron un impacto directo sobre la música, en el sentido de que la música de masas se volvió un ideal y la obligación de toda una generación de nuevos compositores, quienes comenzaban a encontrar demasiada rígidas las formas barrocas, caracterizadas por la desmesura, la extravagancia y la abundancia de motivos distintos dentro de la misma obra. Esta reacción a favor de una mayor espontaneidad, tomó diferentes aspectos en Francia, Alemania e Italia. En el primero se enfatizó la textura homofónica; en lugar de una continuidad musical, los compositores franceses compusieron combinaciones de piezas separadas. La típica composición era corta y programada.

Así se puede hablar de literatura clásica española para referirse a autores como Garcilaso de la Vega (renacentista) o Luis de Góngora (barroco). Clásicos son también en la literatura italiana Dante (siglos XIII y XIV) y Ludovico Ariosto (siglos XV y XVI). En la literatura inglesa, el cetro del clasicismo correspondería a William Shakespeare (XVI y principios del XVII); en la francesa a Moliere, Jean Baptiste Racine y Pierre Corneille, los tres de bien entrado el siglo XVII, y en la rusa el periodo clásico está representado por el realismo del siglo XIX con Fiódor Dostoievski o Liev Tolstói.

El período clásico llega a su clímax con la Escuela de Viena: Joseph Haydn, Wolfgang Amadeus Mozart y Ludwig von Beethoven.

Por lo tanto, queda claro que el término clásico se emplea principalmente para referirse al estilo o periodo de una obra creativa, reconocida como modelo artístico o como creación de relevancia y valor cultural intemporales.

Lo neoclásico

Se utiliza el término neoclásico para referirse al momento histórico en que tras el barroco se impuso la estética de los antiguos griegos y romanos y la del renacimiento más clásico, y corresponde, más o menos y según los lugares y autores, al siglo XVIII. Posteriormente, se usan indistintamente los términos clásico y neoclásico —más el primero— para referirse a cualquier estilo, periodo u obra de calidad equiparables a los modelos griegos y romanos.

Los periodos más importantes en el pensamiento y el arte occidental en los que se siguieron los principios estilísticos y estéticos del arte y la literatura de la antigüedad griega o romana fueron el renacimiento y la Ilustración, una época especialmente rica en Francia, donde se desarrolló un clasicismo literario ejemplificado en las obras de los escritores Pierre Corneille y Jean-Baptiste Racine y los filósofos René Descartes y Blaise Pascal.

El neoclasicismo español del siglo XVIII fue bastante modesto, ya que entraron en liza dos corrientes contrapuestas: los continuadores amanerados de los temas y formas del siglo de oro español y el academicismo y los imperativos ilustrados de las nuevas tendencias que venían de Francia, y que a España llegaron con la dinastía Borbón. El resultado fue una vida literaria centrada en torno a una minoría culta que se interesa por la filología o la historia más que por la literatura en sí misma. Con todo, destacan algunos nombres que si no ejercieron gran influencia en otros países, sí acercaron este gran estilo a la sociedad española; entre ellos destacan Leandro Fernández de Moratín, Benito Jerónimo Feijoo o Gaspar Melchor de Jovellanos.

Otras grandes figuras de la Ilustración europea asociadas con el clasicismo son los escritores ingleses John Dryden y Alexander Pope, y los poetas alemanes Johann Wolfgang von Goethe y Friedrich von Schiller.

Panorama social del clasicismo:

El clasicismo abarcó desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta el primer cuarto del siglo XIX en esta época sucedieron una serie de acontecimientos históricos que influyeron en este estilo musical.

La música, como todas las artes, es una expresión de la cultura. Y por ello se encuentra sometida a las mismas leyes que rigen los demás fenómenos culturales. Evoluciona, como éstos, en ciclos que, vistos a gran distancia, muestran gran similitud. Esta época estuvo marcada por otras artes como la escultura y la pintura como también por la arquitectura y las artes decorativas quienes mostraron un especial desarrollo; a este estilo se le llamó Neoclasicismo; floreció en Europa y Estados Unidos aproximadamente desde el año 1750 hasta comienzos de 1800 y se inspiró en las formas grecorromanas.

Los movimientos revolucionarios establecieron repúblicas en Francia y en América del Norte, los nuevos gobiernos republicanos adoptaron el neoclasicismo como estilo oficial porque relacionaban la democracia con la antigua Grecia y la República romana. Más tarde cuando Napoleón I subió al poder en Francia, este estilo se modificó para servir a sus necesidades propagandísticas. Con el nacimiento del movimiento romántico la prioridad por la expresión personal sustituyó al arte basado en valores ideales.

En esta época Australia fue descubierta por James Watt. Este hecho contribuyó en la filosofía, la ciencia, la literatura y las bellas artes y sobre todos en la música. Éstos campos de cultura comenzaron entonces a tener en cuenta al público general, en lugar de a un selecto grupo de expertos. La música se vio afectada de un modo similar y nacieron los mecenazgos y el público musical moderno.

Los cambios en el lenguaje musical se centraron en los nuevos enfoques de la melodía y la armonía.

El periodo del clasicismo fue testigo de un cambio radical en el papel de los instrumentos de teclado, a medida que iba desapareciendo de forma gradual la función del bajo continuo.

En el norte de Alemania el clasicismo se le llamó empfindsamer Stil (en alemán, `estilo sentimental'). Éste abarca un campo más amplio de contrastes emocionales que el estilo galante, que tendía a ser sólo elegante o agradable.

En España hay un cambio de política, de la monarquía de la casa de los Austrias a la casa de los Borbones. Este cambio se desarrolló en 1700. El testamento de Carlos II de España —sin descendencia— permitió el acceso al trono de Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV y de la infanta española María Teresa de Austria (hija del rey Felipe IV). Sin embargo, el temor a que los Borbones extendieran su dominio sobre la herencia de los Habsburgo españoles movió a Gran Bretaña, las Provincias Unidas y al Sacro Imperio a impugnar el testamento y declarar la guerra. La llamada guerra de Sucesión española finalizó con el reconocimiento general de Felipe V, a cambio de la renuncia de éste a sus derechos al trono de Francia y de la pérdida de los territorios italianos y flamencos.

Características musicales del clasicismo:

  • En general, la música clásica es objetiva, contenida en las emociones, cortesana, refinada, elegante; algo superficial, pero no pobre.

  • Formas. Perfección de las grandes formas y su estabilización. Estructura formal clara y transparente.

  • Las formas instrumentales que desaparecen gradualmente son: suite, coral orgánico, preludio, concerto grosso, fantasía, antigua cantata, toccata; la fuga solo se practica esporádicamente.

  • Formas que sobreviven: variación ...., escasean los oratorios...

  • Formas nuevas:

  • Nace la moderna forma de sonata, procedente de la suite antigua, aplicada al trío, cuarteto, sinfonía y sonata para un solo instrumento.

  • Incorpora la antigua obertura introducida de la opera a la música sinfónica instrumental, dando origen así a la sinfonía moderna que culmina la escuela vienesa.

  • El antiguo “concerto grosso” da paso a al concierto de un instrumento solista acompañado de orquesta (violín, piano...) en la forma de sonata de tres movimientos.

    • Melodía. Claridad y simplicidad melódicas. Frases melódicas nítidas y más cortas regulares y cuadradas que en la época procedente (es corriente la frase de ocho compases), las cuales se abren y cierran con ciertos reposos.

    Incorpora en parte los característicos adornos del barroco. Su contorno melódico deriva del acompañamiento armónico vertical.

    • Estilo homofonico o vertical. El conjunto aparece como acompañamiento armónico de una melodía o tema, al que las restantes voces están subordinadas.

    Desaparece el antiguo bajo continuo.

    Abandono de las formas contrapuntísticas que utiliza solo esporádicamente, especialmente en los desarrollos temáticos.

    • Armonía transparente, no cromatizante; menos compleja que la de Bach; a base de acordes sencillos. Los cambios armónicos relacionan gradualmente temas y secciones en las formas mas variadas (=modulaciones). Las disonancias resuelven satisfactoriamente sin dejar sensación de aspereza.

    Sentido tonal muy transparente, sin marcados cromatismos en sus melodías ni en sus armonías.

    • Instrumentación y orquestación. La música instrumental es más importante que la vocal.

    Sientan las bases de la moderna orquestación.

    Atención al colorido y sonoridad de cada uno de los instrumentos y a su individualidad dentro de la orquesta.

    La extensión de los instrumentos es aun reducida (generalmente evitan registros extremos).

    Los instrumentos que aun no son usuales en al orquesta clásica son: trombones, tuba, flautines, corno inglés, clarinete bajo, contrafagot, arpa, celesta, platillos , xilofón...

    Empieza a desarrollarse el piano, que nació a principios del siglo XVIII.

    • Dinámica (matices y signos expresivos). Atención especial a los contrastes expresivos (nunca bruscos a base de fuerte y piano y al uso del crescendo y disminuendo, en vez de tratar de obtener ingeniosamente (como sucedió en el Barroco) efectos expresivos, contrastando grupos de muchos y pocos instrumentos (por ejemplo, la contraposición del tutti o de toda la orquesta al concertino o pequeño grupo del concerto grosso).

    • Esta música no tiene aun los arrebatos ni apasionamientos del romanticismo, sino que es mesurada, tranquila, sin buscos crescendos o disminuendos.

    • El ritmo es sencillo y reglar(cuadratura rítmica), con silencios intercalaos como descansos contrastes entre temas y melodías; por regla general, guarda un movimiento regular a través de una sección. En el acompañamiento del bajo es frecuente el diseño a base de acordes de tres sonidos en forma sucesiva, que se repiten como muestra rítmica (llamado “bajo de Alberti”, por atribuirse a éste su introducción).

    • En ópera triunfa la reforma de Gluck.

    La opera cómica y bufa rivaliza con la opera seria.

    En general la opera, la misa y la cantata continúan su desarrollo, amoldados al nuevo estilo.

    • La música religiosa adquiere menos desarrollo o predominio. Esta dominada generalmente por el espíritu operístico e instrumental; por lo que parece mas bien hecha para el concierto que para el culto.

    • La música de cámara comprende todas las obras escritas para un reducid numero de instrumentos, que llevan generosamente la forma de la sonata: trío, cuarteto, quinteto, serenata, divertimento, casación...

    • En música pura (especialmente la instrumental): No describe, no imita o significa nada, sino que crea sensaciones.

    • Las obras se clasifican no por nombres sino por números agregados a la palabra latina “opus”, que significa “obra” (op. En abreviatura). Muchos de los nombres que actualmente llevan han sido puestos por sus coetáneos o por la posteridad. Así, los nombres de “Heroica” a la 3ª sinfonía, sonata “Claro de luna” y “Aurora”, de Beethoven, y los de sinfonía “Sorpresa”y “Londres”, de Haydn.

    • Los conciertos públicos de orquesta se implantan en la mayoría de las naciones.

    • Se produce ya una gran consumición musical y expansión de la música editada.

    Principales representantes:

    Joseph Haydn: Nació el 31 de marzo de 1732 en Rohrau an der Keitha, cerca de Viena. Con ocho años entró en la escuela coral de la Catedral de San Esteban, en Viena, donde recibió su única formación académica. A los 17 años abandonó el coro y pasó varios años trabajando como músico independiente. Estudió los tratados de contrapunto y recibió algunas lecciones del prestigioso maestro de canto y compositor italiano Nicola Porpora. Haydn cambió en 1761, año en que fue nombrado director musical adjunto del príncipe Pál Antal Esterházy; en 1762 fue nombrado maestro de capilla. Trabajó para tres príncipes de la familia Esterházy. El segundo de ellos, el príncipe Miklós József Esterházy, fue un gran amante de la música. En Esterházy (Hungría), su lugar de veraneo, Miklós poseía una fundación musical importante, que fue dirigida por Haydn. Además de las sinfonías, óperas, operetas de títeres, misas, obras de cámara y música de danza que el príncipe le encargaba, también hizo que ensayara y dirigiera sus propias obras, así como las de otros compositores. Murió en 1809 después de fracasar en su matrimonio con María Anna Keller.

    Wolfang Amadeus Mozart: Mozart fue un compositor austríaco que destaco en el periodo clásico. Hijo del compositor Leopoldo Mozart. Wolfang Amadeus Mozart fue un niño prodigio, desde los cuatro años, inducido, y dirigido por su padre, se dio a conocer al mundo musical como concertista de piano y violín, viajando por toda Europa. A la vez comenzó su actividad compositiva y con ella, su deliciosa línea melódica, mezcla armoniosa, espiritual, y formal, de tristeza humor, poesía y lirismo romántico, única en toda la historia de la música. Mozart abarcó todos los géneros. De su inmensa producción destacan: las operas le nozze di Fígaro, Don Giovanni, Cosi Fan Tutte y La flauta mágica. La música instrumental y de cámara fueron 41 sinfonías, 27 conciertos para piano y varios para otros instrumentos, serenata, sonatas para piano y para violín y piano. Y obras corales como cantatas religiosas y profanas, numerosas misas, el ofertorio ave verum y el réquiem.

    Ludwig van Beethoven: Beethoven fue un compositor alemán que fue considerado uno de los más grandes de la cultura occidental. Nació en Bonn el 16 de diciembre de 1770. Se formó en un ambiente propicio para el desarrollo de sus facultades aunque excesivamente rígido. El talento musical fue dirigido de forma tiránica por la disciplina de su padre, que era tenor en la capilla de la corte y que maltrataba a Beethoven de tal manera que lo dejo sordo para el resto de su vida. Beethoven empezó de músico en la corte para mantener a su familia. Beethoven marchó a Viena en el año 1792 para estudiar con el compositor austríaco Joseph Haydn.

    En Viena, Beethoven deslumbró a la aristocracia con sus improvisaciones pianísticas, a la vez que llegó a acuerdos bastante beneficiosos con los editores de música de la ciudad. El creciente mercado de publicaciones musicales le permitió trabajar como compositor independiente, algo que Mozart intentó en la década anterior sin conseguirlo.

    De su producción podemos destacar sus 9 sinfonías, las 32 sonatas para piano, los 17 cuartetos, los 5 conciertos para piano, el de violín, la opera de Fidelio, la missa solemnis, el oratorio Cristo en el monte de los olivos, etcétera...

    Bibliografía.

    1 Encuadre cronológico: Enciclopedia Encarta 99. Álvaro Lozano García.

    2 Panorama social: World Wide Web y Encarta 99. Rafael Espinosa de los Monteros Garcés.

    3 Características musicales: Enciclopedia de la música. Irene Llamazares.

    4 Principales representantes: World Wide Web y enciclopedia Encarta 98. Rafael Espinosa de los Monteros Garcés.

    5 bibliografía: Rafael Espinosa de los Monteros Garcés.

    2




    Descargar
    Enviado por:Kafka
    Idioma: castellano
    País: España

    Te va a interesar