Economía y Empresa


Capitalismo


INTRODUCCIÓN

El capitalismo es un régimen económico fundado en el predominio del capital. Es decir, se basa en el precio y los mercados. Siendo su lado contrario el sistema económico socialista el cual es un sistema basado en el predominio de la empresa privada en la organización económica.

En el capitalismo además de otras cosas destaca que los trabajadores son libres y le venden su trabajo al mejor postor. El capitalismo vino a cambiar la economía del mundo, este fenómeno tiene sus comienzos a mediados del siglo XIX.

Este trabajo trata de explicar al capitalismo, como ha ido evolucionando este sistema económico, sus depresiones y sus crisis que ha sufrido a lo largo de los últimos siglos, además de la postura de muchos países ante el capitalismo, como enfrentan los países de Europa principalmente la crisis que es ocasionada por el sistema.

Se explica la manera en que el capitalismo jugó un papel muy importante en el desarrollo de Estados Unidos desde la crisis que enfrentó hasta como se consolidó como potencia económica mundial, simultáneamente al desarrollo de Estados Unidos demás países de todo el mundo enfrentaron otra crisis económica.

En el trabajo también se presenta como en este sistema económico los patrones muestran intereses de competencia frente a otros de su mismo mercado. La propiedad privada entra ahora en juego en economía ya que la tierra y la capital pertenecen a los patrones.

EL CAPITALISMO

Se define como el sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de negocios llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas transacciones en las que intervienen los precios y los mercados. Aunque tiene sus orígenes en la antigüedad, el desarrollo del capitalismo es un fenómeno europeo; fue evolucionando en distintas etapas, hasta considerarse establecido en la segunda mitad del siglo XIX. Desde Europa, y en concreto desde Inglaterra, el sistema capitalista se fue extendiendo a todo el mundo, siendo el sistema socioeconómico casi exclusivo en el ámbito mundial hasta el estallido de la I Guerra Mundial, tras la cual se estableció un nuevo sistema socioeconómico, el comunismo, que se convirtió en el opuesto al capitalista.

Características Fundamentales: A lo largo de su historia, pero sobre todo durante su auge en la segunda mitad del siglo XIX, el Capitalismo tuvo una serie de características básicas:

  • Los medios de producción - tierra y capital- son de propiedad privada. En este contexto el capital se refiere a los edificios, la maquinaria y otras herramientas utilizadas para producir bienes y servicios destinados al consumo.

  • La actividad económica aparece organizada y coordinada por la interacción entre compradores y vendedores (o productores) que se lleva a cabo en los mercados.

  • Tanto los propietarios de la tierra y el capital como los trabajadores, son libres y buscan maximizar su bienestar, por lo que intentan sacar el mayor provecho posible de sus recursos y del trabajo que utilizan para producir; los consumidores pueden gastar como y cuando quieran sus ingresos para obtener la mayor satisfacción posible. Este principio que se denomina soberanía del consumidor, refleja que, en un sistema capitalista, los productores se verán obligados, debido a la competencia, a utilizar sus recursos de forma que puedan satisfacer la demanda de los consumidores; el interés personal y la búsqueda de beneficios les lleva a seguir esta estrategia.

  • Bajo el sistema capitalista el control del sector privado por parte del público debe ser mínimo; se considera que existe competencia, la actividad económica se controlará a sí misma; la actividad del gobierno sólo es necesaria para gestionar la defensa nacional, hacer respetar la propiedad privada y garantizar el cumplimiento de los contratos. Esta visión decimonónica del papel del Estado en el sistema capitalista ha cambiado mucho durante el siglo XX.

  • Plusvalía y Capitalismo: Pago al propietario de un factor de producción (trabajo, energía) de una cantidad inferior al valor del producto.

    Este término puede tener dos significados básicos: el primero es el uso de bienes materiales, normalmente con un suministro fijo, para los fines establecidos por los que se realiza su manipulación, y el segundo, más negativo, es un elemento clave de la teoría marxista sobre la lucha de clases. Esta teoría establece la teoría del valor del trabajo, que a su vez conlleva el concepto de plusvalía. Sostiene que el capitalista paga al trabajador el coste de su producción, pero recibe el precio de mercado del producto, paga costes externos (alquileres, etc.) y se embolsa el resto (la plusvalía) como ganancia. Esta idea de la plusvalía o ganancia nunca fue postulada por los economistas liberales y, en cualquier caso, parece estar en desacuerdo con la doctrina clásica del intercambio de equivalentes económicos.

    Crisis y Depresiones del Capitalismo.

    La gran crisis de fines del año 1929 y la profunda depresión subsiguiente marcarán, con el surgimiento del mundo comunista, un hito prominente en la historia del desarrollo económico-social de la Humanidad.

    La Gran Depresión tuvo repercusiones prácticas y teóncas. En el orden práctico, las lecciones de la crisis no hacen sino corroborar los puntos de vista anteriormente enumerados sobre las funestas consecuencias del Capitalismo de grupos antagónicos.

    Una vez superadas las crisis de reconversión—de una economía de guerra a una economía de producción agrícola e industrial—, las naciones, tanto europeas como, sobre todo, americana, prosperaron inauditamente.

    Estados Unidos, y aun Latinoamérica, proseguía y acumulaba el impulso recibido al tener que abastecer al continente europeo, sumido primero en la lucha, arruinado después, pero con deseos y necesidad de rehacerse.

    Poco a poco y con sobresaltos Europa se reconstruye. A partir de 1925 logra alcanzar los niveles de producción conocidos antes de la guerra.

    En Estados Unidos la ola de optimismo era gigantesca.

    Su naciente, y pronto vigorosa, industria del automóvil y maquinaría agrícola va ampliándose sin cesar, gracias a las nuevas modalidades de la producción en y de la venta a crédito. Actuando como foco impulsor, a la vez que promueve el auge de la producción agrícola, sacude en sus cimientos a las industrias básicas y a las ramas extractivas de carbón y minerales.

    La ola de optimismo es secundaria; viene apoyada en la precedente del más intenso trabajo y de la difusión del poder de compra entre las clases trabajadoras.

    Con todo, el optimismo acabó degenerando, sobre todo en Wall Street, en ardiente especulación. Las acciones cotizadas en la Bolsa de Nueva York totalizaban, según los montos suscritos y los curves registrados, en los diversos años:

    1925 = 27.000 millones de dólares.

    1929 = 89.000 millones de dolares.

    Donde aparece con claridad la ficticia hinchazón de los valores.

    Como ejemplo ilustrativo se propondrá el famoso caso "Ward", quien, deseando alzarse con la fabricación y comercio del pan en las mayores ciudades, halagaba a los propietarios de las panaderías, ofreciéndoles altísimos precios pare la compra de sus negocios. Una vez adquiridos estos, emitía acciones representativas del capital social así sobrestimado; las ofrecía en la Bolsa, y con el producto de la venta volvía a comprar y asociar al negocio nuevas panaderías a precios exagerados. Resultado: que a la vez que, ciertamente, iba monopolizando el negocio, y por lo mismo, cobrando fuerza económica, acentuaba la desproporción entre el valor nominal de las acciones, el capital social y los verdaderos activos que la empresa poseía. En tales circunstancias los dividendos repartidos no podían ser sino ficticios. La ruina futura era inevitable.

    Como se ve, aunque las gentes se creían, y aun eran mas ricas y ello estimulaba las compras y la producción, la prosperidad no estaba bien cimentada.

    Un segundo factor decisivo pare el futuro desencadenamiento de la crisis hay que reponerlo en el sector de crédito internacional.

    Los aliados habían impuesto a los vencidos fuertes pagos en concepto de reparación por los gas tos y destrucción de la guerra.

    Alemania supo jugar bien la partida. Era imprescindible que se le ayudara a reconstruirse, si se pretendía obligarla a pagar tan cuantiosas sumas. Saneada desde 1924 por el mago alemán de las finanzas, H. Schacht, la situación monetaria, los capitales extranjeros, franceses, ingleses y americanos, comienzan a fluir sobre Alemania y Austria. Los elevados tipos de interés pagados por los Bancos germanos eran un especioso atractivo. Aunque recibidos a corto plazo, esos fondos son prestados por los Bancos a la industria a largo plazo. Cuando sobrevenga la crisis, estarán ampliamente inmovilizados y será imposible el repatriarlos.

    Así las cosas, los primeros síntomas de malestar provinieron del sector agrícola norteamericano.

    Al recuperarse totalmente Europa y seguir América acumulando los impulsos recibidos, se va a crear una peligrosa situación de excedentes de producción agrícola, que no encontrara fácilmente salida en los mercados y presionara a la baja sobre los precios.

    Por ejemplo, en el sector azucarero, con anterioridad a la guerra, Europa y América producían por partes iguales un total de 181 millones de quintales de azúcar —de remolacha y carne—. Durante la guerra, la producción europea se reducía a 26 millones, mientras que la americana aumentaba a 132 millones. Pero pare el año 1928 la producción recuperada de Europa alcanzaba a 83 millones de quintales, mientras que la americana seguía creciendo hasta superar los 185 millones, más que la europea y americana conjuntamente antes de la guerra.

    El caso del azúcar es tan solo un indicio de lo ocurrido con otros productos agrícolas, particularmente al trigo, maíz, etc.

    Al gravitar pesadamente los excedentes, sobrevino el hundimiento de los precios, el retraso en los pagos de la maquinaria comprada a crédito por parte de los agricultores, las primeras dificultades de la industria americana y de sus Bancos.

    Al querer estos sostenerse con la repatriación de fondos desde Europa, pusieron en aprieto a los Bancos alemanes. Fueron precisamente las demandas de retiro de fondos las que, provocando la quiebra de la poderosa institución del "Creditanstalt", de Viena, desencadenaron la ola mundial de pánico. Los Bancos americanos, queriendo anticiparse unos a otros en la repatriación de capitales, agudizaron la crisis y obligaron a Alemania a decretar la moratoria bancaria.

    El edificio de la prosperidad se venia abajo.

    La especulación jugó entonces a la baja y las cotizaciones en Wall Street se hundieron en el abismo. Las acciones totalizaron en:

    1932 = 15.663 millones de $, contra los 89.000 de 1929.

    La caída arruinó a los que antes se creían ricos, empezó a frenar las compras y acabó arrastrando tras sí a todos los precios: los industriales al por mayor bajaron en un 32 por 100; los agrícolas lo habían hecho en un 54 por 100.

    El frenazo consiguientemente experimentado por la producción industrial trajo como consecuencia inevitable la reducción de sueldos y salarios en un 40 por 100, aun pare el personal ocupado.

    Pero, sobre todo, el paro obrero forzoso alcanzo niveles anormales y extraordinarios. En los años peores se contaron en EE. UU. hasta catorce millones de obreros parados. De 1931 a 1940 hubo siempre, por lo menos, siete millones de obreros sin trabajo.

    Como Norteamérica había empezado a ser ya la potencia económica dominante, la crisis se propagó a todo el mundo. La producción global alemana se redujo en un 40 por 100; sus exportaciones lo hicieron en un 50 por 100. En Inglaterra los obreros parados pasaron de los cuatro millones.

    Nada tiene de extraño que, en estas circunstancias, germinara en la mente de Lord Maynard Keynes la Teoría General del Empleo, del Interés y de la Moneda. Libro publicado en 1936, que iba a reorientar la Teoría Económica.

    Esos graves hechos explican igualmente los anhelos por una seguridad social total, que culminaron en el informe de Sir W. Beveridge y en el programa implantado después de la segunda guerra mundial por el partido laborista inglés.

    COMENTARIO FINAL

    Mi opinión es que con el Capitalismo como sistema económico vino a hacer un cambio radical en la economía mundial. Ya que se intercambia trabajo por intercambio de bienes y esto a mi perspectiva es lo mas justo.

    No todo fue éxito en el Capitalismo ya que tuvo muchas decadencias, pero revolucionó la economía de países como el de Estados Unidos, que se supo reponer a su crisis llegando a ser la principal potencia económica del mundo.

    Además el Capitalismo vino a poner una estrecha relación entre vendedores y compradores. Y pienso que es para mí de lo más rescatable del Capitalismo, ya que se destruyeron los monopolios y así se pudieron crear muchas empresas que dieron auge a una mejor economía.

    La competencia que se generó a raíz de la propiedad privada llamó mi punto de atención ya que los patrones tuvieron que hacerse de estrategias para hacer crecer su mercado.

    Además que los trabajadores fueran libres de vender su mano de obra a quienes les pagar mejor me parece que era lo mejor en cuanto los trabajadores le podrían proporcionar.

    El Capitalismo fue la forma en que países europeos y Estados Unidos lograron su desarrollo y su consolidación. Fue la mejor manera del desarrollo de los mercados ya que tuvo fin el monopolio.

    Por fin se le pagó a los trabajadores lo que merecían y el trabajo fue por fin tomado en cuenta.

    Estructura Socio-Económica de México

    El Capitalismo

    Nombre del profesor:

    Nombre de los integrantes:

    5º A

    H. Veracruz, Ver. a 7 de Septiembre de 2001




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    Enviado por:Falloriano
    Idioma: castellano
    País: México

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